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El regreso del dedo

Han pasado 23 años desde que el pueblo mexicano fue testigo del poder de unción del dedo presidencial para seleccionar a quien sería su candidato a la presidencia; en ese entonces Carlos Salinas De Gortari ejecutaba la poderosa y ritualística acción del dedazo para señalar a Luis Donaldo Colosio Murrieta como su sucesor, eran los tiempos en los que todavía la población mexicana tenía la sensación de saber que el candidato del tricolor sería quien ganaría las elecciones para convertirse en presidente.

Ernesto Zedillo en el 2000 prácticamente dejó que el partido, a través de una selección interna, decidiera quién sería su candidato, así un débil Francisco Labastida era seleccionado y perdía el tricolor por primera vez la presidencia de la república después de 71 años ininterrumpidos de gobernar al país.

El regreso del dedo

Con Vicente Fox y Felipe Calderón, las cosas fueron distintas, si bien es cierto que tenían sus “gallos” el partido procedió a realizar su elección interna para definir al candidato, en esos casos el dedazo no fue contundente como en los gobiernos priistas.

Ahora, podemos ver como el ritual del dedazo ha vuelto y está más fuerte que nunca en la figura presidencial de Enrique Peña Nieto. Todos sin excepción en México hablamos acerca de que el presidente será el que designe al candidato, es decir, nada ha cambiado en las formas que el PRI tiene para la selección del mismo.

El sábado pasado el Revolucionario Institucional sesionó su XXII asamblea nacional en la cual cerca de 10 mil delegados trataron los temas de: Visión de futuro, rendición de cuentas, declaración de principios, programa de acción y estatutos y en la cual sin duda alguna el tema principal fue la eliminación de candados.

Ahora se podrá tener la participación en la selección del candidato a ciudadanos simpatizantes y militantes del partido.

Esto sin duda alguna obedece a que la situación para el Revolucionario Institucional está bastante complicada, la popularidad del presidente Peña es bastante baja ante la población mexicana ya que las encuestas le dan un 20% de aprobación. Las reformas estructurales que impulsó no dejaran ver resultados a favor de la población sino hasta después de su Sexenio y ello le está cobrando un alto costo político.

Las encuestas dicen que si la elección presidencial fuera hoy, el PRI obtendría un tercer lugar después de Morena y el PAN. Y ante esta situación y el desgaste que han sufrido quienes se piensa podrían ser candidatos como Miguel Ángel Osorio Chong y Luis Videgaray, es apremiante el que se elija a un funcionario que esté dando resultados y que sobre todo no este desgastado como aquellos.

Ante este escenario se dice que se eliminaron los candados para la selección del candidato para que el pragmatismo del Presidente oriente su poderoso dedo a quien no es militante del PRI y es un Secretario que ha sabido hacer bien las cosas aunque su carisma político ante la población no sea el mejor, este personaje seria el actual Secretario de Hacienda José Antonio Meade Kuribreña.

Así es, se piensa que el señor Meade sería el que fuera ungido por el regreso del ritual; el regreso del dedo.

Hasta la próxima, primeramente Dios.

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