buscar noticiasbuscar noticias

Habla de lo difícil que es ser familia política de los Trump: Karlie Kloss

"Ha sido duro. Pero elijo centrarme en los valores liberales que comparto con mi esposo", cuenta la modelo, casada con Joshua Kushner, cuñado de Ivanka Trump

Karlie Kloss ha hablado abiertamente por primera vez sobre lo que siente al ser familia de los Trump. La modelo, de 26 años, que está casada con Joshua Kushner, hermano de Jared Kushner y, por ende, cuñado de Ivanka Trump, confiesa que no ha sido nada fácil. “Ha sido duro”, dice la  top en una entrevista con la edición británica de  Vogue que recoge el diario  Daily Mail. “Pero elijo centrarme en los valores liberales que comparto con mi esposo, que son los mismos con los que me criaron y me han guiado a lo largo de mi vida”, añade.

Habla de lo difícil que es ser familia política de los Trump: Karlie Kloss

Unas declaraciones que llegan solo unas semanas después de haber celebrado su boda con Joshua Kushner, ocho meses después de que la pareja se diera el “sí, quiero”. La modelo y el empresario se casaron en octubre en una íntima ceremonia judía realizada en Nueva York, ante solo 80 invitados, pero no ha sido hasta el pasado mes de junio cuando han decidido celebrarlo por todo lo alto rodeado de sus amigos. En la boda, Kloss y Kushner estuvieron acompañados de Jared Kushner e Ivanka Trump, que se llevaron también a sus tres hijos; sin embargo, no ocurrió lo mismo en la segunda fiesta.

Según recogen el portal estadounidense  People o el mismo diario británico  Daily Mail, la hija de Donald Trump y su marido sí acudieron a la última celebración —con temática  country—, pero en lugar de asistir a los tres días convocados por la pareja, decidieron hacer solo acto de presencia el día previo a comenzar los festejos, para evitar ser el centro de atención entre el resto de invitados. Entre los asistentes no faltaron el actor Orlando Bloom y la cantante Katy Perry o el experto en moda Derek Blasberg.

En la entrevista con la edición británica de  Vogue, donde Kloss protagoniza la portada del próximo agosto, la modelo también habla de su conversión al judaísmo, la religión que profesa su esposo. “Tomé la decisión por él, porque le amo, pero fue una decisión propia. Esta es mi vida y soy una mujer fuerte e independiente. Después de muchos años de estudiar y hablar con mi familia y amigos y de mi búsqueda interior fue cuando tomé la decisión de adoptar plenamente el judaísmo en mi vida y comenzar a planificar un futuro con el hombre con el que elegí casarme”, dice.

“Cambiar parte de quien eres por alguien puede ser de débiles. Pero, si has pasado por lo que yo he experimentado, realmente eres de todo menos débil. Esto me ha hecho más fuerte, cariñosa y resistente. Realmente no me tomé esto a la ligera”, admite sobre quienes la han criticado.

imagen-cuerpo

La  exángel de Victoria’s Secret también tiene palabras para recordar la etapa en la que trabajó con la firma de lencería. En febrero de 2015 Karlie Kloss anunciaba por sorpresa que colgaba sus alas de Victoria’s Secret y, cuatro años después, la estadounidense cuenta por qué abandonó la casa que le había dado su gran oportunidad en la industria de la moda en 2011, con tan solo 18 años. “La razón por la que decidí dejar de trabajar con Victoria’s Secret es que no sentía que la imagen que estaba dando fuese quién era yo realmente y el tipo de mensaje que quiero enviar a las jóvenes de todo el mundo sobre lo que significa ser bella tampoco encajaba”, explica.

imagen-cuerpo

Aunque Kloss renunció a ser  ángel, se volvió a poner sus alas en 2017 para participar en el desfile anual de la firma lencera en Shanghái. Sobre esto, la  topasegura que fue un momento que le sirvió para ver que su voz era necesaria para moldear su carrera a su gusto, e insta a otras mujeres a hacer lo mismo. "Creo que ese fue un momento crucial para mí como feminista, porque fui capaz de tomar mis propias decisiones y crear mi propia historia, o bien a través de las compañías con las que trabajo o bien a través de la imagen que estoy ofreciendo de mí al mundo”.

Un valor que ha sabido apreciar con el paso de los años. "En mi adolescencia y a los 20 años temía perder un trabajo si decía que no quería hacer algo", comenta. “Pero no perdí nada. En todo caso al contrario, cuanto más imponía mi criterio, más me ganaba el respeto de mis compañeros. Y también aprendí a respetarme a mí misma”.




DEJA TU COMENTARIO
PUBLICIDAD

PUBLICIDAD