Arrancaron las campañas

Pues las campañas de candidatos federales ya está en marcha y en Reynosa el obstáculo que podría evitar el éxito de los eventos que organizan es que la ciudad está envuelta en problemas de inseguridad.

Las autoridades, lo mismo la federal que la estatal y la municipal nomás no dan pie con bola para encontrar la solución de este problema, que digo solución, disminuirlo y ya nos damos por bien servidos por lo que nada extraño sería que el próximo jueves el rumbo de las Jarachinas se conviertan en zona de guerra aunque eufemísticamente le llaman zona de riesgo y eso daría al traste con el acto proselitista de AMLO pero por otro lado aumentaría la decepción ciudadana con la alternancia que hemos venido padeciendo desde el año 2000, una alternancia en el poder presidencial que solo sirvió para aumentar el número de jodidos y por consecuencia la inseguridad, alternancia que también ya está causando decepciones a niveles de gobierno estatal y del municipal.

Estos últimos, de plano lavándose las manos del problema pero que el ciudadano bien sabe que las autoridades locales también han fallado pues si bien a todos nos queda claro que de investigar los delitos es talacha de autoridades federales y estatales tampoco ya nos juegan el dedo en la boca con que la autoridad local no tiene injerencia en ese tema. 

Claro que lo tiene y en gran medida, tiene a su cargo la responsabilidad de aplicar medidas de prevención del delito que si estas medidas fallan o simplemente son inexistentes, entonces contribuye al nacimiento de la delincuencia, aunque también habrá que decirlo, buena parte de la culpa corresponde también a los padres de familia que no supieron o simplemente no les importó darle una buena formación a sus hijos, y algunos en el colmo del cinismo hasta se jactan de que anden en malos pasos.

Entre tanto las balaceras continúan. Ya quedó atrás la Semana Santa que estuvo muy endiablada por nuestra querida Reynosa y el domingo le siguieron de frente. Ya nos queda solamente la oración como recurso para que este clima violento cese aunque solo sea por unos cuantos días, ya bien sabemos que este problema no parece tener fin.

Y de veras, al igual que todos me resisto a creer que estamos condenados a vivir en una ciudad donde la vida transcurre en medio de la inseguridad.

Ya viene cambio de gobierno en la presidencia de la república y en las alcaldías, los candidatos presidenciales en su arranque de campaña soslayaron el tema de la inseguridad. Yo espero que en los próximos días lo aborden pero no con propuestas al chilazo sino con proyecciones apoyadas en la experiencia de gente experta en el tema.

Lo mismo va para los candidatos alcaldicios. Sacarle la vuelta a ese tema es renunciar de antemano a lo que es contribuir a la principal obligación que tendrán como lo es afrontar el problema de la inseguridad.

En ese aspecto, los alcaldes que van por la reelección estarán expuestos a los reclamos ciudadanos. En las elecciones de junio de 2016 ofrecieron atorarle y a casi dos años de distancia estamos viendo que las cosas siguieron igual o peor si nos guiamos por los números, y todavía más peor porque el problema se agravó y no se ve por donde se pueda solucionar.

Pero bueno, eso es problema de los candidatos. Convencer ciudadanos y no tendrá mucho espacio para esa tarea.

La incredulidad es lo que han sembrado y ahora tendrán que pagar la factura, aunque desde luego tendrán a su favor el control de los programas sociales con los que obtienen votos, sobre todo en aquellos segmentos en donde una despensa o una beca hacen la diferencia.

Ya incluso MARGARITA ZAVALA, la candidata presidencial independiente, en su discurso inicial de campaña instó a los votantes a derrotar a las estructuras gubernamentales que acarrean votos, a los candidatos de los gobiernos lo mismo priistas que panistas y perredistas. No incluyó al MORENA porque no es partido en el poder ni siquiera a nivel de gobernador y eso es una ventaja para ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.

Margarita, con todo y lo independiente muchos problemas tendrá para despojarse de su pasado cuando fue parte del gobierno en el poder, pero se ve que su misión es despelucarle cuatro o cinco puntos a RICARDO ANAYA, quien dicen estará hoy en Reynosa en un acto masivo en el gimnasio de la UAT, y me parce que con eso se dará por bien servida. El dejar al “Cerillo” en tercera posición será pretexto más que suficiente para que en la recomposición interna del PAN dejen fuera a Anaya y los que estuvieron orquestándolo, lo que propiciará que otra corriente se apodere del partido albiazul pero ya con miras para las elecciones de 2024.

Por lo pronto tiene que tumbarle esos cuatro puntos y los vaticinios son en ese sentido, así que las apuestas son si López Obrador llegará al final del periodo de campaña no como líder en las tendencias electorales sino más bien si lo hará con una ventaja de diez o 12 puntos.

En mi personal enfoque no creo que se llegue a dar tal cosa pero si tengo la corazonada de que lo hará con una ventaja mínima de cinco puntos y con ese porcentaje será más que suficiente para que sea inevitable su arribo a la presidencia de la República con todo y la movilización de los programas sociales.

Y por hoy, BASTA.

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