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Fin al mando único

Nuevamente les gana el arranque de salida a las autoridades locales el que será el próximo delegado del gobierno federal en Tamaulipas a partir del primero de diciembre próximo.

Mis lectores saben que esa persona es JOSÉ RAMÓN GÓMEZ LEAL quien en Ciudad Victoria dio a conocer que parte de la estrategia que se practicará por Tamaulipas altiva y heroica comprende el revivir la policía preventiva municipal y específicamente se refirió a la de nuestra querida Reynosa, una corporación que alguien en su sano juicio nunca dirá que fue pura y transparente o que le hacía frente a los delincuentes de peso pesado como es la delincuencia organizada.

Fin al mando único

Pero es incuestionable que la mayoría de los llamados policíuas municipales eran de gran utilidad para poner orden en los barrios aplacando a los vecinos revoltosos o ruidosos que solían ponerse ebrios con el estero a todo lo que da hasta horas de la madrugada. Lo mismo le tenían la pata en el pescuezo a los rateros que aprovechaban cualquier descuido para ingresar a domicilios o robar en la vía pública.

Esa corporación por aquí en Reynosa desapareció por instrucciones superiores en el periodo de EVERARDO VILLARREAL SALINAS. Luego en el de PEPE ELÍAS LEAL hasta con los de tránsito local cargaron, agentes que como todos sabemos estaban a la caza de automovilistas, unos por provenir de antros y cantinas y otros de los hoteles de paso con el pretexto de que tenía reporte de robo el vehículo en el que se transportaban los tórtolos, aunque no siempre eran tórtolo y tórtola.

El caso es que ambas instituciones por andar ya más en las malas que en las buenas les pidieron desaparecerlas y así la seguridad de la ciudad quedó en manos de soldados, marinos, policía federal y policía estatal que la mayoría de sus integrantes, por no decir que todos, no son de esta localidad lo que ya complica el trabajo.

Los policías municipales si eran de estos rumbos, los conocían en los barrios y eso significaba orden, aunque no todos estaban por la legalidad.

Pero supongo que todo lo anterior lo sabe el “JR” y no se diga ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.

Tan es de su conocimiento que cuando anunció en Ciudad Victoria su estrategia para la pacificación de las ciudades mencionó que dividirán al país en 265 regiones. Demostró que las cosas son diferentes en unas y que por lo mismo el grado de peligrosidad aumenta. Puso por ejemplo a Mérida, una ciudad que según el INEGI esta entre las diez que poseen buen nivel de seguridad.

Para ciudades como Mérida, dijo López Obrador enviaran 300 elementos que más bien será para preservar la seguridad, mientras que para ciudades como Reynosa, porque estamos entre las diez ciudades más inseguras del país (tercer lugar) el envío de personal policiaco será de 600 elementos.

Y si a ese dato le añadimos lo declarado por Gómez Leal en lo referente a que habrá de “resucitarse” a la policía preventiva municipal, en mi personal enfoque creo tenemos motivo para las buenas expectativas en materia de seguridad pública.

Y aquí en lo local esperamos que la autoridad municipal se sume entusiastamente a ese proyecto que si bien por un lado incidirá en sus finanzas pues tener policías cuesta, por el otro bien pude hacer ahorros sustanciales en otros rubros y en algunos francamente inexplicable su sostenimiento como los fanfarroneros que por las redes sociales se dedican a echar porras y a vociferar injurias en contra de todos aquellos que tienen la osadía de criticar lo que hacen mal dentro del ayuntamiento reynosense.

Sé que algunos dirán que la comunicación social hoy en día es necesaria pero una cosa es difundir las acciones positivas y a través de medios establecidos para ese efecto y otra muy distinta recurrir a piratas de la información para desacreditar a quien ve los lados nefastos. Para eso el dinero público no debe ser utilizado bajo ningún concepto.

Por otra parte, las lloviznas siguen prevaleciendo con el consecuente deterioro de los pavimentos, y como bien lo saben mis lectores los charcos impiden ver los baches y las llanteras tienen trabajo a destajo y no se diga los talleres mecánicos especializados en suspensiones, y de esos daños nadie responde.

Reynosa ya debiera contar con instrumentos legales para exigir se reparen esos perjuicios.

Ciudad Victoria ya lo tiene, es inexplicable que Reynosa no, pero esa situación a los síndicos y regidores les pasó de noche, a los de la administración municipal anterior y a las antecesoras, y no se diga a la actual que todavía no se han estrenado, solamente se reunieron para la toma de protesta de ellos mismos y después cero sesiones tan así que ignoran cuál comisión le va a corresponder a cada uno al tiempo que el personal del municipio anda desconcertado.

Hay quienes exclaman por el palacio municipal que no les cubrieron la primera quincena de octubre. No saben si porque serán despedidos o a lo mejor no hay con queso para las enchiladas, lo que no sorprende mucho que digamos, regularmente es lo que sucede en las administraciones municipales: falta de dinero.

Aquí lo inexplicable es que haya incertidumbre laboral por tratarse de una administración que fue reelecta en la cabeza del ayuntamiento y que no sepan quien se va o quien se queda da motivo a muchas suspicacias.

En igual circunstancia andan por la COMAPA, no se ponen de acuerdo. A JESÚS MARÍA MORENO IBARRA desde la semana pasada lo están esperando como el nuevo gerente general. El atorón es porque él pretende que todos los gerentes sean de su confianza para que así el gobierno del Estado lo apoye lo que se dice bien a bien, pero en el palacio municipal si bien están conformes con que “El Chuma” sea el gerente general, no les parece buena idea que se lleve en el caldo la papa, el elote y el tuétano, y de ahí el atorón.

Y ahora que se desarrolla el proceso para renovar el comité ejecutivo local de la Sección 36 del Sindicato Petrolero, viene el recuerdo de don ERNESTO CERDA RAMÍREZ como el mejor líder que han tenido los trabajadores del oro negro de la otrora poderosa Sección 36.

Durante 22 años ejerció un liderazgo que en mucho benefició a los trabajadores. Y no solo a ellos, sino a la comunidad en general a través de un vasto programa de obras sociales que desarrollaba.

Si aún viviera, ayer hubiera cumplido 91 años.

Por ello saludo con respeto, admiración y cariño a su viuda, doña YOLANDA CARREÓN y a sus hijos Juan Manuel, Ernesto, Benilde, Roberto, Polo y Roberto.

Y por hoy, BASTA.

Correos: gilberto.banda@hotmail.com 

gilberto.banda@elmanana.com