Alcaldes se equivocan al protestar ante AMLO

En mi personal enfoque, los alcaldes que andan reclamando les envíen más recursos por parte de la federación, como que se andan orinando fuera de la olla al estar exponiendo su petición en vivo y a todo color al presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, como lo hicieron ayer al presentarse en palacio nacional en donde se desarrollaba la mañanera conferencia de prensa.

Si lo hicieron por reflectores, sobre todo el bailarín alcalde victorense, XICOTÉNCATL GONZÁLEZ URESTI, los atrajeron, pero sin ningún efecto práctico. El presupuesto de la federación para 2020 ya está delineado, solo falta su correspondiente aprobación por parte de la Cámara de Diputados.

Entonces, Xico y su pandilla a donde deben acudir a dar circo es al palacio de San Lázaro.

Supongo que ellos a su vez suponen que no van con los diputados porque los van a tirar a lurias y optaron por irse directamente con el jefe de jefes, aunque no creo que en él sí vayan a encontrar eco en su pretensión y menos en estos días en que el presidente de México ha sido objeto de un incesante jaloneo mediático a raíz del culiacanazo, del que todavía se sigue hablando y que en Estados Unidos ya dieron por concluido el tema, incluso con el correspondiente espaldarazo por parte de la Casa Blanca por la decisión que tomaron los del Gabinete de Seguridad y con el respaldo de AMLO, de dejar en libertad al junior de El Chapo Guzmán, para evitar un mayor baño de sangre por las calles de Culiacán.

Entonces, con un ánimo así, difícilmente el presidente López Obrador prestará plena atención a los requerimientos de unos alcaldes que cometieron el error de llevar a la punta a un payaso que si tuviera una pizca de vergüenza andaría rojo todos los días por la falta de agua en Ciudad Victoria, una escasez que ya tiene bien crispada a la gente, aunque habrá qué decirlo, no es culpa de don Xicoténcatl que el vital liquido se haya escaseado por la capital de Tamaulipas.

No ha llovido y eso tiene prácticamente seca la presa Vicente Guerrero, que es la que abastece de agua a la cuerudísima capital tamaulipeca.

Entonces ante este obstáculo de la naturaleza no van a obtener recursos para el agua, ya no es cosa de billetes sino de disposiciones de la madre naturaleza, que por otro lado no tiene sustento el reclamo en la disminución de recursos de la federación hacia los gobiernos estatales y municipales pues no ha habido tal reducción.

Sucede que por disposición del gobierno de la Cuarta Transformación ahora se están aplicando los recursos directamente y los del llamado gasto social se entregan a los beneficiarios sin intermediarios, como se venía acostumbrando hacer a través de dependencias estatales.

Tampoco se redujo la inversión en obras, ese dinero lo aplica directamente la federación por medio de sus dependencias federales. Un ejemplo de ello fue la reciente visita de funcionarios de la Sedatu y de la Comisión Nacional para la Vivienda, quienes vinieron a iniciar un programa de obras con recursos 100 por ciento de la federación, y las obras serán asignadas mediante la licitación correspondiente de parte de la misma dependencia federal, de ahí que no es que hayan estado reduciendo recursos, solamente se están aplicando directamente y al ciudadano no le interesa si hoy lo recibe a través de la federación o le sigue llegando por medio del estado o del municipio, de modo que no encontrará apoyo social lo que hoy andan reclamando algunos alcaldes.

Mejor pónganse a ejercer con eficiencia sus respectivos presupuestos. La tónica ya está cambiando y para 2020 será todavía más marcada. Que los municipios gasten en obras sus recursos y los estados otro tanto, y la federación lo hará por su cuenta.

Esto me recuerda las desaparecidas Juntas Federales de Mejoras Materiales que aquí en nuestra querida Reynosa operaron exitosamente.

Todavía los viejos reynosenses recordamos a presidentes de esas juntas como FERNANDO RIVA PALACIO, con conexiones hasta mero arriba, y que gracias a que el entonces alcalde JOSÉ CRUZ CONTRERAS hizo clic con él, se lograron obras de mucho impacto como los pasos a desnivel, el parque de béisbol Adolfo López Mateos y la planta potabilizadora, así como obras de pavimentación.

Nunca hubo un roce y menos reclamo de la autoridad municipal a la federal porque se ejercían los recursos a través de la JFMM.

Así funcionaron muy bien las cosas con los subsecuentes titulares de esa dependencia federal como don PABLO ALDRETT CUÉLLAR y el ingeniero GASPAR MONTAÑEZ.

Luego por disposiciones constitucionales de la municipalización mediante la reforma al 115, declararon ya inoperante a las Juntas Federales de Mejoras Materiales, pero a juzgar por los hechos era mejor ese esquema de trabajo porque ahí están las obras para respaldar la afirmación y por lo mismo no hay porqué andar dando brincos cuando el suelo está parejo.

Pero claro, algunos aprovecharan la ocasión para reclamar con el objetivo de atraer reflectores. Eso hasta los niños lo deducen.

Y no entiendo porqué insisten con esa actitud cuando hay otras formas de figurar en la política como disminuir la inseguridad que, por cierto, sobre este tema se aventó su rollo el vanidoso senador neolonés SAMUEL GARCÍA SEPULVEDA, quien me dicen pretende ser gobernador… háganos el regrandísimo favor.

Me parece que los regios con El Bronco JAIME RODRíGUEZ ya tuvieron, que ahora quieran probar con este senador de Movimiento Ciudadano en mi personal enfoque me parece todo un dislate, pero allá cada quien.

Pero regresando a la “mañanera” de ayer, a los alcaldes que protestaban no se les permitió llegar hasta el presidente López Obrador, simple y sencillamente porque la conferencia de prensa está reservada para periodistas.

Y cuando algunos ediles, la mayoría panistas, quisieron acercase al presidente de México, los pararon en seco dándoles una rociadita de gas pimienta. ¡Sopas Petra!

Y hoy en nuestro México lindo y querido se celebra el “Día del Médico” y por ese motivo envío una felicitación a todos los profesionales que contribuyen a mejorar nuestra salud.

En especial, saludo a mi médico de cabecera, pero, sobre todo, gran amigo desde hace más de 30 años, SERAPIO CANTÚ BARRAGÁN, a quien por su gran corazón y por su profunda vocación de servicio hace ya muchos años lo “bauticé” como el médico de los pobres.

¿Y sabe por qué le di ese adjetivo?, pues porque si usted acude a su consultorio podrá darse cuenta que a los pacientes de escasos recursos económicos además de no cobrarles la consulta, les proporciona medicamentos sin costo para su recuperación. Ello, independientemente de que constantemente encabeza brigadas médicas en las colonias marginadas del municipio.

Y por hoy, BASTA.

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