El agua clara y el chocolate espeso

En los días que corren, a la puerta de la Cuarta Transformación de la República, que permitirá sacar al país del terrible pantano de corrupción y la simulación en que lo hundió la cáfila de gobernantes pillos aliados del capitalismo salvaje, cobra mayor sentido la frases venida desde el Imperio romano: “La mujer del César no solo debe ser honrada, sino además parecerlo”. Igual puede decirse de los gobernantes actuales.

A mediados del año pasado, la Auditoria Superior de la Federación encontró que el municipio de Reynosa había recibido en tiempo y forma los recursos transferidos por la Federación y por el Gobierno del Estado para solventar sus egresos; pero, que: “En el ejercicio de los recursos, el municipio registró inobservancias a la normativa, principalmente en materia de registro e información financiera de las operaciones y servicios personales, así como de la Ley General de Contabilidad Gubernamental, que generaron un probable daño a la Hacienda Pública por un importe de 622,459.0 miles de pesos, los cuales representan el 91.7% de la muestra auditada, que corresponden principalmente a la falta de documentación original que compruebe el ejercicio y destino de los recursos de Participaciones 2016 correspondientes al periodo del 5 de enero al 30 de septiembre de 2016 y pagos superiores a los establecidos en el tabulador; las observaciones determinadas derivaron en la promoción de las acciones correspondientes. En conclusión, el municipio de Reynosa, Tamaulipas, no realizó una gestión eficiente y transparente de los recursos de Participaciones, apegada a la normativa que regula su ejercicio”. Según la evaluación Control Interno 1612-DS-GF.

En respuesta a ello, el contralor municipal, Alexandro de la Garza Vielma, respondió a las observaciones mediante el oficio CM/186/2017, de fecha 08 de septiembre de 2017, en el que se dice: “En atención a la auditoria número 1611-DE-GF de Participaciones Federales a Municipios; remito a usted, documentación original que contiene en su interior información relativa para solventar las observaciones realizadas en la auditoria en comento. Lo anterior con fundamento en los establecido en el Artículo 72 quater del Código Municipal del Estado de Tamaulipas. Sin otro particular aprovecho la ocasión para enviarle un cordial saludo”. Pos sí; pero, no.

La Auditoria Superior de la Federación responde con una nueva observación que ya tienen un tono distinto: “En atención a los hallazgos determinados la entidad fiscalizada remitió el oficio número CM/186/2017 de fecha 8 de septiembre de 2017, mediante el cual se presenta información con el propósito de atender lo observado; no obstante, derivado del análisis efectuado por la Unidad Auditora a la información y documentación proporcionada por el ente fiscalizado, se advierte que ésta no reúne las características necesarias de suficiencia, competencia y pertinencia que aclaren o justifiquen lo observado, por lo cual los resultados 4, 5 y 8 se consideran como no atendidos”.

De todo lo expuesto, que corresponde a documentos oficiales en poder de este diario, se echan de ver varias circunstancias que no pueden solucionarse con argumentos tan absurdos como los publicados en algunos medios de la región en que nuevamente se pide la cabeza del mensajero en vez de remediar lo que ha provocado malas noticias.

Las observaciones que hace la ASF no son noticias viejas ni recicladas, puesto que el organismo no se ha mostrado satisfecho con la respuesta que recuerda en mucho la de aquel alcalde pintoresco que al rendir sus cuentas dijo, simplemente: “Conciudadanos, todo lo que entró, salió”. La Auditoria dice que: “la información y documentación proporcionada por el ente fiscalizado, se advierte que ésta no reúne las características necesarias de suficiencia, competencia y pertinencia”, y para mayor abundancia, agrega que: “por lo cual los resultados 4, 5 y 8 se consideran como no atendidos”.

La Dra. Maky Ortiz de Peña es una persona de grandes cualidades; su gestión ha sido exitosa y la comunidad lo reconoce, quizá por ello le otorgó nuevamente su confianza. Sí; pero, en asuntos de gobierno eso no basta. Sus cuentas, como sus acciones, deben ser como el agua clara, dejando lo espeso al chocolate.

Ojalá no se deje llevar por quienes habiendo incumplido con sus tareas, quieren justificar su indolencia y falta de comprimo condenando los señalamiento de los medios, algunos de los cuales, como EL MAÑANA de Reynosa, van por los tres cuartos de siglo, manteniendo siempre el compromiso de servir a los habitantes de la comarca.

Servir es un deber de todos los que salen del ámbito privado para acceder a lo público y ¿qué mejor que conjugar esfuerzos para servir mejor a la comunidad fronteriza que tanto requiere?