CATASTRÓFICO

Nos adentramos en mayo y para abrir boca a los restauranteros y a los negocios de ventas de flores y pasteles, así como de regalos se les fue una de las fechas más celebradas por los mexicanos y por lo mismo, en la mejor temporada para ventas en todo el año como es la tradicional celebración del Día de la Madre, que por cuestiones de la pandemia todos esos giros comerciales nomás verán pasar el chillonazo y solo les queda levantar las manos al cielo para implorar a que las autoridades tomen medidas más consientes, sin descuidar las sanitarias.

Pero visto está, no encuentran solución para, por un lado permitir que la gente vuelva a salir y por el otro evitar que se propague el coronavirus, que por cierto, el gobernador del Estado, FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA, en esta semana vino a supervisar cómo quedaron concluidos los dos hospitales temporales especializados para atender enfermos por el COVID-19. Uno está ubicado en el Hospital Materno Infantil y el otro en el Hospital General, con lo cual ahí responde el gobierno de Tamaulipas con acciones concretas para hacerle frente a esta pandemia.

Pero en estos momentos lo que trae al punto de asfixia a los comerciantes es que no pueden abrir sus puertas. Siguen las restricciones quedando al arbitrio de los inspectores de la COEPRIS cuáles son de actividad esencial y cuáles no, lo que como es natural causa molestias entre los micro empresarios porque mientras a ellos no les permiten abrir sus puertas, a los macro negocios lo mismo en los centros comerciales sí les permiten, aunque en los departamentos de muebles no hay ventas más que en línea.

Y bueno, se comprende que un macro centro comercial tiene ventajas por tener mayor capacidad económica y tener diversos departamentos que a su vez le permite, con que abran unos, ir afrontando los gastos, pero los micro negocios que es un solo giro están totalmente indefensos.

Pero este fin de semana el cierre es parejo para evitar que vuelva a suceder lo que aconteció en la celebración del Día del Niño. La gente se agolpó por las pizzerías, pastelerías y tiendas de dulces sin respetar la sana distancia. Fue un desorden que no se sabe todavía cuántos contagiados produjo. Dios quiera no haya habido ni uno solo.

Pero como ya se está viendo que la gente no respeta, de plano la autoridad dispuso cierre de negocios desde ayer por la tarde para reabrir hasta el lunes sin distingo alguno. Otro trancazo a la economía de la localidad.

Por si fuera poco, los panteones también estarán cerrados al público y eso implica cero ingresos a los floristas y a los músicos, pero sobre todo que la gente no podrá acudir a honrar a sus familiares ya fallecidos.

En pocas palabras, el COVID-19 nos ha estado pegando en toda la mandarina y partiéndosela en gajos a los comerciantes.

Lo peor es que la cuarentena que ya va en tiempos extras. Si el gobierno no tiene recursos para auxiliar a los formales y sobre todo a los informales, esto va a ser un caos porque si bien hasta ayer no se habían registrado en nuestra querida Reynosa casos de vandalismo, que en realidad son de raterismo, las cosas se van a poner al rojo vivo, y tanto la Policía Estatal como la Guardia Nacional van a tener chamba a pasto.

Por lo pronto los malandracos siguen haciendo de las suyas. Las tiendas de conveniencia son sus blancos predilectos, no hay quien los pare y lo que es peor, no hay quien investigue para dar con la identidad de todos aquellos que del robo y el asalto han hecho su diaria actividad.

No peco de pesimista, pero las cosas, cualesquiera lo saben y lo siente, no están bien y la luz al final del túnel nomás no se ve. Queda la esperanza de que comenzará el gobierno a permitir algunas actividades, pero limitadas en los negocios considerados como no esenciales que vienen siendo la inmensa mayoría, por lo cual de ese tamaño es el daño que está sufriendo la economía en nuestra querida Reynosa y la región.

Lo increíble es que no obstante la escasez de dinero, en las cajas de la presidencia municipal y de la Oficina Fiscal del Estado se están formando filas, unos para pagar el impuesto predial y otros para poner al corriente sus documentos vehiculares, lo que nos dice que Dios es muy grande. Pero debiera responder el gobierno en la misma medida el esfuerzo que hace la ciudadanía para estar sin adeudos de tipo fiscal.

Pero de momento lo que nos ha absorbido el seso en esta pandemia es que en Estados Unidos provocó suprimieran 20 millones de empleos y en la Gran Bretaña ocasionó 30 mil decesos, números ante los cuales los de México son una pinturita, nomás que tenemos que tomar en cuenta la enorme diferencia que hay entre la población económicamente activa de Estados Unidos con la nuestra, al igual que de los países que conforman el Reino Unido o de la Gran Bretaña.

En ambos países tienen bastos recursos para afrontar los estragos del COVID-19. No es el caso nuestro, ese virus nos agarró con una economía en bajada que nos vino a dar prácticamente el puntillazo, aunque el presidente López Obrador sigue asegurando que nos vamos a levantar en atención a los ahorros que ha estado haciendo el gobierno y con ellos apechugando los gastos adicionales que han tenido que hacer. Repito, no es que sea pesimista, pero se está poniendo grueso el asunto.

Y por el mundo de la política tal parece que la pandemia no es cosa de preocupaciones; cada prospecto sigue tejiendo sus planes. Unos para las elecciones del 2021 y otros para las del 2022,

Las reyertas internas están intensas en el campamento albiazul. Se saben que son los poderosos de Tamaulipas y ganando las candidaturas piensan que lo demás será cantar y coser como sucedía con el viejo PRI en que lo complicado era obtener la candidatura. Ganar la elección ya sería mero trámite en atención a que la oposición era prácticamente un escenario.

Hoy en día las cosas no están así, pero la oposición en Tamaulipas todavía no se ha significado, apenas van saliendo de un pleito interno los morenistas por la aprobación del crédito por 4,600 millones de pesos que va a solicitar el gobierno del Estado.

Tuvieron que jalarles las orejas de la cúpula para que firmaran la controversia constitucional que traía en las manos RIGOBERTO RAMOS ORDÓÑEZ, pero como necesitan 12 firmas y a la fecha solo tienen 10 y lo más probable es que no obtendrán las otras dos que le faltan, todo quedará en intentona.

Pero este incidente aun así dejó heridos, primero los siete diputados morenistas que aprobaron el crédito de marras al quedar exhibidos como maiceados y luego el otro damnificado es GERARDO PEÑA FLORES, quien difícilmente ya tendrá interlocución con la fracción morenista en el Congreso del Estado.

De buena fuente sé que la jalada de orejas estuvo ruda y les advirtieron que no querían saber que en el futuro tengan arreglos por abajo del agua. Dicen que la jaloneada fue de mero arriba y sobre advertencia no hay engaño.

Y por hoy, BASTA.

Y por hoy, BASTA.

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