COVID-19

De acuerdo con el Departamento de Salud y Servicios Humanos / Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), las autoridades chinas identificaron un brote causado por una novela o una nueva coronavirus. El virus puede causar una enfermedad leve o respiratoria grave. El brote comenzó en Wuhan, provincia de Hubei, China, y se ha extendido a un número creciente de otros países incluyendo los Estados Unidos. El virus es diferente de otros seis humanos previamente identificados, los coronavirus , incluyendo el Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS) y coronavirus del síndrome respiratorio Oriente Medio (MERS) que han causado anteriores brotes de enfermedades respiratorias.

Muchos de los casos iniciales identificados en Asia eran probablemente el resultado de la exposición en un gran mercado de mariscos y animales, lo que sugiere una posible zoonótica (es decir, animal) origen al brote. Con base en el análisis científico del material genético del virus, algunos científicos sospechan que las serpientes pueden ser el origen del brote.

No todos los casos están conectados con el mercado, sin embargo. El nuevo coronavirus, COVID-19 se ha extendido directamente entre las personas en varios países, incluyendo los Estados Unidos. 

Control y Prevención

Medidas para proteger a los trabajadores de la exposición a, y la infección con coronavirus, COVID-19 dependen del tipo de trabajo que se realiza y el riesgo de exposición, incluyendo la posibilidad de interacción con personas infecciosas y la contaminación del entorno de trabajo. 

Los empleadores deben adaptar las estrategias de control de infecciones en base a una cuidadosa evaluación de los riesgos , el uso de las combinaciones adecuadas de ingeniería y controles administrativos, prácticas seguras de trabajo y equipo de protección personal (PPE) para evitar la exposición del trabajador. 

Algunas normas de OSHA que se aplican para evitar la exposición ocupacional a COVID-19 también requieren que los empleadores capacitar a los trabajadores sobre los elementos de prevención de infecciones, incluyendo el equipo de protección personal o PPE.

Para todos los trabajadores, independientemente de los riesgos de exposición específicas, siempre es una buena práctica:

Lavarse frecuentemente las manos con agua y jabón durante al menos 20 segundos. Cuando el agua corriente y jabón no están disponibles, utilizar un desinfectante para manos a base de alcohol con al menos 60 por ciento de alcohol. Lávese siempre las manos que están visiblemente sucias.

Evitar tocarse los ojos, la nariz o la boca con las manos sucias.

Evitar el contacto cercano con personas que están enfermas.

Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades ha desarrollado una guía provisional para las empresas y los empleadores a planificar y responder al COVID-19. 

La guía provisional está destinada a ayudar a prevenir la exposición laboral a enfermedades respiratorias agudas, incluyendo el COVID-19. La guía también aborda las consideraciones que pueden ayudar a los empleadores a prepararse para brotes comunitarios de COVID-19, en caso de que este tipo de transmisión comience a ocurrir. 

Para formular preguntas, obtener asistencia para el cumplimiento, presentar una queja o reportar hospitalizaciones, muertes o situaciones que supongan peligro inminente para el trabajador en el lugar de trabajo, llamar a OSHA, 1-800-321-OSHA (6742) o a la oficina de San Antonio al: 210-472-5040. Para obtener información adicional, visite http://www.osha.gov. Nuestro objetivo es que toda persona regrese con bien a su hogar y los suyos al final de su jornada de trabajo.