Columnas > ENFOQUE

Priístas alineados

Como ya lo saben mis lectores, los gobernadores priístas ya suscribieron el Insabi lo que de pasada implica que ya están alineados con la Cuarta Transformación, al menos en el rubro de la salud pública, lo que constituye una noticia positiva.

Y es que ahora, como dice el diputado local morenista RIGOBERTO RAMOS ORDOÑEZ, por ley, la atención médica es obligatoria y gratuita, aun en los Estados donde los gobernadores no hayan firmado el convenio.

Priístas alineados

Al pueblo le importa un pepino si el hospital al que acude y presta un buen servicio lo atiende el gobierno federal o en el estatal, eso es una verdad de perogrullo y que por lo mismo no se entiende porque hubo jaloneo para colaborar con el Insabi, aunque si se supone por qué la resistencia, y todo gira en torno al control del billete.

La compra de medicamentos es multimillonaria y en ese rubro en los gobiernos estatales encontraron un filón de oro como lo hace creer la investigación que ya está en la Unidad de Inteligencia Financiera porque andan bailando más de 80 mil millones de pesos en el período de 2012 al 2016, lo que nos hace suponer que los gobernadores de ese período se despacharon con la cuchara grande.

Pero reitero, lo que resulta inexplicable es que los gobiernos estatales actuales se opusieran al Insabi. Los del PRI, ya dieron un paso al frente; los del PAN, a medias, más sin embargo soy de los que creen que finalmente terminarán aplicando el Insabi en su totalidad hasta los gobernadores panistas, que ya hay tres de los diez más puestos que un calcetín para suscribir el convenio con el gobierno federal.

Entre tanto el problema de la falta de medicamentos contra el cáncer se agudizó. Falló la logística, lo que no sorprende, la 4T se ha venido caracterizando por la improvisación, algo que no debiera ser en un rubro tan delicado como es la salud.

El problema es, según me contaron conocedores del tema, es que en los gobiernos federales de Calderón y Peña Nieto los laboratorios no vendían directamente sino a través de intermediarios que obvio tenían la influencia.

Para ello crearon empresas distribuidoras de medicamentos sin tener ninguna experiencia en el ramo, y por supuesto que a un precio más alto y desde luego que después los gobiernos los reportaban a un costo todavía mayor, una práctica que a muy pocos les rindió pingües ganancias y perjudicó a muchos, de ahí que no siempre tuvieron el medicamento necesario en el stock de los hospitales.

Vio el gobierno de la 4T y alguien los puso al tanto de esas maromas y con el sello de la casa los borraron del pizarrón, pero sin contar con proveedores emergentes. De eso se dieron cuenta los proveedores de gobiernos anteriores y comenzó el boicot que ha denunciado el presidente López Obrador en las “mañaneras”.

Me dicen que no son propiamente los laboratorios los causantes del problema sino los intermediarios, lo que obliga a la Unidad de Inteligencia Financiera a darles una escarbada y al SAT darles una revisada para ver cómo andan en sus declaraciones fiscales, que se da por descontado que han de estar omisas donde no chuecas. No deben dejar en la impunidad tanto atraco.

El clamor por la falta de medicamentos desafortunadamente de ser un reclamo justificado, terceros lo utilizaron para golpear políticamente a la 4T y con ello se fue por el caño la reclamación.

Les dieron el pretexto a López Obrador para mandar por un tubo el reclamo, pero también desafortunadamente la llevaron quienes tenían necesidad de esa atención, sobre todo los que ya están en tratamiento con enfermedades terminales que suspenderle el suministro de medicamentos los pone en riesgo de perder la vida.

Es obvio que esos enfermos no van a aguantar hasta diciembre próximo que es la fecha que fijo AMLO para que el Insabi proporcione atención medica hasta para enfermedades del tercer nivel.

Ojalá y reflexione y tome medidas emergentes. Se le reconoce su intención de pegarle duro a la corrupción que innegablemente contaminó el servicio público de los tres niveles de gobierno, pero no debe barrer parejo, están pagando justos por pecadores.

Pero, en definitiva, los gobernadores no tienen bandera para oponerse al Insabi por muy justificada que sea su negativa.

Atraviesan por muy mal momento, salvo los gobernantes de Yucatán, Querétaro, Sinaloa y Aguascalientes, los demás traen promedios de aprobación ciudadana de un 40 por ciento para abajo y esa medición la hizo la COPARMEX, un organismo de tinte albiazul pero que en su encuesta entre sus agremiados los resultados arrojados reflejan que andan por los suelos los gobernantes.

Entonces, no van a encontrar respaldo en la oposición al INSABI, reitero, por muy justificada que este la negativa, no les van a creer la causa de la oposición y eso va a terminar por hundirlos. 

Ellos también deben reflexionar, lo único que están haciendo es a que cobre más peso lo que ya parece sentencia de López Obrador: la oposición esta moralmente derrotada.

Mientras tanto por nuestra querida Reynosa siguen las persecuciones policiacas y como siempre, la policía estatal al frente.

 Ya debieran entender las mamacitas y las abuelitas que todos esos muchachos que andan descarriados que por ese lado lo único que están encontrando es la muerte. Ya ni siquiera tienen la esperanza de ir a la cárcel y salir en 10, 12 o 18 años, pero pareciera que hasta los balazos les entran por una oreja y le salen por la otra. 

No se alejan de la actividad delictiva, tan pronto abaten cuatro o seis y ya están prestos los relevos, pero esto es producto de la desatención familiar que se dio de unos 12 años atrás.

Quienes eran niños en ese entonces, crecieron sin gobierno familiar y hoy la ciudad paga las consecuencias, pero sus mamacitas y sus abuelitas cargan con el dolor.

Quisiera creer que el eterno los va a disuadir, pero todo buen cristiano sabe que Dios de diversas formas les envía señales y si no las atienden hay un castigo y ese castigo, en el caso de los malandracos ya es la tumba y de ahí al infierno.

Y por hoy, BASTA.

gilberto.banda@hotmail.com

gilberto.banda@elmanana.com