Todo les sale mal a sujetos

CLEVELAND.- Tres hombres que profesaban creencias supremacistas blancas y neonazis conspiraron para sembrar disturbios civiles atacando centrales eléctricas en todo Estados Unidos mientras expresaban su voluntad de morir por su causa.

Christopher Cook, 20, de Columbus, Ohio; Jonathan Frost, 24, de Katy, Texas y West Lafayette, Indiana; y Jackson Sawall, de 22 años, de Oshkosh, Wisconsin, son los acusados y no están bajo custodia.

Se enfrentan a un máximo de 15 años de prisión al momento de la sentencia.

Una declaración de hechos que acompañó a sus acuerdos de declaración de culpabilidad detalló cómo los tres hombres habían comenzado a formular un plan para destruir subestaciones eléctricas con rifles de alta potencia e intentaron reclutar personas para unirse al complot.

Los hombres querían crear caos dejando a la gente sin electricidad durante meses con la esperanza de que causara la próxima Gran Depresión y creara “una gran oportunidad para que surjan líderes (blancos) potenciales”, según la declaración de hechos.

El abogado de Frost, Sam Shamansky, dijo que Frost “aceptó la responsabilidad por su conducta y es consciente del daño potencial” y “ha repudiado por completo sus puntos de vista racistas y supremacistas blancos”.

Según la declaración, Frost y Cook inicialmente se conocieron en línea en una sala de chat llamada “The Front”, donde Frost planteó la idea de atacar la red eléctrica. Sawall, un amigo de Cook, se unió más tarde a su grupo y ayudó a reclutar a jóvenes que tenían menos probabilidades de ser agentes del orden.

Aquellos que pasaron la prueba fueron invitados a unirse a otro grupo de chat en línea llamado “Lights Out”.

Frost viajó a Columbus en febrero de 2020, donde le dio a Cook un rifle AK-47 sin número de serie y le proporcionó a Cook y Sawall “collares suicidas” hechos con el poderoso analgésico sintético fentanilo.

Sus planes de colgar carteles de propaganda, grabarse pintando una mezquita y cortar un poste de teléfono en Columbus fracasaron durante una parada de tráfico que llevó a Sawall a usar su collar suicida. Sobrevivió y luego terminó su asociación con Cook y Frost, según la declaración de los hechos.

REGRESO A TEXAS

La trama se desmoronó aún más el mes siguiente cuando Cook acompañó a Frost en un viaje de regreso a Texas para las vacaciones de primavera.

Una reunión planificada con un recluta en Oklahoma no se llevó a cabo después de que el recluta perdiera su teléfono.

Alguien que encontró el teléfono y vio que contenía propaganda nazi respondió a las llamadas de Cook y Frost y les dijo que el teléfono sería entregado a la policía.

Luego, la pareja fue detenida en Texas, donde se encontraron residuos de fentanilo del collar suicida de Frost en el vehículo junto con dispositivos electrónicos y teléfonos celulares destinados a ser usados y desechados.

Los agentes del FBI registraron las casas de los hombres en agosto de 2020. Los agentes encontraron un rifle sin armar en una despensa en la casa de Cook y material extremista en sus dispositivos electrónicos.

Los agentes incautaron una computadora portátil que contenía documentos que describen The Front y una descripción del proceso de reclutamiento del grupo en la residencia de Sawall.

Los agentes encontraron múltiples armas de fuego en la casa de Frost en Texas, incluida lo que la declaración de hechos describía como una pistola AR-15 sin número de serie, así como material para construir un artefacto explosivo, videos, libros e imágenes relacionados con los nazis e información sobre centrales eléctricas estadounidenses.