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Recordando a la primer secundaria en nuestra ciudad

Hoy quiero hacerles una invitación para recordar los inicios de la primera Secundaria Federal en nuestra ciudad, esto ocurre cuando a nuestra ciudad la conocían como ejido Río Bravo, y en ese  transcurso pasó a hacer ciudad.

Corría el año de 1955, no existía una sola escuela secundaria en nuestra ciudad, sólo había 4 escuelas primarias de educación completa, es decir hasta sexto año, las escuelas con estudios completos eran la escuela Benito Juárez, la escuela Josefa Ortiz de Domínguez, la escuela Secretaría de Recursos Hidráulicos y la escuela Magdaleno Aguilar, es por eso que los que tenían la posibilidad de estudiar lo hacían trasladándose a la ciudad de Reynosa a estudiar a la escuela Secundaria Federal José de Escandón, comenta el profesor Juan Oropeza Camarillo, que eran alrededor de 30 jóvenes entre 12 y 14 años.

Recordando a la primer secundaria en nuestra ciudad

Viendo la necesidad de tener una secundaria en el ejido Río Bravo, el profesor Juan G. Oropeza Barrios, citó a los padres de familia para hacerles saber su idea la cual fue aceptada, y fue así como el gestionó dicha secundaria.

Fue el profesor Jesús Guerrero Soria director de la escuela Secretaría de Recursos Hidráulicos quien ofreció tres salones para que ahí se instalara provisionalmente dicha secundaria.

El profesor Oropeza quien logró que la fraccionadora Río Bravo le donara el terreno en donde actualmente se encuentra la Secundaria Núm. 1.

En la mesa directiva de la Sociedad de Padres de Familia quedó como presidente el señor Oliva Martínez, dueño de la fábrica de ladrillos, llamada ladrillera Juárez, y fue el mismo el que donó los ladrillos para la construcción de las aulas. 

Después se procedió a nombrar la directiva del patronato que quedó integrada por seis personas, dos comerciantes, el señor Emilio Gómez Jáuregui, y el señor Prisciliano González, cuatro ingenieros, Jorge J. Pedrero (presidente), Amado Barrón Ibarra, Luis Hess Martínez, y Carlos Fernández Brito quien en ese entonces era el presidente del Club Rotarios y se comprometió a dar todo su el apoyo de su club para gestionar lo que fuera necesario. Dicho Club, logró un apoyo  económico como gratificación para los maestros por sus servicios. Fue en el año 1959 cuando la Secretaría de Educación Pública se hizo cargo del pago de nóminas del personal que impartía clase y del personal administrativo.

¿Pero por qué lleva el nombre del Alfredo del Mazo a esta secundaria? Alfredo del Mazo era el Ministro de la Secretaría de Recursos Hidráulicos (SRH), y gracias a él se consiguieron las audiencias con el Ministro de la Educación Pública, asimismo aportó dinero para construir un laboratorio de triple función, así como la compra de materiales y herramientas para los talleres de carpintería, mecánica automotriz, mecanografía y corte y confección, y donó un equipo completo de laboratorio para física, química y biología. Fue por su gran apoyo que decidió que esta secundaria llevara su nombre, además que la primera generación que fue en junio de 1959 también llevó su nombre, aunque no estuvo presente personalmente ofreció estar en la inauguración del nuevo edificio que los padres de familia ya estaban construyendo y así fue. 

En febrero de 1963 los alumnos que ya habían pintado sus pupitres formaron una larga fila y cruzando las veredas del monte y la distancia que separaban de la escuela primaria que les dio albergue durante seis años, decían adiós a esa escuela y se presentaban a estrenar las aulas de las nuevas instalaciones.

El primer director fue el profesor Guerrero, quien renunció a los dos meses, después el profesor Juan Oropeza Camarillo, quien se hizo cargo de esta secundaria.

El día 2 de septiembre de 1956 en el ejido Río Bravo con 28 alumnos se iniciaban las clases de lo que hoy es la Secundaria General Núm. 1 Alfredo del Mazo por donde han pasado ya muchas generaciones de buenos estudiantes.

Es por eso y más que hoy recordamos los inicios de la Secundaria Núm. 1 de Río Bravo.

¡Muchas gracias por hacer juntos Un Viaje al Pasado, hasta la próxima!