Guillermo Rosales Delgado ‘La Cegueta’

Era travieso, alegre, enamorado, conquistador, dicharachero y muy bromista. 

Guillermo Rosales Delgado, originario del Ejido Río Bravo, Municipio de Reynosa, Tamaulipas, nació el día 10 de febrero del año de 1910, hijo del señor Santos Rosales y la señora Guadalupe Delgado, tuvo 8 hermanos, 3 hombres y 5 mujeres, Benito, Juan, José María, María Guadalupe, Ignacia, Manuela, Concepción y San Juana Rosales Delgado.

Sus estudios los realiza en una casa particular, pues aún la ciudad no contaba con escuelas públicas, llegando sólo a estudiar un par de años.

A la edad de 12 años en el mes de diciembre se disponían a recibir el año nuevo, cuando él, junto con unos amigos tronaban cohetes en forma de festejo, accidentalmente le truenan muy cerca y es cuando pierde un poco los sentidos audio visuales, es de ahí que le nace el apodo de la Cegueta, pues para poder leer necesitaba acercarse el periódico o las revistas para poder leerlos.

Años después el Ejido Río Bravo le otorga una parcela, la cual empieza a trabajar arduamente para ayudar a su familia y sacar para sus gastos personales, cierto día en un baile, conoce a la señorita Josefa Fernández Sarmiento con la cual tiene un corto noviazgo, él se había enamorado de ella creyendo que estaba muy alta pues ella se paraba en una banca al otro lado de la barda para mirarlo cuando pasaba, fruto de ese matrimonio tuvieron 8 hijos Tomasa, Herón, José María, Jesús, Ignacia, Guillermina, Martín y Juan Pablo Rosales Fernández.

Guillermo heredó el gusto de tocar la tambora gracias a su papá, quien fue el que lo enseñó desde muy pequeño a tocar dicho instrumento, por lo cual un día decide formar un grupo musical al cual le puso como nombre Los Alegres de Río Bravo, sus integrantes eran el señor Primitivo Ramírez en el acordeón y el señor Pedro que tocaba la guitarra dicho grupo tocaban en cantinas incluso en tiendas como la Famosa, Zapatería Melgoza y la famosísima tienda El Cañonazo, este conjunto tocaba también cada año en el festival del Día del Charro que se efectuaba en la ciudad de Brownsville, Texas, también le amenizaron algunas fiestas a gente como el señor Héctor Gómez Lira, igualmente acudía muy seguido cada vez que organizaba fiestas en su rancho, le tocaba al señor Don Antonio Mercado, otras veces tocaba en forma individual en las peregrinaciones que organizaba cada año la señora Angelita Aviña, asimismo lo contrataban los políticos en sus campañas políticas o celebraciones de triunfos electorales como en el caso del señor Pedro Martínez Vega, quien fue el primer presidente de Río Bravo.

Una de sus grandes pasatiempos era acudir a ver los aficionados de canto y concursos de caguamas, que se efectuaban en el cine Río Bravo, además le gustaba mucho ver la lucha libre y cuando iba al Cine Rey, le gustaba sentarse enfrente de la pantalla y comerse unas ricas semillas de calabaza, le gustaba mucho interpretar los corridos que el mismo componía. 

Comentan sus hijos que hacia sus propias tamboras, el mismo curtía los cueros de vacas y hacia los aros de madera, fabricaba en una forma rústica unas bonitas tamboras las cuales vendía a buen precio.

Desafortunadamente fallece el 11 de diciembre de 1990 llevándose hasta su tumba su inmemorable tambora la cual le colocaron sus hijos en su sepultura.