Editoriales > ANÁLISIS

Bozal a la usura

Por fin, fue presentado en el Senado un proyecto de reforma para reducir y prohibir a los bancos el cobro de comisiones por algunos servicios que prestan a los usuarios, cada vez más cautivos del proceso de bancarización promovido a rajatabla por los gobiernos neoliberales. Los dueños del gran capital hicieron sus rabietas y la Bolsa Mexicana de Valores se desplomó, en tanto que la paridad peso-dólares fue negativa.

Pero, bien saben los usureros que ya no pueden seguir exprimiendo las castigadas ubres de las vacas flacas que ha dejado el capitalismo salvaje. Ya no pueden los bancos en poder de los organismos financieros internacionales, cubrir las pérdidas de sus matrices con los fondos que extraen de sus sucursales en México. Si van a seguir operando en el país, tendrán que ajustarse a las normas de equidad y justicia por ley.

Bozal a la usura

De acuerdo al análisis de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros, el 30 por ciento de los ingresos de la banca en México provienen del cobro de comisiones, que son más altas que las que se pagan en las matrices. Señaló como ejemplo que: en España, el ingreso de comisiones contra los ingresos totales representan el 20 por ciento para Santander, mientras que en México es del 39 por ciento. Lo mismo ocurre con BBVA Bancomer: de sus ganancias totales en la matriz, el 19 por ciento es a través de ese rubro, y en el país es de 36 por ciento.

Explicó Mario Di Costanzo, presidente del organismo que: “Tan sólo el año pasado, la banca comercial en México ganó 108 mil millones de pesos por cobro de comisiones, 8 por ciento más respecto a 2016. De estos ingresos, el 50 por ciento representan las comisiones de créditos otorgados, principalmente a través de tarjetas de crédito. Los ingresos por comisiones de créditos otorgados fueron de 73 mil millones de pesos, de los cuales el 83 por ciento se originaron de la comercialización y operación de la tarjeta de crédito. El cobro de la anualidad implica 25 % de los ingresos por crédito”.

Por su parte, Luis Fabre, vicepresidente de la Condusef, consideró que hay espacio para que las comisiones se reduzcan, ya que han tenido avances tecnológicos como envío de estados de cuenta por correo electrónico, lo que se traduce en el abatimiento de los costos de operación que tienen los bancos, que ya no gastan en insumos como el papel, la tinta, el uso de sistemas de impresión y de envió de correspondencia postal.

Si esa argumentación no fuere suficiente para poner freno a la usura de los bancos en México, habría que señalar que, según la Comisión Bancaria y de Valores, la ganancia del sistema bancario en el 2017, superó en 28.8 por ciento las de 2016. Los bancos en México ganaron en un año $135 mil 735 millones; en tanto, BBVA Bancomer, Banorte, Santander, Banamex e Inbursa concentran tres cuartas partes de ese mundo contante.

Necesario es señalar que este colosal generación de ganancias no tiene precedente alguno. Las utilidades se derivaron de la colocación de crédito: La cartera comercial, destinada a empresas y gobiernos tuvo un crecimiento de 9.9 por ciento respecto al cierre de 2016 y representó 63.8 por ciento de la cartera total, con un saldo de 3 billones 28 mil millones de pesos.

Mientras que el crédito al consumo se expandió a una tasa anual de 8.5 por ciento y alcanzó un saldo de 972 mil millones de pesos, 20.5 por ciento de la cartera total. El crédito otorgado mediante tarjetas de crédito tuvo una participación de 39.7 por ciento dentro de la cartera de consumo; los de nómina representaron 23.2 por ciento del total y los personales 12.5 por ciento.

Al cierre de diciembre de 2017, el sector de banca múltiple estuvo integrado por 48 instituciones, a las que hay que poner un bozal contra la usura. Si hacen su berrinche, ya se contentarán, que en ningún otro lugar del ancho mundo van a encontrar quien cambien pepitas de oro por espejitos, ni quien se sienta feliz con el poder de la firma aunque eso signifique vivir acosado por los acreedores que, ahora sí, pueden dejar hasta sin camisa a los banqueros.

La Bolsa se recuperará y el dólar volverá al pésimo nivel en que lo dejó el mejor secretario de Hacienda del mundo y aprendiz de canciller, al que no se podrá tocar ni un pelo de los pocos que le quedan.

Bien sabido se tiene que el mejor negocio del mundo es la generación de deuda y los banqueros no se darán un tiro en el pie dejando de operar en México, donde han gozado de jauja gracias a los gobiernos sumisos al gran capital.