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Ahora sí, nadie ganará más que el presidente

No tengo ninguna duda que la Ley de Remuneraciones de los Servidores Públicos va a venir a darle una vuelta a la tortilla en la cosa pública. 

Como lo saben mis lectores, la Cámara de Diputados, específicamente los morenistas, trituraron a los que se opusieron y aprobaron dicha ley que seguramente la mandará publicar en el Diario Oficial de la federación el presidente ENRIQUE PEÑA NIETO como un legado al servicio público, aunque en los hechos el mérito corresponde al cien por ciento a los legisladores que descongelaron esta iniciativa que estaba en el refrigerador desde hace unos ocho años y gracias al tesón del izquierdista PABLO GÓMEZ en esta legislatura la sacaron y la metieron en el micro y ya la tienen lista para su promulgación.

Ahora sí, nadie ganará más que el presidente

Se trata de una ley que detalla que nadie podrá ganar más que el presidente de México, o sea 108 mil pesos mensuales, y si se alguien se pasa por el arco del triunfo ese tope salarial le espera una condena hasta de 14 años porque al tiempo que aprobaron esa ley emitieron una adición al Código Penal Federal que describe como delictuoso ganar más que el presidente de México.

Lo anterior trae atolondrados a los de la burocracia dorada, baste decirle que nomás en el Banco de México hay 300 empleados con sueldos de 150 mil pesos mensuales y de ahí para donde usted voltee encuentra lo mismo. 

También en las Secretarías de Estado y en las empresas paraestatales en donde la alta burocracia se venía dando una vida muy sabrosa pues aparte de altos sueldos, los consabidos moches que hacen ver los sueldos como una propina, de ahí se entiende que hay quienes critican la austeridad republicana que ya está implementando ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR a través de la Cámara de Diputados, lo que nos deja ver que para aquellos que afirman que aun dentro del gobierno de AMLO seguirá habiendo moches, yo les digo que por lo menos ahora no tendrán sueldos exorbitantes lo cual resultaba insultante para el pueblo de México, aparte de que al que atrapen en la maroma no tengo ninguna duda que lo va a enjaular por muy amigo que sea de él. 

Ahí tienen el caso de RENÉ BEJARANO que si finalmente quedó libre es porque no era servidor público cuando recibió 35 mil dólares, en cambio el que fuera su Secretario de finanzas, GUSTAVO PONCE MELÉNDEZ, cuando gobernó la Ciudad de México, Distrito Federal sí recibió una condena, benévola, por cierto, de todas formas, pasó un buen rato en prisión.

Entonces con una ley que penaliza hasta con 14 años de cárcel al que reciba un sueldo mayor al del presidente de México inicia la llamada austeridad republicana y al que se quiera emparejar por medio de la corrupción como parte de esa nueva República le espera en un reclusorio una larga estancia y todos los gastos pagados.

No hay duda que las cosas van a ser diferentes a partir del primero de diciembre y la popularidad de AMLO, y los diputados y senadores morenistas creciendo como la espuma aun y con la alianza del Verde Ecologista. Están sentando las bases a que pasen cosas buenas.

Los que saben de economía afirman que el plan económico de AMLO está muy sencillo, pero con alto sentido político y social. Le van a meter todos los kilos a la inversión hacia el sur del país que es en donde la miseria más se ha agudizado mientras que en el norte las medidas fiscales como convertir la frontera en zona libre y reducir el ISR de 35 al 20 por ciento van a dinamizar la economía con todo y los presagios catastrofistas que auguran un fracaso porque la pura disminución del IVA va a generar un boquete de 40 mil millones de pesos.

Pero ya se está viendo que ese agujero lo van a taponear con las puras medidas de austeridad y los beneficios van a ser ahora para los comerciantes y empresarios, así como para los consumidores sin pasar por alto que los trabajadores de salario mínimo ahora ganarán el doble que vendrá a ser otra inyección a la micro economía de la frontera.

Y con un panorama así es natural que los bonos de López Obrador estén en incesante crecimiento ante la desesperación de los catastrofistas que le pronostican un fracaso en sus programas de gobierno y hasta hoy todo indica que le van a hacer los mandados, lo que de paso incrementa los bonos del MORENA que aquí en Tamaulipas se apresta para las elecciones de julio del próximo año con la cual se renovará el Congreso del estado.

Serán 22 diputaciones locales las que estarán en disputa entre candidatos morenistas y panistas. Los priistas sólo serán parte del escenario.

De esas 22, el MORENA obvio que va por la mayoría pero el PAN tendrá el respaldo de las estructuras estatales, de las municipales en 31 de los 43 municipios, nomás que por esas fechas ya será delito grave el andar metiendo la cuchara en cuestiones electorales y con una advertencia de ese tamaño al que sorprendan en la maroma usando recursos públicos en las campañas no van a encontrar mucha gente que quiera exponerse a dar con sus huesos a la cárcel y sin derecho a fianza, una medida legal que le va a dar más igualdad a la competencia y que por razones obvias las legislaciones pasadas nunca tipificaron como delito grave los ilícitos electorales. Bien sabían que eso sería tanto como ponerse la soga al cuello.

Así, los mapaches y mapachas si hacen de las suyas con recursos oficiales y no dé a gratis en las campañas ya saben lo que les espera.

Habrá muchos ojos vigilantes para denunciarlos por las colonias porque se han granjeado animadversiones al manejar abusivamente los padrones de becas escolares y despensas excluyendo a las que no acatan las indicaciones.

Obvio que en las elecciones del próximo año quienes fueron afectados por los mapaches y mapachas que operan por las colonias van a querer desquitarse en las elecciones de julio del 2019.

Pero independientemente de lo anterior el PAN lo que sea de cada quien tiene prospectos bien posicionados a las candidaturas a diputados locales. Ejerce el poder desde octubre de 2016 tanto en el gobierno estatal como en la mayoría de los municipios.

Esa actividad dentro del servicio público a sus militantes les permitió posicionarse y por lo mismo pueden ganar sin recurrir a la trampa, esto es usar recursos públicos o coaccionar el voto con el cambio de que el delito electoral será grave lo mejor es buscar ganar sin trastupijes.

Por su parte los candidatos morenistas están obligados a rascarse con sus propias uñas y no recibir apoyos del delegado federal ni de los subdelegados que habrá en cada uno de los nueve distritos.

La constitución moral que pregona López Obrador los obliga a ganar con limpieza. Sería lamentable que echaran por la borda ese proyecto de nación.

Y por hoy, BASTA.

gilberto.banda@hotmail.com

gilberto.banda@elmanana.com