UN HÉROE CAÍDO

Un lamentable deceso se registró en el hospital 270 del IMSS, que como lo saben mis lectores fue a consecuencia del COVID-19. Se trata del enfermero JULIO HERRERA, que como todos los que prestan sus servicios en las instituciones médicas, con mucha responsabilidad y a costa de su propia salud, cumplen con su trabajo.

Desafortunadamente Julio no sobrevivió a la infección y me parece que resulta obligado que en la próxima sesión del cabildo reynosense alguno de nuestros caros síndicos y regidores proponga que una calle de nuestra querida Reynosa lleve el nombre del valeroso JULIO HERRERA, quien no obstante saber a lo que se exponía nunca faltó a sus obligaciones.

De veras, es obligado reconocer el valor y actitud del personal médico y administrativo de las instituciones médicas públicas y privadas. Desafortunadamente ese reconocimiento, si es que se dignan a hacerlo, no será en vida, pero de que es más que merecido me parece que no está a discusión y sobre todo en una ciudad como la nuestra en donde tenemos colonias y calles plagadas con nombres de nuestros “próceres” locales que no se distinguieron por acciones éticas o de filantropía sino por haber formado parte del servicio público.

Háganos el regrandísimo favor, aparte de enriquecerse terminaron honrándolos, lo que deja de manifiesto el deplorable barbeo de aquellos que sin ningún pudor aceptaron que colonias o calles de nuestra querida Reynosa lleven nombres de quienes sinceramente no tienen ningún mérito para semejante distinción. No voy a decir que se trate de malos ciudadanos, simplemente estoy diferenciando que una cosa es distinguir el heroísmo y otra el solamente cumplir por la obligación que te pagan.

Alguien podrá decir que los médicos como enfermeras, enfermeros, camilleros, personal administrativos de hospitales hoy en día tienen el compromiso de asistir a su trabajo aun en etapa de riesgo y eso desde el punto de vista laboral no tiene discusión pero una cosa es la obligación laboral y otra el sentimiento de responsabilidad cuando se cumple aun a sabiendas de que está en riesgo su salud porque el empleado o trabajador al ver que está en peligro bien puede no asistir y no habrá quien se lo reproche. Incluso tengo mis dudas de que sería motivo de recisión laboral porque obvio, al ser despedido luego acudiría a la Junta de Conciliación y Arbitraje para exponer la causa de la inasistencia y luego la autoridad laboral decidiría si fue justificada o no. Entonces, quien no evade su responsabilidad, aun a sabiendas de estar en riesgo, por supuesto que tiene un mérito y él desgraciadamente fallece en el cumplimiento de su deber, en mi personal enfoque debe ser motivo de una distinción porque de veras, está a nivel de heroico andar trabajando hoy en día en los hospitales ya bien sean públicos o privados. Descanse en paz en valeroso JULIO HERRERA.

Y ojalá su sacrificio no sea en vano y ahora sí la dirección general del IMSS atienda los reclamos de su personal, y aquí en Reynosa reportan que el material que les están enviando para prevenir contagios como guantes, cubrebocas, batas y otras, son de ínfima calidad, que por lo mismo nomás de adorno sirven. Han mostrado algunos de los tapa bocas y parecen gasas y de veras que no se vale no ayudar a los que valerosamente están cumpliendo con una función que hoy en día es ultra necesaria.

No esperen a que se dé otra víctima o a que pase lo que en Monclova en donde han muerto cinco médicos por falta de equipo de protección adecuado.

La gente espera que el gobierno de la 4T lleve a los hechos lo que pregona, de otra forma va a quedar en puro pico, y que pierda bonos eso es lo de menos, lo importante es la desatención en la salud tanto del personal médico como administrativo y de los que acuden a esas instituciones que muchos de plano ya le han sacado la vuelta.

El problema existe y no está magnificado. No sé qué está esperando ZOE ROBLEDO, el director general del IMSS, y también el mismo presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.

Entre tanto por nuestra querida Reynosa lo que empezó en murmullo es ya un barullo, la gente ya coincide en que, si el tráfico vehicular ha disminuido y tiende a seguirse reduciendo, la actividad de los agentes de tránsito y vialidad no es esencial en estos días y por lo mismo soy de los que creen que ya son muchos y de que a los tránsitos se les debe también confinar de aquí al 30 de mayo.

Por una parte, pondrían a salvo su salud y por la otra no estarán causando irritaciones entre los automovilistas que con todo y que no tienen autorización para infraccionar al conductor que no use tapa bocas, de todas formas, las redes sociales reportan que aprovechando el viaje si bien se limitan a prevenirlo, luego le siguen con el documento de la licencia para conducir y la tarjeta de circulación, que, si las trae en regla, síganle en paz, y si no, pues ya sábanas para que te lo digo.

De veras, el ambiente está como para chocolate y le están jugando rudo al gobernador del estado, FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA, que fue el autor del decreto, que por cierto ya un juez concedió la suspensión a un particular para que a él no se aplique, y no se vale andarle sumando malquerencias. Hasta parece que es intencional por lo que para evitar suspicacias, la alcaldesa MAKI ORTIZ DOMÍNGUEZ debe dar un reglazo a la secretaria de Seguridad ILEANA MAGALLÓN, porque los agentes viales, según se ve, no parecieron entender lo que dijo o hicieron como que no comprendieron.

Hoy en día lo que menos necesitamos es distanciamiento entre las autoridades estatales y municipales, de ahí la importancia de un correctivo. Por otro lado, los diputados locales panistas convocaron a una conferencia de prensa con tapa bocas y toda la cosa para anunciar que el coronavirus puede rebrotar en noviembre o diciembre próximo. Recáspita Batman, hubiera dicho Robín, eso es lo que suele suceder cuando no se toman las medidas adecuadas para cualquier enfermedad, pero me parece que los diputados tomateros debieron haberse hecho acompañar por algún científico que hiciera las explicaciones de rigor y así darle fuerza a las predicciones que hicieron sobre el rebrote del COVID-19, que por otra parte hacen bien en andar alertando a la gente.

El riesgo es latente y muy viable que regrese, lo que por cierto todavía no se ha ido, lo que pasa es que la gente, me da la impresión, que se siente que ya la brincamos porque en McAllen a partir de este viernes van a reaperturar los negocios tanto de venta de ropa como de comida, aunque no será como antes. Me dicen que, en forma gradual, por ejemplo, comprar ropa en tiendas del Mall, deberá ser por Internet y solo acudir a que se las entreguen, pero no les permitirán ingresar a ese macro establecimiento si no van con su tapa boca. Ahora que si quieren ingresar a la tienda será de uno en uno, y bueno, que sufran las molestias. En los restaurantes admitirán comensales hasta un 25 por ciento de la capacidad del negocio. De los bares no tengo información salvo la que ya se conoce, que venden para llevar. Y la isla del Padre también ya está puesta y dispuesta. Hubo poca asistencia este pasado fin de semana, ya me imagino como será este sábado. Nosotros, de todas formas, sigamos cuidándonos.

Y por hoy, BASTA.

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