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Pesada lápida sobre la espalda de Pepe Meade

ENRIQUE PEÑA NIETO en mi personal enfoque es un caso muy singular de la política mexicana. Emergió como aspirante a la candidatura presidencial sin mayores antecedentes que el haber sido secretario de finanzas del Gobierno del Estado de México y luego gobernador, para de ahí apuntarse a la sucesión presidencial.

Ya como candidato ha sido el más golpeado de toda la historia. De zonzo o inculto no lo bajaron, pero éste no perdió el tiempo en contestar ataques, se limitó a seguir con el guión trazado.

Pesada lápida sobre la espalda de Pepe Meade

Incluso cuando le fue como en feria en la Universidad Iberoamericana los muchachos no lo hicieron salirse de sus casillas. Él siguió en lo suyo y montado en el liderato de las tendencias electorales que finalmente lo llevaron a la presidencia de la República y en forma inobjetable porque a diferencia de las elecciones presidenciales del 2006, en las del 2012 ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR no la hizo de tos.

Ya como presidente tuvo un principio de expectativas, pero dentro del primer año afloró la Casa Blanca que su esposa ANGÉLICA RIVERA adquirió a plazos y en dizque cómodos abonos. El escándalo fue mayúsculo a tal grado que orilló a que “La Gaviota” en un video anunciara y con el rostro desencajado que cancelaba la operación de compra venta.

Pero el daño estaba hecho, la propaganda negra le sigue de largo, y así tras ese tropiezo emprendió el programa “Moviendo a México”. El objetivo era reformar la Constitución política de México a fin de permitir la inversión privada en el rubro de los energéticos.

Desarrolló una excelente labor de cabildeo y logró lo que no pudieron CARLOS SALINAS DE GORTARI, ERNESTO ZEDILLO, VICENTE FOX y FELIPE CALDERÓN.

Fue un éxito que levantó los bonos políticos de Peña Nieto con todo y las persistentes criticas al respecto de parte de quienes viven del cuento y del sablazo que ya se sabe que detrás de ellos están los grupos afectados así como los izquierdosos que siempre califican de traición a la patria todo lo que implique permitirle a la IP invertir en terrenos sagrados, léase el petróleo, zurdillos que nada dicen cuando sindicatos chafas y carentes de convicciones hacen de las suyas al amparo de un nacionalismo mal interpretado.

Pero bueno, ya se sabe que esas gentes son así pero aun así no se desinflaron. Le siguieron con la campaña sistemática de tal forma que Peña Nieto ha sido el presidente más vilipendiado porque Salinas de Gortari lo fue al final de su sexenio, pero a Enrique a partir del segundo año de gobierno le han tupido un día sí y otro también y entre eso y los errores de su administración se encuentra con el porcentaje más bajo de aceptación ciudadana de todos los presidentes desde Salinas de Gortari a la fecha.

No se le compara ni con MIGUEL DE LA MADRID, JOSÉ LÓPEZ PORTILLO, LUIS ECHEVERRÍA y GUSTAVO DÍAZ ORDAZ porque en esas épocas no se acostumbraba a medir la aceptación ciudadana con que contaba el presidente y nadie se atrevía a hacerlo en plena dictadura tricolor. 

Simplemente se daba por descontado que el primer mandatario de la nación era un ser inmaculado, todopoderoso e infalible y con esos atributos aquel que osara andarle jalando los bigotes al tigre no le iba a ir nada bien.

Por ello se puede decir que Peña Nieto es el presidente más criticado lo mismo en lo que va del presente siglo que en los últimos 24 años del pasado.

Pero ahí está despachando desde Los Pinos. Hay veces que se ve demacrado, hay otras que se le ve chispeante. La versión que padece una enfermedad y de las pesadas ha estado flotando en torno a él.

Los escándalos de corrupción han brotado como hongos después de la lluvia y no ha tomado decisiones drásticas en contra de los presuntos responsables.

El socavón de la carretera a Cuernavaca, el caso Odebrecht y el tren ligero a Querétaro son botones de muestra de que su gente aprovechó los cargos para despacharse con la cuchara grande y es obvio que eso le repercute en su imagen.

Ahora viene un aluvión de críticas porque las ofertas de que con la reforma energética el gas y la gasolina serían más baratas, ofertas que resultaron un fiasco, el gas sigue subiendo de precio y no se diga la gasolina. Eso sí, los particulares que ahora están haciendo negocio en esos rubros, felices de la vida.

Entonces todo lo relatado en este espacio está constituyendo una plancha muy pesada que carga sobre sus espaldas JOSÉ ANTONIO MEADE quien ya parece una pípila del siglo XXI. Pero al igual que el afamado héroe, los tricolores confían en que su sacrificio no será en vano, en este caso aguantar metralla porque Peña Nieto sigue operando.

Por lo pronto ya sometió a todos los insurrectos de las filas tricolores entre los que van incluidos los dinosaurios que no asimilaban que un personaje ajeno al PRI fuese el candidato presidencial.

Entonces Meade no está muerto y con o un PRI que ya cerró filas va a emprender la tarea de remontar la desventaja. Tendrá tres meses para ello y si la estructura priista que consta de 14 gubernaturas y las dependencias del gobierno federal carburan, el candidato tricolor se va a meter en la pelea.

A esto agréguele la sacudida que recientemente le acomodaron a RICARDO ANAYA que si no paran esa bronca del asunto de lavado de dinero en donde aparece su nombre, el PAN en un momento dado optara por cambiar de candidato. 

Todavía tiene tiempo para ello, todo dependerá de los amarres que se hagan al respecto, pero de lo que no le queda ninguna duda al columnista es que si logra sacarlo de ese problema el tono de voz de Anaya va a ser casi inaudible y ni por asomo lo veremos en campaña tupiéndole a colores al PRI, un cambio de actitud que le va a disminuir puntos en las tendencias electorales aparte de que la participación de MARGARITA ANAYA ya con spots, lo mismo en radio que en televisión va a cercenarle una parte de los panistas que incuestionablemente simpatizan con ella.

Y así, en medio de esas circunstancias el panorama del joven trastupijes no es nada brillante, al contrario, se percibe que va a perder el posicionamiento y al final terminará sumándose al PRIAN, todo con tal de evitar que ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR llegue a la presidencia de la República tal y como lo hicieron en las elecciones del 2006 y de 2012.

La gran diferencia de esos procesos electorales con el del 2018 es que ahora estarán operando a todo lo que dan las redes sociales. Habrá infinidad de cámaras por todas partes para captar en vivo, en directo y a todo color los chanchullos y topillos que regularmente se cometen el día de las elecciones, aparte de que si sale a votar un 60 por ciento del padrón electoral lo más probable es que la mayoría lo hará por El Señor López. Así lo dicen las tendencias electorales que si bien son fotografías del presente no hay motivos para suponer que cambiarán dentro de cuatro meses.

Y por hoy, BASTA.

gilberto.banda@hotmail.com

gilberto.banda@elmanana.com