NEGRO PANORAMA

Como quien dice, con palitos, peras y manzanas ENOCH CASTELLANOS, el dirigente nacional de la Canacintra, explicó la agobiante situación por la que atraviesan los pequeños y medianos empresarios que, tras leer sus argumentos, no le queda a uno ninguna duda de que un sector muy importante en el Producto Interno Bruto Nacional va rumbo a la extinción.

Ellos por ser empresarios de los que sí tienen contacto con su personal, en cuanto se decretó la cuarentena comenzaron a enviarlo a su casa y con goce de sueldo. Bien saben que viven al día, pero en estos tiempos, tener para vivir al día prácticamente es pertenecer a un mundo de privilegiados tomando en consideración que hay grandes sectores del país que se truenan las manos diariamente por obtener para la subsistencia.

Estos pequeños y medianos empresarios sensibles y por lo mismo solidarios han estado aportando para mantener lo que queda de paz social pero como no son de bastos recursos, a partir de mayo el 65 por ciento no podrán seguir manteniendo sus puertas cerradas y a la vez pagando a sus trabajadores, lo que equivale a un cierre definitivo con la consecuente pérdida de empleos y generación de angustia social.

Por ello es que recurren al gobierno de la Cuarta Transformación para que activen con urgencia un programa económico que les permita mantenerse a flote.

El gobierno ya dijo que van a apoyar con créditos de 25 mil pesos, pero ese monto si acaso servirá para los informales. Los negocios formales requieren de otro tipo de apoyos a manera de oxigenarlos y que aguanten porque esto apenas va empezando.

Ya tenemos encima, con la letalidad a todo lo que da, el COVID-19. Son las que siguen, dos semanas muy peligrosas y por lo mismo cruciales, pero la gente en nuestra querida Reynosa no quiere creer en los aparecidos.

Tenemos que cerrar filas. A partir de mayo, dicen los que saben, disminuirán las posibilidades del contagio, por lo mismo se prevé que unos el día dos del próximo mes y otros el día cinco, se reintegrarán a sus labores, pero aun así deberán hacerlo con extremas medidas de seguridad que son muy sencillas: conservar metro y medio o dos de distancia y portar mascarilla cubrebocas y guantes de látex.

No hay de otra porque esto apenas va empezando. Dios quiera no se desborde el control que aparentemente tiene el gobierno sobre la pandemia, un control que está provocando celos estúpidos y por lo mismo críticas a lo bestia. Ahora salieron “epidemiólogos” y “científicos” por todas partes, todos ellos opinando con una solvencia como si tuvieran certificación cuando que no se sabe si realmente son, no digamos epidemiólogos sino siquiera médicos generales.

Pero ahí están, inundando las redes sociales con ilustrativos videos sobre el tema de la pandemia, unos diciendo que es puro camuco, que es una enfermedad inventada para crear las convulsiones económicas que hoy sacuden el mundo, de la que México obviamente no iba a escapar.

El precio del barril del petróleo se fue al pozo, aunque cualquiera supone, por mero sentido común, que ese precio tarde que temprano se elevará, el problema es que nuestras finanzas no están lo que se dice robustas sino muy apenitas y eso que el gobierno ha estado ahorrando como si fuera judío y al gasto le ha cerrado la llave.

Esa vieja práctica pero que no falla lo mismo en economía pública que en la personal es la que nos está manteniendo como sostenidos por un hilo ante los embates de la pandemia que provocó decrecimiento en la actividad comercial, y para remate, un crecimiento económico menos cero.

Pero como el gobierno de ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR ha estado amachado en no invertir y tampoco en no endeudarse, ahí la vamos llevando nomás que una vez pasada la pandemia vienen los estragos de la recesión económica que ya hasta las plantas maquiladoras de por aquí les está pegando.

Se sabe han estado ya despidiendo personal, pero en forma definitiva. Sus actividades comienzan a decrecer ante la disminución de la producción mundial.

Se ve negro el panorama y en medio de esa negrura hay quienes quieren sacarle raja política, torpe intento, la gente no está para aversiones, por lo mismo ni atención les pone. En estos momentos de nada nos sirve que nos anden diciendo que los números que maneja el subsecretario HUGO LÓPEZ GATELL no corresponden a la realidad.

Pudiera ser que tengan razón, pero esos son solamente suposiciones de los que quieren ver rodar a López Obrador, lo que no es suposición es de lo que uno se entera en su respectivo entorno.

En nuestra querida Reynosa el número de contagiados son mínimos al lado de los infectados en el valle de Texas, nomás que a esos “epidemiólogos” no les cabe en la cabeza que la pandemia esté causando muchos daños de aquel lado del río Bravo y en el lado mexicano en forma mínima.

No toman en cuenta esos “científicos”, primero que Estados Unidos tiene el triple de la población que habita en México; segundo, que por lo menos un 50 por ciento de los norteamericanos viajan cuando menos una vez al año a Europa, Asia o México, mientras que en nuestro país los que van de viaje lo mismo al viejo continente que al lejano oriente o bien a los Estados Unidos son en un porcentaje que si acaso suma el 10 por ciento.

Como dirían los chavos, es la movilidad, y no que aquí seamos muy pirinolas en materia sanitaria y en Estados Unidos muy torpes.

Pero se trata de sembrar dudas y de que la gente se le eche encima al gobierno de la Cuarta Transformación. No entienden que por ese lado no lo van a derrotar.

Si tantas ganas traen de regresar al poder ya deben irle diciendo a sus respectivos gobernadores y alcaldes que hagan bien su trabajo y sobre todo sin corrupción, así el ciudadano comenzaría a comparar cómo se comportan los de los gobiernos municipales y los estatales con los del gobierno federal.

Solamente así harán que el votante voltee a verlos. La prueba contundente de lo anterior es que en las encuestas de febrero y marzo si bien tanto AMLO como el MORENA acusaron un notable declive, él, en la aprobación ciudadana y el MORENA en la tendencia electoral, ese descenso no causó júbilo entre el PRI y el PAN. Ambos no crecieron en las tendencias electorales, quedaron anclados en un 16 por ciento.

En pocas palabras, tienen que cambiar, pero con actos positivos, no solamente con bullas o recurriendo a las noticias falsas.

Y por hoy, BASTA.

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