Reconoce Banxico debilidad económica
La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) decidió por unanimidad mantener en 3 por ciento el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día y reconoció que las condiciones de la economía del País son de debilidad, según la minuta número 38 del banco central.
Cd. de México
Agrega que la inflación subyacente en sus dos componentes, de mercancías y de servicios, ha permanecido por debajo de 3 por ciento y las expectativas de inflación están bien ancladas, a pesar de la depreciación del peso.
Todos los miembros de la Junta de Gobierno destacaron que la actividad económica en México ha continuado presentando un ritmo de crecimiento moderado.
No obstante, algunos integrantes señalaron que se espera que durante este y el próximo año, la economía mexicana muestre una mejoría gradual junto con la de Estados Unidos, aunque uno de ellos considera que existen riesgos externos a esta recuperación, como la posibilidad de un dinamismo menor al anticipado de la actividad industrial americana, una mayor volatilidad, un deterioro adicional de la situación en China y nuevas reducciones en el precio del petróleo.
En los riesgos de naturaleza interna, algunos integrantes destacaron la todavía insuficiente fortaleza de los determinantes del consumo, un mayor deterioro de la confianza del consumidor y del productor, así como la posibilidad de un nuevo descenso de la producción del petróleo.
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La Junta explica que su determinación de no modificar su tasa de fondeo se dio en virtud de que estimó que la postura monetaria vigente es conducente a afianzar la convergencia de la inflación a la meta permanente de 3 por ciento.
Sin embargo, advierte que las posibles acciones de política monetaria por parte de la Reserva Federal podrían tener repercusiones sobre el tipo de cambio, las expectativas de inflación y, por ello, sobre la dinámica de los precios en México.
Por ello, la Junta de Gobierno se mantendrá atenta a la evolución de todos los determinantes de la inflación y sus expectativas para horizontes de mediano y largo plazo, en particular al traspaso de movimientos del tipo de cambio a los precios al consumidor, a la postura monetaria relativa entre México y EU, así como a la evolución del grado de holgura en la economía.
En su más reciente anuncio de política monetaria, la Reserva Federal dejó inalterado su objetivo para la tasa de fondos federales.
Otros miembros de la Junta añadieron que el hecho de incorporar nuevos elementos de preocupación, en particular de índole externa, llevó a la Reserva Federal a posponer una vez más el inicio de la normalización de la política monetaria en Estados Unidos.
Ello aumentó no sólo la incertidumbre respecto a la fecha de inicio de la normalización, sino también respecto al ritmo de incrementos subsecuentes.
La mayoría de los integrantes consideró que en el entorno de debilidad económica global, así como ante condiciones financieras más astringentes, se ha observado una desaceleración en gran parte de las economías emergentes.
La mayoría se mostró particularmente preocupada por el menor crecimiento económico en China, al tiempo que considera que la debilidad económica en este país ha contribuido de manera importante a la reducción de los precios del petróleo y de otras materias primas, lo que a su vez ha afectado a gran parte de las economías emergentes, y en mayor medida a aquellas que exportan esta clase de productos.
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