Y los salarios ¿qué?

En Paraguay se libra una batalla para que este mes los salarios mínimos se eleven en un 3.5 por ciento, aunque el sector oficial, que los determina, ha señalado que quizá sea imposible llegar a esa meta anhelada por los sindicatos laborales. Inclusive, los actores de primera línea reconocen la necesidad de un aumento mayor; pero que, no debe darse por decreto. En México, ya se sabe, el gobierno dijo que no al alza salarial.

Dada la diferencia de criterios, no es ocioso echar una mirada a los tabuladores que rigen en las principales economía de la América indiana, en las que, desde luego, se debe incluir a la de México, aunque sus operadores se sientan más norteamericanos que aborígenes. A la cabeza se sitúa Argentina, cuyo gobierno subió su salario mínimo de 8.860 a 9.500 pesos argentinos, unos 498 dólares al cambio. En el entendido de que para el mes julio, el salario mínimo puede llegar a los 10.000 pesos, unos 530 dólares.

En la tierra de don José Alberto Mujica Cordano, Pepe para sus amigos, Uruguay, sus gobernantes han determinado que en base a estudios reales y serios el ingreso mínimo mensual fuera de 13.430 pesos uruguayos, unos 470 dólares. Por tres años seguidos, el poder de compra de los uruguayos se ha mantenido entre los primero lugares del continente, gracias a las políticas de racionalidad al gasto público y cero corrupción.

En tercer sitio de la tabla salarial se encuentra Chile, país cuyas leyes estipulan un salario mínimo de 276.000 pesos chilenos, unos 455,4 dólares por jornada laboral de ocho horas, con el plus de avanzada en el territorio americano, de que, gracias a las gestiones de la presidente Michelle Bachelet, a partir del primero de Enero del 2005, la jornada ordinaria de trabajo disminuirá de 48 a 45 horas semanales con pago cabal.

En Ecuador, a finales de diciembre del año pasado, cuando se llevaron a cabo las revisiones salariales en casi todos los países, el presidente Lenín Moreno anunció un salario mínimo de 391 dólares, con una jornada laboral media es de ocho horas al día, equivalentes a 40 horas semanales. Aunque el Gobierno Nacional analiza la reducción de esta jornada a 5 horas diarias, en total 25 semanales, asegún anunció el Ministro de Trabajo, Leonardo Berrazueta, cuyo objetivo es que las empresas abaraten sus costos.

En Paraguay, el salario mínimo legal comenzó a regir a partir de junio de 2017 y se ubica en 371 dólares. El salario básico en este país será renovado a mediados de 2018, para los cual ya se han iniciado las negociaciones entre los sectores oficiales, el obrero y la representación patronal, buscando que existe un equilibrio justo según las leyes.

Brasil registró uno de los más bajos aumentos en el ingreso mensual básico para los trabajadores. Para este año quedó en 325 dólares. Este país, de acuerdo al organismo Pesquisa Nacional, no gubernamental: “La reforma laboral (en portugués: trabalhista) es profundamente negativa para los trabajadores en la medida en que afecta todas las modalidades de empleo y derechos y garantías consagradas en la legislación laboral.

Para este año, en Colombia, el salario mínimo mensual será de 265 dólares, al que debe adicionarse el subsidio para el transporte y demás prestaciones constitucionales.

En los últimos lugares está México y Venezuela. En el Anáhuac, ya se sabe que la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos, en manos del salinista Basilio González no permitió un ajuste e emergencia a los salarios mínimos y estos quedaron anclados en 88.36 pesos por día, equivalentes a alrededor de 132 dólares mensuales, mucho menos que en Brasil y la cuarta parte de Argentina. Con el agravante de que la jornada real de trabajo se ha elevado, aunque no se reconozca, a más de diez horas diarias, sin pago de horas extras.

Solamente está por debajo Venezuela. El país gobernado por Nicolás Maduro cuenta con un salario mínimo de 248.510 bolívares. Al cambio oficial, dicho monto equivale a 74 dólares.