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La última semana

Este próximo sábado primero de Diciembre se hará de manera oficial el cambio de poderes del Gobierno de la República… y aclaro, sólo será un trámite oficial, porque desde hace varios meses el presidente electo de México Andrés Manuel López Obrador ha ejercido el poder.

Durante toda la semana pasada AMLO realizó un recorrido por los principales medios de comunicación del país, dando una serie de entrevistas que para mi gusto resultaron un poco confusas, contradictorias y dispersas, pero muy interesantes; a continuación le muestro un breve resumen para que usted decida.

La última semana

Defendió su postura de la consulta popular, específicamente en el tema relacionado a la construcción del nuevo aeropuerto, consulta que para casi todos los mexicanos resultó bastante chafa, con un mecanismo de votación ilusorio.

También se aferró a la construcción del Tren Maya del que asegura ya hay un anteproyecto que garantiza su éxito, afirmó de igual modo que en el presupuesto del 2019 ya se destinarán los impuestos obtenidos de turismo para el inicio de esta obra, por lo que no tendrán un impacto negativo… me pregunto ¿Cómo hará para construirlo sin modificar el presupuesto? Seguramente lo pedirá de regalo a los tres reyes magos.

Sin embargo la declaración que se llevó la semana no sólo en medios de comunicación sino también en redes sociales, fue la posición que hoy tomó con respecto a la actuación del Ejército Mexicano.

Durante su campaña, López Obrador aseguró que el Ejército regresaría a los cuarteles, lo dijo en entrevistas y en comerciales tanto de radio como de televisión; declaraciones que ya niega rotundamente haberlas hecho, incluso retó al periodista Joaquín López Dóriga a que le demostrara que él lo había dicho.

Lamentablemente el todavía presidente electo olvidó que todo queda grabado, que todas sus declaraciones en eventos masivos, y en medios de comunicación están registradas y que sus afirmaciones de que el Ejército no tenía la capacidad de brindar seguridad a los mexicanos se encuentra fácilmente desde un celular con una búsqueda en internet.

Andrés Manuel asegura que creará la Guardia Nacional a pesar de cientos de peticiones de asociaciones civiles e instituciones; diciendo que respeta la libertad de todos para manifestarse, pero a pesar de las negativas llevará a cabo la reforma constitucional para la instauración de la Guardia Nacional para militarizar el país.

En cuanto a la posibilidad de un decrecimiento financiero, la inestabilidad del peso mexicano y la Bolsa de Valores en el país a causa de las lamentables declaraciones de sus senadores, el casi casi presidente de México contestó que eso lo resolverá acabando con la corrupción, la cual fue su única respuesta al más complicado panorama para los inversionistas.

“Es que no me acuerdo y si no me acuerdo no paso”… será la frase del nuevo gobierno.

Mientras Andrés Manuel se contradice, ya levantó la mano un gobernador valiente: Enrique Alfaro, gobernador electo del estado de Jalisco, quien la semana pasada dio un fuerte mensaje político asegurando que no va a permitir que se vulnere la soberanía de su estado, ni se traicione el pacto federal.

Enrique Alfaro respaldado por los presidentes municipales de su estado, se manifestó en contra de la creación de la figura de los 32 súper delegados federales, quienes se espera controlen los programas sociales federales y resten el peso a los gobernadores.

También dijo estar en contra de la manera en que López Obrador combatirá la corrupción, en Jalisco no están de acuerdo con la política de corrupción y olvido, y les pide a los gobernadores de otros estados de la República que se sumen a él para formar una verdadera oposición contra el presidente electo.

“El riesgo de que las voces de las regiones, estados y municipios de este país sean borrados para siempre, es enorme”, denunció Enrique Alfaro y probablemente tenga razón.

De mi parte espero que a los mexicanos nos vaya bien, que podamos construir en nuestro país la vida que queramos tener; recordando las palabras de Epíteto: “Un barco no puede navegar con una sola ancla, ni la vida con una sola esperanza”.