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Mal fin de la era Yellen

Se dice que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, decidió la salida de la doctora Janet Yellen de la presidencia de Sistema de la Reserva Federal, a quien en varias veces encomió, dando la impresión de que la reafirmaría en el cargo, por puro capricho; nomás para romper con la tradición que se venía dando desde tiempo atrás, de que el presidente entrante dejaba en el cargo a quien fue nombrado por el anterior.

Se dice que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, decidió la salida de la doctora Janet Yellen de la presidencia de Sistema de la Reserva Federal, a quien en varias veces encomió, dando la impresión de que la reafirmaría en el cargo, por puro capricho; nomás para romper con la tradición que se venía dando desde tiempo atrás, de que el presidente entrante dejaba en el cargo a quien fue nombrado por el anterior.

Cierto o no, la salida de Yellen y la asunción de Jerome Powell tuvo un pésimo augurio que se tradujo en el desplome de los sistemas financieros de la Unión Americana y de Japón. Ayer, cuando tomó posesión Powell, el promedio industrial Dow Jones se desplomó más de 1,100 puntos, en su peor jornada en seis años y medio, siguiendo la tendencia con la que cerró el viernes previo. Con ello se dio al traste a las ganancias acumuladas en 2017 y se dio fin periodo de calma bursátil sin precedentes de Janet.

Mal fin de la era Yellen

El retroceso se resintió también en los bancos y las acciones de las compañías ligadas a la salud, la tecnología y la industria tuvieron grandes pérdidas. Igual, las empresas del sector energía cayeron a la par de los precios del petróleo. Se observó que los mayores perdedores de la jornada de ayer fueron Boeing, Cisco Systems, ExxonMobil, Home Depot, Johnson & Johnson y Pfizer. Todos ellos bajaron más del cinco por ciento.

El nuevo presidente de la FED no hizo referencia a la turbulencia ocurrida el viernes; pero, como un intento de retornar la confianza de los miembros y usuarios del sistema de la Reserva, dijo que: “Seguiremos vigilando de cerca la situación, estamos prestos a responder a los riegos que vayan surgiendo”. Se comprometió a: “Explicar lo que estamos haciendo y por qué lo estamos haciendo”, quizá aludiendo a la Dra. Yellen.

Cerró su discurso de toma de posesión manifestando que: “Me complace además reportar que nuestro sistema financiero es mucho más fuerte y resistente de lo que era antes de la crisis financiera que comenzó hace una década. Nuestro objetivo es que siga así”; pero, sin señalar que esos grandes logros se deben a la tarea de la presidente que enfrentó con valor y decisión la presión de los lobos que exigían tasas más altas.

Por muy diversas razones, la Sra. Yellen ha logrado un lugar harto preponderante en la historia de los Estados Unidos y del mundo entero: fue la primera mujer en dirigir la FED; fue quien mejor entendió el crack financiero del 2008 y, por ende, quien tuvo las más altas calificaciones para enfrenarlo y librar a su país y al mundo del flagelo del derrumbe del sistema capitalista; logró sortear las presiones económicas y políticas de los magnates dueños del dinero; su filosofía, clara y precisa, estimular la inversión productiva y la creación de empleo, y dejar de engordar a las prácticas especulativas.

La tarea de la señora fue definida con precisión por Donald Kohn, exvicepresidente de la Fed , quien expresó que: “Ella ha sido capaz de liderar el comité de una manera en que ha evitado una gran interrupción financiera al mismo tiempo que ha comenzado a reducir la política monetaria no convencional, lo que es todo un logro. Lo pudo hacer gracias a la continua mejora en el mercado laboral: el país acumuló siete años y tres meses con creación ininterrumpida de puestos de trabajo, abatiendo el desempleo”.

El cambio de presidente en la FED y el desplome de la bolsa ocurrieron cuando en el Japón ya era martes, lo que produjo también la caída de los principales indicadores bursátiles de allá. Para explicarlo, el analista de SMBC Nikko Securities,  Toshihiko Matsuno, expresó: “El mercado toma nota de las preocupaciones sobre la inflación y una posible degradación de la economía estadounidense, mientras los tipos de interés aumentaron demasiado de prisa”.

Como decía Jacobo Zabludovsky: “Mal comienza la semana para el que ahorcan el lunes”.

Para los de aquí, habría que decir que: “Cuando veas las barbas de vecino rasurar, pon las tuyas a remojar”.