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Los Veneros del Diablo
Lozoya, quien hasta ahora, anda libre: pero… pero ¿lo alcanzará la 4T?
1°-PEMEX Y SUS DIRECTORES.- Los graves problemas por los que atraviesa Emilio Lozoya Austin, exdirector de Petróleo Mexicanos, durante el gobierno presidido por Enrique Peña Nieto, sobre quien existe una orden de aprehensión por su presunta responsabilidad en el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita, pareciera aquella historia protagonizada por Jorge Díaz Serrano, quien fuera director de PEMEX con José López Portillo a partir de 1976.
Según los panegiristas de Serrano, habiendo manejado muy hábilmente la producción petrolera y que aparentemente nuestro país había emergido a ser la cuarta potencia mundial en este hidrocarburo, permitiendo el inicio de grandes obras públicas y el supuesto desarrollo económico del país, basado en los créditos internacionales contratados con garantía del precio del barril del petróleo mexicano;
Este hecho convirtió a Díaz Serrano en uno de los más serios aspirantes a la candidatura del PRI a la presidencia de México para suceder a López Portillo.
Sin embargo, a mediados de 1981, ante la reducción de los precios del petróleo realizada por los países miembros del OPEP, Díaz Serrano resolvió que México también reduciría el precio de su petróleo en 4.00 dólares, pero hizo este ajuste sin consultar al gabinete económico mexicano, en particular a quien era teóricamente su superior, el secretario de Patrimonio y Fomento Industrial, José Andrés de Oteyza, quién rechazó la medida y obligó a restablecer el anterior precio, lo que significó la pérdida inmediata de los clientes internacionales de Pemex.
Ante esta situación, Díaz Serrano renunció a la dirección de Pemex, y con ello terminaron sus aspiraciones presidenciales y la candidatura del PRI le correspondió a Miguel de la Madrid.
Ese mismo año, López Portillo designó a Díaz Serrano embajador de México ante la Unión Soviética, cargo en el que permaneció hasta 1982 y al cual renuncia para postularse como Senador de la República.
Díaz Serrano se desempeñaba en el cargo, cuando el Secretario de la Contraloría General de la Federación, Francisco Rojas Gutiérrez, lo acusó ante la Procuraduría General de la República de fraude por 35 millones de dólares durante su gestión al frente de PEMEX al haber comprado dos buques tanque con un sobreprecio…
Fue necesario un juicio de procedencia ante la Cámara de Diputados para desaforarlo e inmediatamente fue arrestado, permaneciendo los siguientes cinco años en prisión.
Su desafuero se realizó en el contexto de las promesas de campaña de Miguel de la Madrid, que tuvo como lema electoral “Por la renovación moral”, que buscaría castigar la corrupción y dispendio del régimen de López Portillo.
Sin embargo, según las opiniones de muchos sectores, Díaz Serrano fue convertido en objeto de venganza por haber competido con De la Madrid por la candidatura presidencial del PRI.
Jorge Díaz Serrano salió sin habérsele comprobado oficialmente los delitos de los que se le acusaba, se retiró de la actividad política y murió el 25 de abril de 2011 en la Ciudad de México
Ni hablar, ahora la historia se repite es Emilio Lozoya quien se encuentra en el sillón de los acusados.
Lozoya, quien hasta ahora, anda libre: pero… pero ¿lo alcanzara la 4T?
Lo mejor para este día, pero siempre acompañado de su apreciable familia.
