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Salpica a tamaulipecos escándalo de gasolineras

Los que no dejan pasar ni una rolita al ‘outfield’ son los integrantes del pasado Cabildo quienes con insólita puntualidad (lo que nunca hicieron cuando les citaban a sesiones), tuvieron todavía el descaro de llegar a la presidencia municipal para cobrar religiosamente lo que quedó pendiente.

Durante los días pasados estuvieron desfilando muy contentitos para cobrar su aguinaldo y otros beneficios que les dieron por haber estado solamente calentando la silla y de ‘‘levantadedos’’ dizque representado dignamente al pueblo de Reynosa.

Salpica a tamaulipecos escándalo de gasolineras

Pero como dirían algunos, algo es algo y más en estos tiempos aciagos de austeridad republicana.

Y ya adentrados en los laberintos palaciegos, nos confirman que la alianza que hicieron MORENA, PES y PT, ya se disolvió en el Cabildo local, pues el grupo se partió y algunos regidores como Juan Ovidio García y Maira Rosalinda Delgado, se mantienen firmes con el grupo encabezado por José Ramón Gómez Leal.

Marco Antonio Gallegos y María del Rosario Rodríguez andan más entretenidos y disfrutando el momento que les brinda su posición como representantes populares.

La que de plano ya agarró vuelo es la regidora por Movimiento Ciudadano, Nilza Hurtado Rodríguez, quien ya ni a su tío Silvestre Rodríguez siguen, y anda más enfocada con Carlos Peña Ortiz, en los asuntos del voluntariado del DIF.

A quienes no les vino nada en gracia las declaraciones del diputado federal Gerardo Fernández Noroña fue a los líderes del Partido del Trabajo y es que entre otras muchas cosas que dijo, anunció su apoyo a quienes sean nominados candidatos de MORENA por las diputaciones locales.

Obvio que el anunció cayó como balde de agua helada a los dirigentes locales, quienes le recordaron al legislador bajo qué siglas llegó al Congreso de la Unión.

El Partido del Trabajo no se ha quedado dormido y anda buscando perfiles que les garanticen una buena votación, a tal grado que ya existen algunos industriales muy animados, pero deberán esperar a que el partido a nivel estado, tome sus decisiones.

ENTRE GASOLINEROS TE VEAS...

Y vaya que causó revuelo la investigación publicada por la revista Proceso donde destapó el festín político con las gasolineras en la era del presidente Enrique Peña Nieto con el otorgamiento de permisos de la Comisión Reguladora de Energía para operar estaciones de servicio.

Y cobró relevancia porque varios tamaulipecos resultaron salpicados, pues la publicación señala a Javier Cantú Barragán, primo de un destacado empresario tamaulipeco, quien es contratista de Pemex para el traslado de hidrocarburos e integrante de un clan familiar influyente en Tamaulipas. Su hermano Serapio fue alcalde de Reynosa entre 2002 y 2004, el mismo municipio donde Javier tiene una gasolinera.

Y hay más de Tamaulipas, según Proceso: el exdiputado Enrique Cárdenas del Avellano, priísta, obtuvo los permisos para operar cuatro gasolineras en la entidad mediante tres empresas: Gasolinera Jebla, La Marina Vieja y Gasolinera ECG.

TODOS UNIDOS CONTRA INGRAM

Y en el Valle de Texas, que se destapa la gallera en McAllen, y es que ante la apertura para el registro de aspirantes para renovar el consejo de la ciudad, que dicho sea de paso será en mayo, surgen más candidatos que todo pareciera indicar que buscan echarle montón al comisionado John Ingram.

Ingram busca la reelección, mientras que Mark R. Murray, profesor de STC, el banquero Víctor “Seby” Haddad, quieren la posición y lucharán por ella con uñas y dientes. El registro se cierra el 15 de febrero.

Y en otro tema, el Procurador de Texas, Ken Paxton, se la ha pasado gran parte de su gestión haciendo coaliciones multiestatales para "tirar" programas y disposiciones emprendidas por el expresidente Barack Obama, como el programa de salud, los programas en favor de los inmigrantes y sus padres, etc., en lo que parece una consigna por acabar con su legado a toda costa, aplaudiendo y apoyando, además, cada acto del actual presidente Donald Trump, en contra del legado de Obama, lo que parece más un embate racista que la búsqueda del bien común.