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Revocación de mandato

Como seguramente ya lo saben mis lectores, la Cámara de Diputados aprobó la revocación del mandato, desde el presidente de la República, pasando por gobernadores, presidentes municipales, senadores, diputados federales y diputados locales.

La sola aprobación de tal cosa provocó que se alborotaran las galleras, no solamente de los partidos políticos sino también las de algunos organismos empresariales como la COPARMEX, de  quien su presidente GUSTAVO DE HOYOS a través de un video que difundió por redes sociales expresa su inquietud por esa decisión porque para don Gustavo, detrás de ello viene la reelección para presidente de México, aunque el presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR prometió que el día de hoy en su conferencia de prensa matinal se comprometerá por escrito a no reelegirse pues dice que él es un maderista de puro corazón y pretender tal cosa es ir en contra del espíritu que encausó el movimiento social de 1910.

Revocación de mandato

Nomás que no todos le creen. Sucede que en los documentos oficiales que finalizaban con la leyenda “Sufragio Efectivo, no Reelección”, por disposición de sabrá Dios quien, esa frase ya no aparece inserta en los oficios del gobierno federal, y a lo mejor eso es lo que trae acalambrados a los partidos políticos, obvio, menos al MORENA y satélites, así como a los organismos privados que siguen en camorra con AMLO pero que para desgracia de ellos por la poca confianza ciudadana que les tienen ni cosquillas le hacen al presidente de México lo que le digan estas organizaciones civiles a las que por cierto varias de ellas ya la van a destetar de la ubre presupuestal y eso explica el berreadero.

Pero volviendo con el tema de revocación del mandato, en mi personal enfoque no hay motivo para el escándalo. Se entiende que a la COPARMEX se le paren los pelos de punta, es un organismo de marcada filiación panista lo cual no es pecado, lo doloso es que lo oculten y traten de aparentar ser un organismo apartidista que en los hechos reiteradamente han demostrado que no lo son.

Por lo mismo, sus reclamos hoy suenan huecos, son producto del dolor y todavía no asimilan que el pasado primero de julio el infeliciaje les pasó por arriba y no solamente eso, les bailó un jarabe tapatío en la espalda.

Mientras no entiendan que están lo que se dice en la lona, no podrán levantarse.

Lo mismo sucede con los partidos políticos como el PAN y el PRI, sobre todo los primeros que siguen creyendo que el país solamente lo pueden gobernar quienes hablen en inglés y hayan estudiado en Harvard, Yale e incluso en universidades no prestigiosas, pero tienen que estar en el extranjero, si no, nomás no vas a servir.

Entonces, ante tanta soberbia es difícil que entiendan su situación: están en la lona y ahí van a seguir y ya podrán desgañitarse los expertos tecnócratas presagiando todas las calamidades habidas y por haber y López Obrador sigue caminando muy seguro porque a diferencia de ellos se ve que su gobierno si trae rumbo y ese es atacar la corrupción, ayudar a los pobres, el gran problema que es el de la inseguridad sigue pendiente.

Le apuesta AMLO a la Guardia Nacional, y nosotros también porque lo que es a las demás corporaciones policiacas ya no caso tiene voltear a verlas.

Aquí estamos y ya solamente como alternativa el ruego a Dios. Se nos hacen largos los días para el arribo de los 600 guardias nacionales que tienen prometidos para nuestra querida Reynosa.

Dios quiera no se les quiebre el ánimo y sobre todo el compromiso que se van a echar encima como es restaurar la tranquilidad por nuestra ciudad que día a día vivimos en la zozobra.

Entonces, y haciendo un recuento de todo lo anterior puedo decir en pocas palabras que, al PAN y al PRI, sobre todo a los albiazules les trae muy preocupados la aprobación de la revocación del mandato. La razón es muy simple: los panistas cuentan con 11 gobernadores, y los priistas con 12 y la evaluación que realizó el periódico El Universal sobre confianza ciudadana su resultado no deja bien parados a los gobiernos estatales que no llegan ni a un 10 por ciento de confianza y los gobiernos municipales salieron peor, ligeramente arriba del 6 por ciento.

Entonces, esos porcentajes por supuesto que los conocen los partidos políticos y desde luego que están conscientes que en un proceso de revocación de mandato una buena parte de los mandatarios estatales van a caer porque no serán refrendados en el cargo.

Y más les inquieta por la circunstancia de que ese proceso de revocación de mandato se pretende que esté a cargo del INE y no de los Institutos Estatales Electorales.

Por ello los diputados panistas están pidiendo que entre en vigencia la revocación del mandato hasta el año 2024 que es cuando va a concluir su sexenio López Obrador.

Descarto de antemano que los legisladores morenistas y los de otros partidos que ya se sumaron a su causa como del PRD y algunos del PRI vayan a atender esa súplica.

El objetivo es que esa revocación del mandato se aplique en 2021 para que coincida con las elecciones intermedias para diputado federal, lo que equivale que López Obrador volverá a aparecer en la boleta electoral y a como están las cosas lo más probable es que los candidatos a diputados federales morenistas hagan chuza en esas elecciones, algo que de pasada deja fuera el peligro a los gobernadores y a los presidentes municipales que para junio o julio de 2021 ya habrán rebasado la mitad de sus respectivos periodos por lo cual estos pueden respirar tranquilos, aunque andan algunos diputados como ALEJANDRO FERNÁNDEZ NOROÑA insistiendo en que la revocación del mandato se aplique a partir del momento de su publicación en el periódico oficial de la Nación que muy probablemente será antes de septiembre de este año y entonces a muchos de los gobernadores y presidentes municipales esa revocación de mandato les caería en el 2020, allá por los meses de marzo o abril.

Lo anterior quiere decir que en Tamaulipas el próximo año ahí por la Semana Santa podía llevarse a cabo este proceso que, aunque algunos lo ven como el inicio de abolir la no reelección, como se trata solamente de un refrendo para seguir en el cargo o dar por terminada la gestión antes de que concluya el periodo, eso no tiene nada que ver con el principio de no reelección.

Pero veremos si hoy el presidente López Obrador, como lo prometió se compromete mediante escrito a no participar en una reelección, aunque los legisladores le hagan el favor aboliendo esa disposición.

Como dirían en el rancho: no te revientes riata que ya nomás falta el ultimo tirón.

Y por hoy, BASTA.

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gilberto.banda@elmanana.com