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Indefensión

Una amarga navidad estamos teniendo los reynosenses. La violencia no dejó de golpearnos. Incluso, en este periodo de amor y paz. Lo anterior me recuerda los insulsos e inútiles consejos del presidente ANDRES MANUEL LÓPEZ OBRADOR hacia los delincuentes, que cualquiera con un dedo de frente se daría cuenta que a éstos sujetos los buenos consejos les entran por una oreja y les salen por la otra.

Creer que el pueblo es bueno es una ingenuidad inadmisible en un gobernante porque si bien la inmensa mayoría se dedica a trabajar y esforzadamente hay una minoría que ya tiene 13 años de que optó por el camino de la violencia. 

Indefensión

Y sí, son minorías, pero muy violentas que ya desafían a las fuerzas armadas, es más, no le tienen ni temor a Dios. Seguramente se identifican con el demonio, y con grupos así las respuestas del gobierno deben ser secas y contundentes, no con fuchi, guácala, pero tampoco con balandronadas sino con reacciones secas y contundentes que le hagan sentir al delincuente que hay gobierno.

Lamentablemente están fallando los tres niveles en salir a defender al ciudadano que en nuestra querida Reynosa transcurre su vida en medio del temor y la incertidumbre, pues ya no sabe uno de quien se va a cuidar más, si de algún agente de Tránsito, o de algún policía, o del delincuente que está a la caza en cualquier punto de la ciudad, lo mismo de día que de noche.

Lo hemos dicho reiteradamente en esta columna, no con el afán de molestar a la autoridad sino de hacerle sentir que alguien le está mintiendo en cuanto a las medidas de seguridad.

Comprendemos que el gobernante no va a andar a la punta del grito en las tareas de vigilancia ni de investigación del delito. Para eso tienen subalternos supuestamente no solo de confianza sino aptos para el cargo conferido, pero estamos viendo que les están fallando o de plano a los mismos gobernantes no les preocupa la suerte de los ciudadanos.

Es muy bueno que el presidente López Obrador procure allegarles beneficios a los pobres, pero debe traer también en su mente a la clase media por la sencilla razón de que ésta es la más vulnerable ante los embates delincuenciales. Los tiene prácticamente en sus manos. Las clases altas, esos ya están radicando de aquel lado del río Bravo desde hace tiempo. Tienen manera para costear el nivel de vida de por allá.

Los pobres por su parte no son propiamente el blanco de los malandrines por la circunstancia de que estos, de esos medios provienen, pero la clase media ni tiene amigos delincuentes ni conocidos en las policías ni en las agencias del Ministerio Público y menos contacto con el gobernador, con el alcalde o con el presidente de la república. Esta indefensa la clase media es a la que le están pegando diariamente.

Para colmo los organismos privados, que deberían hacer la punta en las protestas en contra de las anomalías que provocan la falta de atención de parte de las autoridades, permanecen estáticas por su indiferencia, solo cuando le pisan al callo al presidente o a uno de los allegados del organismo privado es cuando elevan su queja, y a veces ni eso porque últimamente los han venido coptando por medio del contratismo o de la prestación de servicios.

Debiera haber ciudadanos valerosos que le entraran a hacerle la punta al malestar social que ya se masca por toda la ciudad, pero los que hay, como que le piensan. Saben que habrá reacciones por parte de la autoridad. Si ese líder ciudadano tiene algún negocio, será blanco de auditorías o de visitas de los de Protección Civil, que es lo que nos faltaba en Reynosa, “inspectores” que andan preocupados por la seguridad de los negocios. Pregúntele usted a cualquier comerciante y le dirá que cuando estos señores se aparecen es para pasarlos a la báscula, y no se diga los sanitarios. Entonces, ante este caos, el ciudadano común no tiene para donde correr. Irse para el otro lado está imposible y buscar a una autoridad para que lo defienda, visto está que es perder el tiempo. De veras, pónganse las pilas, la gente está muy pero muy ofendida. El colmo fue el lamentable homicidio de un profesionista de familias muy respetadas en la ciudad y fue en la fila vehicular al puente a Hidalgo, Texas.

El doctor ÓSCAR RESÉNDEZ ALANÍS, un dentista muy responsable y por lo mismo estimado fue ultimado a balazos cuando se resistió en esa fila al puente a Hidalgo, a un asalto. Y lo peor es que policías estatales hasta una hora después se dieron cuenta del hecho.

Hoy esa familia está entristecida pero también todos los reynosenses. Y aquí viene la pregunta reclamo que sacudió antenoche y ayer todo el día las redes sociales: ¿Qué pitos hacen las patrullas de la policía estatal y las de tránsito, y dónde están los Guardias Nacionales, que se supone esas tres corporaciones son para prevenir el delito y por lo mismo deben de estar presentes permanentemente en los puntos de aglomeración como son las filas a los puentes internacionales en donde como ya se vio, el conductor está plenamente vulnerable.

Me dicen que no es la primera vez, que en otras ocasiones ya ha habido asaltos, pero les vale madre y ante tanta impunidad el delincuente ataca sabedor que a los cuantos días el asalto, incluso el homicidio solamente pasará a formar parte de la estadística.

Ha, pero el Cabildo de lujo que tiene Reynosa anunció con bombos y platillos un operativo antialcohol, que no es otro que los tránsitos anden merodeando por cantinas, palapas y casinos para cazar a automovilistas en estado de ebriedad que en muchas ocasiones no traen exceso de alcohol en la sangre, pero se trata de extorsionarlos, no de prevenir accidentes.

El homicidio del doctor ÓSCAR RESÉNDEZ ALANÍS no debe quedar en la impunidad.

Y a ver si tiene cara el diputado local panista ALBERTO LARA BAZALDÚA quien mediante un video difundido en redes sociales nos dice que los reynosenses no debemos tener miedo, que debemos andar por las calles con amor, y no les digo el resto de la sarta de estupideces que este diputado local tuvo de ocurrencia como mensaje navideño pronunciado en modo padrecito de rancho. Estamos bien mal en Reynosa.

Por mi parte reciba mi más sentida condolencia el doctor ÓSCAR RESÉNDEZ VELASCO pidiéndole a Dios le proporcione fortaleza para afrontar este durísimo trance. 

Lo mismo hago extensiva mi condolencia para mi buen amigo, el licenciado RAMIRO RESÉNDEZ VELASCO.

Que descanse en paz el doctor ÓSCAR RESÉNDEZ ALANÍS y a todos los reynosenses les hago un llamado a unirnos para exigir justicia. Es urgente y necesario.

Qué lástima que el tema de la navidad haya sido un hecho muy violento, pero tampoco podemos cerrar los ojos.

Y por hoy, BASTA.

gilberto.banda@hotmail.com

gilberto.banda@elmanana.com