¿No te alcanza tu salario?

Una de las quejas más comunes que escucho cuando trabajo con el personal de las empresas es que no están satisfechos con lo que ganan.  A unos no les alcanza porque consideran que les pagan muy poco y a otros no les rinde el dinero porque no saben administrar su quincena. Y les diré algo, ninguna de las dos razones anteriores son válidas para solicitar un aumento de sueldo. 

Es muy común confundir las necesidades personales con las necesidades de la empresa. Necesitas tener muy claro que los aumentos de sueldo no se dan ni por antigüedad, ni por compasión y mucho menos por cortesía. Los aumentos de sueldo significativos se obtienen a través de los resultados que le das a la compañía. 

Muchos empleados sienten que sus esfuerzos no son tomados en cuenta por el jefe y les diré algo, no se trata de que el jefe te celebre con confeti y serpentinas cada meta que logres, porque al final del día te pagan para que des resultados. Les juro que no entiendo a los empleados que dicen “es que mi jefe nunca valora mi esfuerzo”. Cómo por qué razón tu jefe tendría que agradecer tu trabajo si para eso fuiste contratado, ¿me explico? No estoy diciendo que no es agradable que te reconozcan, claro que lo es, pero una cosa es gozar el reconocimiento y otra muy distinta, necesitarlo. 

Tienes que tener muy claro cuáles han sido tus logros y cuál ha sido el valor agregado que le has brindado a la empresa. Para que tu petición tenga mayor probabilidad de éxito te recomiendo que te tangas datos y números concretos. Por ejemplo: “He logrado incrementar las ventas en un 18 por ciento en comparación al primer trimestre del año pasado”. O si tu puesto es de servicio, el argumento puede ser: “En el año y medio que llevo en el departamento de compras he conseguido la misma calidad de insumos y le he ahorrado a la empresa 23 por ciento de los gastos fijos”. ¿Por qué es importante que menciones numéricamente tus logros? Porque tu jefe supervisa tu trabajo, pero no registra a detalle tus logros. 

Así es que te daré 6 recomendaciones generales para que sea más efectiva tu petición:

1. Ponte al corriente. Haz una lista de todos tus “pendientes” y acelera tu ritmo (y efectividad) para que cuando solicites el aumento todo esté al día y que no te salga el tiro por la culata. 

2. Haz un sondeo de salarios de acuerdo con tu puesto. Realiza una especie de estudio de mercado para que no pidas de más ni de menos y considera que los sueldos se determinan también por los años de estudio, trayectoria y aptitudes. Que no te de miedo si no cubres todo el perfil, siempre y cuando estés dando resultados en la empresa. 

3. Infla la cantidad. Una vez que ya investigaste el mercado y bajaste a papel tus logros, es momento de que le pongas precio a tu puesto. Pide más de lo que quieres, no es por ambición, sino por estrategia. Te recomiendo también que no redondees, es decir, en lugar de pedir 3 mil o más pide 2 mil 789 dólares justificándolos con tu lista de logros. 

4. Calladito te ves más bonito. Si estás atravesando por tragedias o calamidades personales, no las menciones. Enfócate a hablar únicamente al aspecto profesional y haz énfasis del valor que brindas a la empresa. 

5. No te compares. Si alguien de tu mismo puesto o rango gana más que tú, no lo menciones. Eso se prestaría a dimes y diretes que lejos de acercarte a tu meta, te alejarán. Insisto, demuestra lo que has logrado y básate sólo en ello. 

6. Planea el método. Hay jefes a los que les gusta hablar al grano, directo y sin escalas. Otros les gusta que primero les preguntes por la familia. Hay quienes prefieren la información concisa en un correo electrónico y otros prefieren agendar una junta. Tú conoces a tu jefe, aplica la técnica que a él le venga mejor. 

Como te darás cuenta, la recomendación más básica y poderosa es que te des cuenta de que los aumentos de sueldo no se otorgan por lo que necesites para vivir sino por los resultados que das a la empresa. Así es que primero demuestra de qué material estás hecho y después cacarea tu salario. Por último, recuerda para ser feliz no se necesita ganar más, sino en necesitar menos. Ahí te la dejo. #Anótele 

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