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Los acuerdos necesarios

“Se puede engañar a parte del pueblo parte del tiempo, pero no se puede engañar a todo el pueblo todo el tiempo”. Abraham Lincoln

En el año de 1993 cursaba mis estudios en la carrera de Derecho, en aquel entonces, en una de las materias, recuerdo Filosofía del Derecho el maestro había encargado que presentáramos un trabajo por equipo en forma de ensayo con un tema Libre, todavía vienen a mi memoria algunos momentos de aquella época estudiantil y junto con el hoy abogado y amigo Carlos Tirado Enríquez, nos dimos a la tarea de analizar temas y de allí decidir sobre cuál sería nuestro proyecto a presentar.

Los acuerdos necesarios

No fue fácil, mi compañero Carlos, por cierto, originario del Puerto de Tampico y quien siempre se distinguió por ser un muy buen estudiante, tenia ideas en las que coincidíamos y otras no tanto, sin embargo, llegamos a tomar acuerdos y establecer nuestro punto de partida. El Ensayo lo denominamos en aquel entonces “EL PRIGOBIERNO”.

La cátedra Universitaria en nuestro País, es una tradición de ser libre, de ver los temas a estudiar de manera analítica, en el mejor de los intereses de aprender algunas definiciones de los conceptos generales y escudriñar la verdad, en esa misión y esa idea de tener un entorno de libre albedrío, fue que nos animamos a desarrollar el ensayo, habida cuenta que en ese momento el poder político en México era controlado de manera férrea por el Presidente de la República, que en ese tiempo era el señor Carlos Salinas de Gortari.

Época difícil para los perredistas, recuerdo que hablaban de algunos líderes del PRD desaparecidos o asesinados y siempre culpando al Gobierno de la república, el entorno sociopolítico de aquella época era de una línea en la que no cabían las discrepancias, los desacuerdos, todo fluía bajo las decisiones de un hombre todopoderoso de manera terrenal y esta fuerza recaía de manera central en el Presidente de la República.

Frases célebres como el “no se hagan bolas”, o aquella frase del líder FIDEL VELÁZQUEZ “el que se mueve no sale en la foto” y así podemos citar cantidad de frases, hechos del momento, políticos que vestían de guayabera si al Presidente le gustaba ese atuendo, o el uso de las corbatas al gusto del color del líder, en fin, las “líneas” eran duras y el que entendía y sabía leer entre líneas podía permanecer y trascender de manera sexenal.

Más o menos así nos tocó nuestra época de estudiantes universitarios, aunque hay una cierta disyuntiva, en lo siguiente, si bien es cierto el origen del presidente Salinas es Agualeguas, Nuevo León y dicho Estado tuvo un auge económico tremendo, también es cierto que en la sultana del norte están los capitales más grandes del país y políticamente se inclinaban por el Partido Acción Nacional. Nuevo León entonces vivió esa dicotomía de poderes entre el presidencialismo priísta y el fundamentalismo panista.

Por eso y vuelvo a mi ensayo, bueno a nuestro ensayo, porque era en equipo, no era fácil tocar un tema en donde el cuestionamiento directo es y fue hacia la dualidad del partido PRI y el gobierno de la República. En aquel entonces no se sabía dónde empezaba el partido y donde acaba el gobierno, es decir la confusión de escenarios de personajes y de directrices hacían que el gobierno y el partido no tuvieran la “Sana distancia” que pretendió en su momento establecer el presidente Ernesto Zedillo.

En una democracia, “se supone” que los partidos políticos son los entes mediante los cuales se accede al poder, pero una vez terminado el proceso electoral debe darse un gobierno del pueblo y para el pueblo, es decir un gobierno democrático se debe gobernar para todos sin igual.

Eso quedó en el pasado, eso lo criticaban quienes ahora gobiernan, mediante la cuarta trasformación, las luchas del presidente López Obrador por acceder al poder y acabar con las “mafias del poder”, están desgastando y fracturando a todos los mexicanos, lo hemos dicho aquí, la polarización está latente, ahora la confusión a la que hice alusión al principio del PRIGOBIERNO, se da entre Morena el partido que llevó al poder al presidente López Obrador y el Gobierno de la 4T y un ejemplo de ello es la recién nombrada presidente de la comisión de derechos humanos, la señora Rosario Piedra, activista política, dirigente de Morena, amiga e incondicional del Presidente, ahora asume una función crucial, que es la defensa de los Derechos Humanos, Pregunto.- tendrá el valor civil para enviarle una recomendación al Presidente de la República suponiendo sin conceder que fuera necesario por algún procedimiento de un particular?. Lo dudo mucho, sin embargo, estimo que estamos a tiempo de enviar mensajes positivos de alianzas y de acuerdos, se puede cogobernar se pueden hacer las cosas bien, si se da la voluntad política del Ejecutivo y que haga un gran llamado a las fuerzas políticas principales PRI y PAN a un gran acuerdo por la reconstrucción nacional, por la paz y por la seguridad. El rumbo el País, no lleva buen puerto mientras continúe los desgastes y las hostilidades. Nos vemos en la próxima mi correo es mariolongoria55@hotmail.com