Alerta CILA de 3 áreas vulnerables. Requiere el río de bordo en tres zonas
Sin importar los peligros a que dejan expuestos a sí mismos y otros habitantes en zonas de riesgo, al paso del tiempo vecinos han destruido las contenciones
Jorge Negrete Arroyo, representante de la CILA en esta frontera, precisó que el primer punto crítico se encuentra en el cruce de las vías del ferrocarril en el canal Anzaldúas, en la colonia Ferrocarril Poniente, en donde el muro de protección de tierra se corta.
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Tres puntos críticos de filtraciones del río Bravo a la zona urbana de Reynosa en caso de que se registre una gran venida de agua, se deben a que los habitantes han rebajado el nivel del bordo de contención. La Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) anunció que si el afluente llega a rebasar el nivel de ocho metros podría afectar severamente.
Jorge Negrete Arroyo, representante de la CILA en esta frontera, precisó que el primer punto crítico se encuentra en el cruce de las vías del ferrocarril en el canal Anzaldúas, en la colonia Ferrocarril Poniente, en donde el muro de protección de tierra se corta.
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En la colonia 10 de mayo también hay otro punto de peligro por donde se puede desbordar el afluente, ya que constantemente los habitantes de ese sector han estado rebajándolo para poder cruzar de las colonias Carmen Serdán y Aquiles Serdán a esta zona inundable.
El tercer punto se ubica en el colonia Ferrocarril Oriente, en donde los mismos vecinos se opusieron a que el bordo de contención pasara por esa área, ya que algunas viviendas serían susceptibles a la inundación.
“Cuando sube el nivel del río en automático ingresa por el remanso del dren El Anhelo, que en el 2010 causó que tuviéramos inundando ese sector, por lo que ahora se estableció una compuerta obturadora que no permitirá el acceso del afluente a la ciudad”, dijo.
Las colonias que están en riesgo de quedar bajo el agua con una gran creciente como en el 2010 son la 10 de Mayo, Ferrocarril Poniente y Oriente, Módulo 2000 Rancho Grande, Centro, Aquiles Serdán y Carmen Serdán, Manuel Tárrega, Del Prado, Del Río, Praderas del Oriente, así como los ejidos Los Cavazos, La Bocatoma, Longoria, Las Calabazas, El Banco y Corrales.
Exhortó a la autoridades de Comapa taponear las tuberías pluviales o poner válvulas tipo check que desembocan en el afluente, ya que cuando suba el nivel del río este pueda ingresar por ahí hacia la ciudad.
Sostuvo que durante el mes pasado se efectuó una reunión con el Centro Nacional de Prevención de Desastres, para darles a conocer el problema que existe en Reynosa, con el fin de que se elaboren programas emergentes de acción ante el riesgo.
Peligro. Existen tres puntos críticos de filtración de agua, el primero en la colonia Ferrocarril Poniente, el segundo en la 10 de Mayo y el tercero en la Manuel Tárrega.
Resisten evacuación pese a advertencias
Más de 120 mil habitantes se encuentran en zonas inundables por el río Bravo, los cuales al ser notificados de una gran venida de agua no quieren salirse de sus hogares hasta que ven el afluente en sus patios.
Marco Antonio Martínez Alvarado manifestó que las personas prefieren arriesgarse, como sucedió en el 2010 tras el paso del Huracán Alex que obligó que las presas abrieran las compuertas para desfogar líquido, con lo que varias colonias, ejidos e incluso la Aduana del Puente internacional Reynosa-Hidalgo permanecieran bajo agua.
“En aquella ocasión avisamos a los habitantes con tiempo que desalojaran sus viviendas porque estaban en peligro de inundación, pero no nos hicieron caso e incluso los hicimos firmar un oficio donde estaban enterados de la situación y que no querían salirse”, sostuvo.
Destacó que están en comunicación con la CILA ante la posibilidad de que el nivel del río creciera por arriba de los ocho metros como sucedió hace siete años, para notificarles a las personas de que tienen que trasladarse a zonas altas.
En primeras acciones preventivas se harían las evacuaciones de los habitantes en los márgenes del río y del área inundable, así como de informarles de la creciente para evitar alguna perdida humana.
En riesgo. Actualmente viven en zonas inundables por el río Bravo más de 120 mil personas que no quieren salirse de sus casas hasta que ven que el afluente creció.