Recordando la construcción de un puente sobre las vías del ferrocarril

Hoy quiero invitarte a realizar Un Viaje al Pasado para recordar los sueños hechos realidad de la construcción de un puente elevado, sobre las vías del ferrocarril, que vino a desahogar el tránsito que provocaba el paso del tren por esta ciudad.

Grandes han sido los sueños de los riobravenses entre los que se destacan la construcción de un puente internacional entre Donna, Texas y Río Bravo, uno o varios puentes vehiculares sobre las vías férreas, la edificación de un Hospital General, construir un puente vehicular sobre el canal Anzaldúas, crear la facultad de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), la construcción de un auditorio con su respectivo teatro, así como la creación de un museo de historia, pocos han sido los presidentes municipales que han tenido la iniciativa de realizarlos o les ha faltado una visión futurista. 

En el año de 1993 el licenciado Juan Antonio Guajardo Anzaldúa planeó un puente vehicular ferroviario, el primer proyecto en borrador para que Río Bravo, Tamaulipas, pudiera resolver el añejo problema del tren, así se le denominaba a la situación que se iniciaba en los años 50’s hasta el otoño de 1992, cuando este personaje con visión y un grupo de ciudadanos bien intencionados desarrollaba la campaña electoral en pos de la alcaldía, apoyado por el Partido Acción Nacional (PAN).

En el mes de septiembre ya siendo candidato Juan Antonio, se topa con un grupo de periodistas en la banqueta de su establecimiento comercial en la Avenida Francisco I.  Madero, frente a la oficina fiscal y les dice: 

“Miren muchachos les quiero mostrar un proyecto que lo acaricio desde hace tiempo, he pensado que ya es necesario y urgente construir un puente vehicular sobre las vías férreas”, ya en el interior de su oficina les mostró el proyecto y adelantó, “mírenlo bien muchachos, y ahorita les explico las dos posibilidades” dijo que la primera posibilidad de este proyecto se podría cristalizar sobre la calle Tlaxcala, ahí donde está la plaza principal, y la segunda sobre la avenida México, que por cierto, fue en donde  finalmente se construyó.

Al contemplar dicho plano explicó que él era el candidato a la alcaldía de Río Bravo por el PAN, y le gustaría más por la calle Tlaxcala, donde está la plaza Benito Juárez, pero técnicamente les aseguró, si se autoriza será por la avenida México, aunque tampoco descartaba esto Juan Antonio. En pláticas previas con ferronales, decía que dicha dependencia, proponía que de llegar a autorizarse era mejor que se reubicaran las vías del ferrocarril hacia la Brecha 30 norte, pues se agolpaba en ese entonces la autorización del puente internacional Donna-Río Bravo.

Ya siendo Alcalde afirmaba que fue testigo de muchas ocasiones en que en horas de la mañana, los niños y jóvenes estudiantes así como muchos obreros se cruzaban por debajo de los vagones, cuando la locomotora estaba encendida y en pleno movimiento.

Al fin uno de los sueños de los riobravenses se vieron cristalizados en el año de 2006 cuando dio inicio la construcción del puente vehicular el cual fue  inaugurado a finales del año 2007 para ser más exactos en el mes de noviembre, siendo presidente Juan de Dios Cavazos Cárdenas y gobernador de Tamaulipas el ingeniero Eugenio Hernández Flores.

Es por eso y más que hoy lo recordamos.

¡Muchas gracias por hacer juntos Un Viaje al Pasado, hasta la próxima!

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