Quieren el nombre de García Rojas en una calle

En entrega anterior les comenté sobre los prospectos del PRI y el MORENA para las elecciones para diputado local que, a Reynosa, como lo saben mis lectores, le corresponden cuatro, mismas que están en poder de panistas y obvio que en junio de 2019 las querrán mantener en sus manos.

No es tarea fácil con todo y que tienen el control de las estructuras en 31 de los 43 municipios.

El efecto López Obrador, por las medidas fiscales que determinó su gobierno vaya que han resultado de un impacto benéfico en esta ciudad y las demás fronterizas con Estados Unidos de América, aparte de que a sus adversarios -léase panistas y priistas- les ha ganado de todas, todas.

Como que no han agarrado bien la onda ni albiazules ni tricolores que ser oposición no significa darle contra al presidente únicamente en las decisiones que vayan en perjuicio del pueblo, y hasta hoy, todas las determinaciones de AMLO han sido pensando en el beneficio de las mayorías.

Eso no lo entienden ni a nivel comité ejecutivo nacional ni a nivel directivo estatal. KIKO ELIZONDO, el que la hace de presidente albiazul en Tamaulipas torpemente se lanza contra las decisiones de López Obrador. El pueblo tamaulipeco, como es natural, lo ignoró como el pueblo a nivel nacional hace otro tanto con MARKO CORTÉS quien de plano ya no le pega a la pelota ni con guitarra.

Pero centrándonos en lo local y concretamente en el panismo, de los cuatro diputados que representan a Reynosa tiene en dos de ellos el intento de la reelección: LUIS RENÉ CANTÚ a quien le apodan “El Cachorro”, y JUANA SÁNCHEZ. En mi personal enfoque solo esta última como que da el perfil para pretender tal cosa.

Pero por lo pronto ya levantaron la mano los dos al igual que otros 18 diputados locales panistas por todo Tamaulipas.

Entonces, quedan dos plazas y de los militantes conocidos no dan pistas de querer entrarle como lo serían JAVIER GARZA DE COSS y RAÚL LOPEZ, el primero representante del gobierno del estado en la región norte y el segundo, titular de la oficina fiscal.

En cambio, trasciende que GERARDO PEÑA FLORES podría ser candidato a diputado local, pero se me hace que la va buscando por la vía plurinominal para no exponerse a un descalabro que lo dejaría fulminado y fuera de la carrera por la candidatura a gobernador.

Otro prospecto es CARLOS PEÑA ORTIZ que ahora como voluntario social del DIF anda por las colonias, y me cuentan que se mueve como pez en el agua. Su candidatura no pareciera tener ningún problema consolidarse. Materialmente plancharía las relaciones de la alcaldesa MAKI ORTIZ y el comandante en jefe de los panistas tamaulipecos que no es otro que FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA.

Más tampoco va a estar fácil ponerle listón a esa candidatura, no mientras no se defina quien quedará al frente de la COMAPA Reynosa que inexplicablemente se preocupan más por la gerencia general que por la solución de los problemas que ocasionan las fallas en los servicios de agua y drenaje.

Entonces, si los panistas de la localidad y los que están en Ciudad Victoria se reencuentran amistosamente y no sólo de dientes para afuera, podrán presentar una cuarteta con posibilidades de refrendar las cuatro diputaciones locales que representan a nuestra querida Reynosa.

Se ve sencillo, pero al igual que todo lo que se ve fácil a la hora de la hora no lo es.

Por otra parte, muy buena propuesta hizo por las redes sociales el exdirigente petrolero de la Sección 36 y exdiputado local RIGOBERTO DE LA VIÑA CANTU en el sentido de imponer el nombre de don ANTONIO GARCÍA ROJAS a alguna de las avenidas de la localidad.

A fe mía tiene mucho más méritos que cualquiera de los otros “héroes” locales con que bautizaron calles y colonias.

Don Antonio, recuerdo que cuando lideró la Sección 36 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, siendo senador de la República emprendió un programa de construcción de escuelas. No recuerdo el número exacto, pero fueron treinta y tantas por diversos municipios tamaulipecos.

Se dijo que esa decisión no fue sin conveniencia alguna, trataba de apuntalar sus aspiraciones para la gubernatura de Tamaulipas.

Suponiendo que así fuere, ojalá y todos los que han pretendido, ya no digamos ser gobernadores sino alcaldes y más aun los que llegaron a serlo, hubiesen previamente desarrollado actividades de beneficio social, no que todos, absolutamente todos para que nadie se sienta discriminado, solo trabajaron para su sano. Y hay testigos, no creo que haya alguna persona que me pueda desmentir.

Entonces, sentado que hay méritos suficientes por parte de don ANTONIO GARCÍA ROJAS, que no sólo acarreó beneficios para los trabajadores petroleros, se me ocurre que un muy buen lugar y muy adecuado y muy justo para que se le imponga, o son los patios de lo que fuera la refinería en donde se piensa construir un parque temático y en donde por cierto el DIF estatal a fines del año pasado desarrolló un evento de modas en forma muy exitosa y teniendo como fondo las esferas, salchichas y pipas de lo que fuera uno de los emblemas de Reynosa: la refinería.

Y RIGOBERTO DE LA VIÑA propone que la avenida JESÚS ELÍAS PEÑA que fuera líder obrero a nivel estatal en Tamaulipas se le cambie por el de García Rojas, o bien, otra de las avenidas con nombre de “héroes” locales o de otras partes como el citado Elías Piña, que creo era originario de Tampico y que ningún beneficio dejó a nuestra querida ciudad por lo que no tiene mérito alguno para que una de sus calles principales lleve su nombre.

La propuesta de RIGOBERTO DE LA VIÑA debe ser ponderada sin celo alguno por quienes toman decisiones de este tipo.

Y por hoy, BASTA.

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