Mouseland
La Canadian Broadcasting Corporation organizó un concurso para elegir al canadiense más grande de todos los tiempos. Lo ganó el socialdemócrata Thomas Douglas, quien había conducido el primer gobierno socialista de Norteamérica e introducido el sistema de salud público universal en Canadá, luego de crear, en base al Congreso del Trabajo y la Federación Cooperativa de la Commonwealth, el Partido Democrático, de izquierda.
Le fue dedicada la serie televisiva El Gigante de la Pradera; pero, se le conoce mejor por la historia que narró en el parlamento de Canadá. Es la historia de un lugar llamado Mouseland (tierra de ratones). “Tierra de ratones era un lugar donde todos los ratoncitos vivían y jugaban, donde nacían y morían. Y ellos vivían de la misma manera que tú y yo lo hacemos. Incluso tenían un Parlamento y cada cuatro años tenían elecciones. Caminaban rumbo a las urnas y votaban. Algunos incluso obtenían un aventón a las casillas, un aventón que recibían cada cuatro años, para ser verdad... Tal como tú y yo.
Y cada día de elecciones todos los ratoncitos acostumbraban a ir a las urnas y elegían un gobierno; un gobierno formado por enormes y gordos gatos negros. Ahora, si piensas que es extraño que ratones elijan un gobierno de gatos, solo mira la historia de Canadá por los últimos 90 años y verás que ellos no son más estúpidos que nosotros. No estoy diciendo nada en contra de los gatos.
Ellos eran buenos compañeros. Ellos conducían su gobierno con dignidad, pasaban buenas leyes, es decir, leyes que eran buenas para los gatos. Pero estas leyes que eran buenas para los gatos, no eran muy buenas para los ratones. Una de las leyes decía que la entrada de la ratonera tenía que ser tan grande que un gato pudiera meter su pata en ella. Otra ley decía que los ratones solo podían moverse a ciertas velocidades, para que el gato consiguiera desayuno sin mucho esfuerzo físico. Todas estas leyes eran buenas para gatos; pero, eran bien duras para los ratones. Y cuando los ratones la tuvieron más y más difícil; cuando los ratones no pudieron poner nada más, decidieron que había que hacer algo al respecto. Entonces, fueron en masa a las urnas, votaron contra los gatos negros.
Y eligieron gatos blancos. Los gatos blancos habían realizado una genial campaña. Dijeron: ‘Todo lo que necesita Mouseland es mas visión’. Habían dicho: ‘El problema con Mouseland... son las entradas redondas de las ratoneras’. ‘Si ustedes nos eligen... estableceremos entradas cuadradas’. ¡Y lo hicieron! Y las entradas cuadradas fueron del doble de las redondas; ahora el gato podía meter sus dos patas; la vida era más dura que nunca. Y cuando no pudieron soportar más, votaron contra los gatos blancos y pusieron a los gatos negros de nuevo; para luego regresar a los blancos y de ahí otra vez a los negros. Incluso trataron con gatos mitad blancos-mitad negros; lo llamaron: Coalición.
También, intentaron con gatos con manchas; eran unos gatos que intentaban sonar como ratones, pero que comían como gatos.
Verán mis amigos, el problema no estaba en el color de los gatos. El problema estaba en que eran gatos. Y porque eran gatos, ellos naturalmente veían por los intereses de gatos y no de ratones. Finalmente, llegó desde lejos un ratoncito, quien tuvo una idea. Mis amigos, estén atentos al humilde compañero con una idea. El les dijo a los otros ratones: ‘Miren compañeros. ¿Por qué seguimos eligiendo un gobierno hecho por gatos? ¿Por qué no elegimos un gobierno hecho por ratones?’ ‘¡Ohhh!’, dijeron, ‘es un comunista’. Así que lo pusieron en la cárcel.
Pero quiero recordarles que pueden encerrar un ratón o un hombre, pero no pueden encerrar una idea”.
En el último capítulo de Gigante de la Pradera, el personaje dice: “Man can now fly in the air like a bird, swim under the ocean like a fish, he can burrow into the ground like a mole. Now if only he could walk the earth like a man, this would be Paradise”.
En las redes circula un video que hizo el nieto de Douglas, el actor Kiefer Shouterland, con el discurso histórico.




DEJA TU COMENTARIO