Millennials y la dinámica del grupo adecuado

En estos días, hay mucho énfasis en los equipos y la colaboración en el lugar de trabajo. Para muchos empleados de larga trayectoria que alcanzaron la mayoría de edad en la fuerza de trabajo donde el logro individual era apreciado sobre todo lo demás, sin embargo, el lugar de trabajo de la actualidad puede ser desafiante, por decir lo menos, y muy difícil de dominar al más alto nivel. Los millennials tienen un “aumento” en la fuerza de trabajo más vieja, porque se les ha enseñado y entrenado para funcionar bien en grupos.

Recientemente tuve la oportunidad de a ver un grupo de trabajo de 20 y tantos en equipos y es un proceso esclarecedor. La dinámica del grupo fue muy apoyada entre sí y se centró en encontrar las ideas y direcciones correctas. Aquí hay algunas lecciones clave que aprendí de ver a estos Millennials trabajar en equipo:

1) Sin Egos. Me sorprendió el dar y recibir en el grupo. Cada idea o pensamiento que se ofreció fue discutida y analizada. Nadie estaba defendiendo su idea o derribando la idea de otra persona. Había poco ego y un deseo real de encontrar la mejor solución. El grupo reconoció que colectivamente obtendrían crédito por la solución y juntos tratarían de encontrar la mejor respuesta.

2) Resultado. Desde el principio, discutieron un propósito o deseo compartido para el grupo. El grupo comenzó con un objetivo común y la comprensión del destino. Cuando las cosas se desviaban, el grupo volvía, en equipo a la búsqueda del resultado que querían lograr.

3) Desafíos educados. Había una sensación de respeto dentro del grupo. Eso no significa que no hubo diferencias o conflictos. Los desafíos vinieron en forma de preguntas que invitan a la reflexión como “¿De qué validación de terceros obtuviste esa información?” O “¿Cuál es tu fuente de información?”. El grupo fue capaz de ir más allá de las opiniones y enfocarse en los hechos.

4) Completa los espacios. Los expertos en gestión empresarial nos dicen que si tiene información perfecta, toma decisiones perfectas. Lo que fue interesante de ver con este grupo Millennial fue cuando llegaron a coyunturas donde había una brecha en la información o donde había una desconexión. El grupo pudo reconocer la brecha y trabajó para llenar el vacío. Obtener la mayor cantidad de información posible ayudó al proceso de toma de decisiones del grupo, pero saber cuándo un grupo carece de información completa es igual de importante.

5) Entrada final. Cuando el grupo estaba llegando al final de su tarea, se le pidió a cada persona sus pensamientos e ideas finales. No hubo pases, lo que significa que todos deben sentirse cómodos con la dirección y la decisión. La última pregunta fue, “¿Qué es lo que nos falta que podría ayudarnos a lograr mejores resultados?”

Si había un tema subrayando que veía mientras miraba a este grupo, era la idea o el tema de explorar y desarrollar soluciones, en lugar de replantear una posición y rechazar cualquier desafío a la idea o sugerencia de mejora. Fue un proceso refrescante para observar y me alejé con una mejor idea de cómo los grupos pueden trabajar juntos con éxito.

¡Nos vemos en McAllen!