‘Nort Exit’

En medio del COVID-19, con funestas consecuencias, surgen seres solidarios que no malgastan el tiempo y menos andar esparciendo “fake news” sobre el curso y efecto de la peste del siglo XXI. Ellos son un grupo de 120 profesionales de la salud, entre médicos y enfermeras de la localidad quienes se contactaron y llegaron al acuerdo de organizar un programa denominado “Médico en tu casa”, o a domicilio, como era antes, con la diferencia, enorme, dicho sea de paso, de que esta atención será gratuita.

En estos días de escasez de recursos económicos por la causa de todos conocida, es sumamente valiosa la aportación y sobre todo deja de manifiesto el espíritu de solidaridad.

Este programa, por cierto, me recuerda al que proyectó el doctor SERAPIO CANTÚ BARRAGÁN durante su campaña política electoral del 2018. Lamentablemente no alcanzó su objetivo por haber sido víctima de traiciones de una estructura en la que él confió ciegamente, habida cuenta de que una parte de ella él la había formado.

Pero eso ya es historia, finalmente esos traidorcetes están donde se merecen: los tratan con la punta del pie por la sencilla razón de que no son de fiar. Quien los compró sabe que, así como sin ningún recato le hicieron al Judas, de nuevo lo harán, por algo dicen en el rancho: quien traiciona una vez, lo hará dos veces, y ahora, por unos mendrugos reciben el trato correspondiente.

Pero esos también ya son historia, el presente es la positiva actitud de médicos y enfermeras que no han querido dar a conocer sus nombres con lo cual cumplen cabalmente con la obra de servicio a la que todo buen cristiano está obligado.

En los próximos días se darán a conocer los números telefónicos a donde la gente podrá llamar, y reitero, el servicio será gratuito, no así la adquisición de medicamentos, cuyas recetas tendrían que surtirse en cualquier farmacia, pero incuestionablemente la atención médica es una enorme ayuda en estos días que un doctor vaya al domicilio y sin costo alguno.

Por otro lado, el mundo de la política, como ya lo dije en anteriores entregas, pasó a segundo plano. Incluso el movimiento denominado “Nort Exit” que significa que los estados del norte del país se quieren salir de la República Mexicana.

Por mi parte he de decir que los del noreste hasta ayer no habían expresado esa intención. Han dicho que no están de acuerdo con la distribución que hace del presupuesto la Federación y El Bronco, JAIME RODRÍGUEZ, de Nuevo León, ese sí se aventó a fondo anunciando que se saldría del llamado pacto fiscal si así fuera necesario.

FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA, de Tamaulipas y MIGUEL RIQUELME, de Coahuila, hasta el momento no han dicho, así con todas sus letras, que también, si no atienden sus peticiones se saldrán del pacto fiscal.

Y el que sí no se anduvo por las ramas fue el gobernador de Jalisco, ENRIQUE ALFARO RAMÍREZ, manifestando que si no lo atienden hasta podrían salirse de la federación.

Bófanos Petra, esto provocó que por allá ya estén hablando de la República del Bajío, y en Monterrey algunos deschavetados ya brincan de júbilo ante el sueño de dejar de ser Estado de Nuevo León para transformarse en República del Noreste, que incluiría a Tamaulipas y Coahuila.

Por mi parte no creo lleguen a tanto, pero bien harían los gobernadores hacer un pronunciamiento al respecto. Ese rumor hasta hoy no está causando daños en la ya maltrecha economía nacional y tampoco ha agitado la Bolsa Mexicana de Valores, ni perturbado la paridad cambiaria peso dólar, que, dicho sea de paso, nuestra moneda en los últimos días se ha venido devaluando, pero por otras causas, lo cual quiere decir que han tirado a lurias la supuesta intención separatista.

El gobierno federal ni se ha dado por aludido y por lo mismo no ha dado respuesta alguna sobre esa supuesta intención, ni siquiera al amago de salirse del pacto federal.

El problema de la pandemia los tiene ocupados al 100 por ciento como para andar perdiendo el tiempo en murmullos que brotan por las redes sociales y en dos que tres comentaristas de la política.

Incluso los programas informativos tanto televisivos como secciones especializadas de los diarios no se han ocupado de ese asunto que vaya que es importante y de forma grave, pero en mi personal enfoque no le han puesto atención porque por hoy el problema que tenemos y muy grave es otro.

La cuarentena se va a extender, algunas dependencias públicas como el poder Judicial de la Federación ya anunció que los Ministros de la Corte siguen sin actividades al público hasta el 15 de mayo mientras que en los tribunales y juzgados hasta el 30 del presente mes y en Tamaulipas de un momento a otro harán un pronunciamiento a ese respecto.

Entre tanto los desquiciados siguen esparciendo corrosivos rumores por las redes sociales con la peregrina idea de derrumbar al presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.

Festejaron hasta el paroxismo que, en la encuesta de El Financiero, el MORENA ya descendió al 18 por ciento de aprobación. Fue tanto el júbilo que no se dieron cuenta que esa misma encuesta el PAN registró un pobrísimo 10 por ciento y el PRI un 8 por ciento, con lo cual están empatados en segundo lugar, que en estos tiempos segunda posición y nada es la misma cosa.

Lo peor para los simpatizantes de los albiazules y de los priistas es que el declive del MORENA y de López Obrador en nada les ha ayudado para salir del pozo en el que se encuentran. La decepción está engordando la abstención.

En esa misma encuesta de El Financiero casi un 60 por ciento manifestó no tener ya preferencia electoral, que de seguir así las cosas, las elecciones de junio del 2021 habrá una enorme abstención. Se calcula a niveles del 60 por ciento y a final de cuentas AMLO y sus morenos terminarían saliéndose con la suya porque por muy mal que se les den las cosas, calculo que mínimo obtendrían un 20 por ciento de ese 40 por ciento que a como están las cosas acudirían a votar.

Esto quiere decir que ese 20 por ciento sería la mitad de los votos y por lo tanto se llevarían 150 de las 300 curules de mayoría, a lo mejor 120 pero obvio que el PAN no se llevará todo el restante, que serían 180 diputaciones. 

Como ambos van parejos en el mítico segundo lugar se repartirían las curules y pudiera ser que hasta por partes iguales, lo que implica que para los panistas habría 80 curules y otras 70 para los tricolores, y el resto, para la pedacera.

Pero son cálculos mas no sobre sueños sino sobre encuestas y algunos no creen en ellas, pero como la política es especulación en un 90 por ciento cabe tomar en cuenta esos datos.

Y por hoy, BASTA.

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