Sólo quedan 12 días de campaña política

La lluvia del pasado martes fue intensa, lo que nos recordó los famosísimos aguaceros de mayo de tiempos muy pasados. Ahora regresaron con lo cual le dieron una refrescada a la ciudad, y no se diga los beneficios derramados para los ganaderos, aunque para los agricultores estas lluvias ya fueron después de atole.

Y en la ciudad, el caos y el andar corriendo de un lado a otro para sacarle la vuelta a los congestionamientos vehiculares, pero era inútil, por donde uno se fuera había problemas. Las calles se inundaron y como siempre la culpa es de esa pésima costumbre que tenemos en Reynosa de andar arrojando basura en la vía pública.

El agua de la lluvia arrastró la basura tapando las alcantarillas con el consecuente bloqueo que causó encharcamientos, aunque eso de encharcamientos es un decir porque hubo calles que parecían ríos caudalosos.

Y ahora falta el otro daño como es el que sufrirá la tubería del drenaje sanitario a la que ingresó torrentes de agua y con mucha basura que para cuando tenga usted este periódico en sus manos el brote de aguas negras será como es la tradición, o sea por aquí y por allá. Afortunadamente no causaron daños materiales de consideración estas lluvias por las colonias asentadas en las partes bajas de la ciudad.

Pero no fue todo, el festejo del Día del Maestro, como se lo comenté ayer, se aguadó. Se organizó al aire libre y en un lugar colindante al río Bravo. Colocaron carpas, la imprevisión consistió en no consultar con el Servicio Meteorológico que desde el lunes estaba pronosticando hasta granizo por esta región y por lo visto los profesores no lo leyeron o si lo hicieron no creyeron en la exactitud del pronóstico.

El caso es que cuando el festejo estaba animándose por las rifas de regalos, que se viene el aguacero, y ¿qué cree?... los primeros que corrieron fueron los funcionarios municipales, lo que motivó se suspendiera la rifa y terminaran como aguados en sopa todos los asistentes.

Lo anterior quedará para la anécdota chusca porque afortunadamente no hubo mayores percances, aunque los profesores criticaron agriamente la actitud de los funcionarios del municipio que a los primeros truenos y relámpagos mejor corrieron para evitar el remojo de sus valiosas prendas y ya es de imaginarse las reacciones que habrá entre el magisterio en esta temporada política a la que ya le faltan 12 días, que no son muchos, sobre todo para revertir tendencias que todo indica la mayoría de los votantes ya tienen decidido por quien lo harán.

Lo anterior me recuerda una encuesta que reveló el alto grado de animación que prevalece en nuestra querida Reynosa: un 80 por ciento dijeron tener metido entre ceja y ceja acudir a votar el próximo dos de junio. No les preguntaron por quién lo harán, pero ni falta hizo, los que han participado en campañas políticas lo mismo como candidatos que como coordinadores y operadores bien saben que cuando sale a votar la gente en masa, digamos, de un 70 por ciento del padrón electoral para arriba prácticamente hace añicos cualquier estrategia electoral.

Obvio que el resultado de este sondeo puso los pelos de punta y los focos en color rojo a los partidos en el poder que hasta los niños saben que las instancias estatales y municipales están en manos del PAN y las federales del MORENA.

La incógnita a descubrir es a cuál instancia le traen más ganas como para irse a desquitar el próximo dos de junio, aunque por otras encuestas donde sí preguntaron por cuál partido votarán, los candidatos panistas y morenistas salieron como en un mano a mano, lo que da a entender que no hay mucha rabia que digamos en contra de ellos.

Lo que sí resulta sorprendente es la aceptación que están teniendo los candidatos de Movimiento Ciudadano que pelean palmo a palmo por el tercer lugar con los candidatos priistas a quienes propios y extraños les reconocen el esfuerzo que están realizando por irse recuperando.

El caso es que, si el mal humor social se hace presente el día de la elección, los pronósticos se caerán a pedazos. Pero no basta ese ambiente, se requiere que los candidatos tengan la habilidad para encauzar ese llamado mal humor social hacia las urnas.

Pero de que les trae preocupados a los que están en el poder el resultado de que un 80 por ciento de los votantes planean acudir a las casillas no hay duda, así que una televisora regional dio a conocer el resultado de otra encuesta en donde se registró que solamente el 35 por ciento del padrón irá a votar.

De plano ni le despistaron el origen y la intención en la confección de ese sondeo de opinión dado que hasta los niños saben que cuando hay abstencionismo el beneficiado son los candidatos de los partidos en el poder, así que ya veremos cuál de las dos encuestas tuvo la razón.

Y hablando de otras cuestiones, un grupo denominado Reynosa Eco está convocando a una reunión el próximo domingo en la plaza principal para de ahí partir a desarrollar jornadas de limpieza de calles y siembra de árboles.

Muy loable la actitud de estos jóvenes “Vengadores”, que así se llaman, que de pasada demuestran que en Reynosa la juventud encauza actividades de mucho beneficio como es el cuidado del medio ambiente, así como incentivar la cultura de no andar tirando basura en la vía pública que ya vimos este pasado martes la de problemas que causó el no mantener limpias las calles de nuestra querida Reynosa y en este caso no se puede culpar a la autoridad municipal. Ni modo de recriminarle que no traiga personal detrás de toda la gente para ir levantado la basura que van tirando.

Es un hábito que ya desde cuando deberíamos de haber abandonado porque bien sabemos los daños que causa, pero tercos como somos, seguimos en las mismas.

Ojalá y el ejemplo de estos jóvenes sean el punto de partida para hacer de Reynosa una ciudad limpia. 

Y por hoy, BASTA.

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