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Caso Reynosa se irá a la Regional de Monterrey

Un ambiente de incertidumbre política prevalece lo mismo en Reynosa que en Río Bravo. El Tribunal Electoral de Tamaulipas recientemente dio a conocer que ya resolvió 17 casos desechando las correspondientes impugnaciones. Y le quedan siete pendientes, entre ellos nuestra querida Reynosa y el vecino municipio.

También ya se ha dicho que resolverán estos asuntos a más tardar el próximo día 20 del presente mes.

Caso Reynosa se irá a la Regional de Monterrey

Supongo que dejaron para el final estos dos expedientes por que así han de estar de complicados, pero bueno, el tiempo se agota y ya no queda mucho.

Entre tanto en el palacio municipal campea la duda pues si bien al personal de base le resulta indiferente quiénes serán los nuevos jefes a partir del próximo primero de octubre, a la plana mayor del actual ayuntamiento les asfixia no saber cuál será su destino y el júbilo con que recibieron la noticia de que ganaron las elecciones el pasado primero de julio hoy ese gusto está en el aire.

Claro que en el campamento panista están confiados en que el Tribunal Electoral validará los resultados arrojados por el Consejo Municipal. Aseguran que no hubo irregularidades como para modificar los resultados mientras que entre morenistas y tricolores hay confianza en que se anularan las elecciones y aseguran haber aportado pruebas suficientes para una resolución de esa magnitud.

De momento, todo es especulación tanto en un bando como en el otro, lo que no hay ninguna duda es que el asunto Reynosa no terminará en Ciudad Victoria porque si los “magísters” del Tribunal Electoral de Tamaulipas anulan las elecciones, el PAN se inconformará y lo mismo harán el PRI y el Morena si validan las elecciones de Reynosa, situación que llevará el expediente a la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

Pero independientemente de la legalidad habrá que saber si habrá presión política y en estos momentos el único partido que puede hacer sentir su peso es el Morena. El PRI y el PAN se encuentran desmadejados. Su preocupación de momento es definir quién será el nuevo dirigente porque CLAUDIA RUIZ MASSIEU está temporalmente al frente del tricolor mientras que DAMIÁN ZEPEDA dejó vacía la diligencia en el albiazul porque se apresta a ocupar una curul en el Senado mientras que RICARDO ANAYA anda aun atolondrado por el golpazo del pasado 1º de julio.

Entonces, albiazules y tricolores tienen otras preocupaciones que andar pujando por una causa en tribunales electorales así se trate de un municipio de los importantes como indudablemente lo es nuestra querida Reynosa.

Los magistrados electorales de Monterrey dependen del Poder Judicial de la Federación, un poder que ya le metió reversa a la intensión de oponerse a la reducción de sueldos de funcionarios de dicho poder. Entendieron que le iban a dar las contras no solamente al próximo presidente de México sino a alguien que tendrá el control del Congreso de la Unión y por si fuera poco que contará por un abrumador respaldo social para todas las medidas que implemente.

Ponérsele al brinco a un presidente con esas características sería prácticamente un suicidio y en el poder judicial hay gente sensata por naturaleza y optaron por buscarle la cuadratura al círculo y ante tal situación si el Morena a través de RICARDO MONTREAL, por ejemplo, que presenta ante los magistrados electorales de Monterrey para pedirles que resuelvan con mucho cuidado el asunto Reynosa, será una observación que descarto se la vayan a pasar por alto, al contrario leerán el expediente milimétricamente para tomar una decisión ajustada a derecho como dicen los juristas, sobre todo que corresponda a la realidad. No se trata de anular elecciones por decreto eso sería una grave decisión.

Pero si el Morena y el PRI probaron sus hechos, tampoco sería bueno que por tecnicismos legales les escurrieran lo que se dice al bulto.

En pocas palabras, van a seguir las dudas en atención en que el asunto Reynosa y supongo el de Río Bravo también se van a resolver en definitiva en la sala regional del poder judicial de la federación con asiento en Monterrey, Nuevo León, decisión que habrá que tomar en el mes de septiembre próximo y si es convalidando el resultado de las elecciones, no habrá ningún problema porque a partir del primero de octubre tomará posesión el nuevo cabildo, nada más que si anulan las elecciones ya no habrá tiempo para que se lleven a cabo antes de ese primero de octubre lo cual nos lleva a la situación de que esto desemboque en una Junta de Administración Civil que sin tantas prisas organizaría la segunda elección.

Algunos estiman que puede ser dentro de los seis meses siguientes, aunque la ley electoral dispone que debe convocarse 40 días después de su anulación, pero en que las organiza esos 40 días se van volando y por lo mismo terminaran llevándose seis meses, un plazo muy apetecible para el que llegue a encabezar esa Junta de Administración Civil.

Así andan las especulaciones y habrá que esperar: se convalidan o se anulan.

Y por hoy, BASTA.

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