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¿Quién es este Castañón?

En el magnífico Museo Metropolitano de la ciudad de Nueva York, frente a un cuadro de Diego Rivera, dijo el observador: “Era un genio”. “Sí, un genio del espíritu mexicano”. “Ah”. Luego, frente a las obras de Picasso, aquel dijo: “Vaya, que fue muy bueno en todas sus épocas”. “No, fue la cumbre en cada uno de los estilos del siglo XX”. Más tarde, viendo un cuadro de Van Gogh, señaló el visitante: “Fue un gran maestro; pero, no evolucionó”. “Era tan grande que no necesitaba más”.

¡Uchas!, de ahí se desprende que no importa quién es una persona, ni cuánto tiene; sino, qué hace. Este Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, tiene opiniones para esto, para aquello y para lo demás; sin embargo, habría que preguntarse de dónde sale la autoridad para hacerlo.

¿Quién es este Castañón?

Según sus panegiristas, la articulación de todo el sector empresarial en el Cuarto de Junto, órgano de consulta que brinda posicionamientos técnicos e información a los funcionarios que negocian acuerdos comerciales para participar en la creación del TPP-II, la modernización de acuerdos con Europa y la actualización del TLCAN. O dicho de otra manera, es el que parte galleta.

Ta´ bien; pero, Castañón es el tercero de cinco hermanos que fueron formados por un hombre que llegó de España, debido a la pobreza que provocó la Guerra Civil Española: “México hospedó a mi padre. Y esto fue determinante para él. Un día le pregunté sobre qué nacionalidad escogería si le dieran a elegir, pues él se había naturalizado, y sin dudarlo respondió que la mexicana, pues el país le había dado una familia y una oportunidad de trabajo para salir adelante”. Pero es hambreador.

Sus orígenes, son la empresa mueblera familiar en Sinaloa, a la que dedicó una buena parte de su vida antes de ir a la política del brazo de los potentados venidos a la jauja por de Carlos Salinas.

Según sus panegiristas, en Coparmex tiene 25 años y ha participado en otras actividades como socio y consejero de Canacintra y Canaco.

Actual presidente de la llamada Cúpula de cúpulas, tiene la misión de cumplir con los retos del sector empresarial, por eso desde que asumió su nuevo puesto, llamó al reforzamiento de las empresas y a encontrar el camino para combatir la pobreza, lo que considera solo podrá ser a través del crecimiento industrial, educación y empleo. Ha pronunciado en contra de la corrupción en el Gobierno; pero,  en realidad, desde su trinchera, no han hecho acciones claras y contundentes que ayuden a erradicar este mal.

¿Pos, cómo? Si dentro de la corrupción gubernamental está la empresarial, que goza de los enormes beneficios que deja la obra pública amparada por la más oscura opacidad. (¿Cuánto se ha invertido en la pavimentación de calles, cuánto cuesta el metro cuadrado de pavimento y de qué espesor debe ser la carpeta asfáltica?) Este Castañón, de origen empresarial  es en estos momentos la punta de lanza de quienes se ven afectados por las reformas que plantea el nuevo gobierno.

Para no ir más lejos, el presidente de Coparmex se ha pronunciado a favor del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México en Texcoco, sin tomar en consideración los criterios expresados por instancias internacionales, que aseguran  que el polémico proyecto de más de 13,000 millones de dólares está dejando tras de sí un grave daño ambiental: ha destruido un refugio clave para aves migratorias; desgajado decenas de montañas del Estado de México; arrasado terrenos agrícolas y alterado el milenario paisaje de la ciudad sagrada de Teotihuacán.

Castañón se ha declarado en pro del nuevo aeropuerto internacional de la Ciudad de México por los colosales intereses que ahí se mueven; pero, desestima los criterios que la naturaleza representa.