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Gobernabilidad a partir del liderazgo

Indudablemente que Nicolás Maquiavelo es el padre de la Ciencia Política moderna por cuanto logra destrabar de las consideraciones subjetivas al ejercicio del poder

Indudablemente que Nicolás Maquiavelo es el padre de la Ciencia Política moderna por cuanto logra destrabar de las consideraciones subjetivas al ejercicio del poder y, en su magnifica obra clásica, El Príncipe, establece los principios fundamentales para el buen gobierno, que, finalmente, no es otra cosa que el logro de resultados positivos para la sana convivencia comunitaria, independientemente de las ideas de cada persona.

Según sus postulados, los principados nuevos deben ser mantenidos a partir de la virtud, que, curiosamente, en su argumentación no debe ser entendida ya como la disciplina cristiana sino como una gran capacidad de mando. El líder de una comunidad debe atenerse a los cambios e interpretar las diferentes circunstancias que se le presenten, para actuar en consecuencia y siempre en vistas al objetivo principal de mantener su gobierno, poniendo en juego toda su capacidad y los recursos puestos a su disposición.

Gobernabilidad a partir del liderazgo

Es posible que Tamaulipas esté viviendo, en este momento, una circunstancia como la que Maquiavelo toma como modelo de buen gobierno, porque se está viendo que hay evidente liderazgo en la conducción de los asuntos públicos y que se está trabajando en todos los frentes para lograr la recuperación de la entidad, luego de tantos años de abandono y saqueo. Se echa de ver que hay intención y voluntad, además de energía.

Otros de los aspectos que destaca el maestro florentino es la suerte como elemento circunstancial que tiene mucho que ver con el logro de los objetivos y, como el actual gobernador del estado, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, es de Reynosa, todo parece indicar que ha llegado el momento de situar a este municipio en el lugar que le corresponde y que, por angas o mangas, le ha sido negado de forma sistemática, según confirman los registros históricos. Reynosa era, sin duda, el patito feo de Tamaulipas.

Pero, todo parece indicar que, ahora sí, llegó su hora. El propio mandatario, durante sus últimas visitas, en que ha puesto en marcha ambiciosos programas de redención, lo ha manifestado públicamente, como lo expresó el martes: “Yo les aseguro una cosa, que a partir de estas obras y al término de la administración de mi gobierno: les aseguro que va a quedar marcado para la historia de Reynosa un antes y un después. ¡Vamos a modernizar esta ciudad!”. Y, como el movimiento se demuestra andando, de inmediato puso la primera piedra del Centro de Convenciones y reparación de calles.

Ni que decir que los habitantes de esta sufrida ciudad, que ya no ven lo duro, sino lo tupido, están satisfechos, están contentos de que el gobernador esté trabajando por su terruño, obviamente sin olvidar el resto de la entidad, donde también hace falta mucho por hacer, toda vez que el rezago tiene muchas décadas y el saqueo se llevó a cabo de forma exagerada y despiadada. Se necesita su liderazgo en todo el territorio.

Hay un viejo y conocido refrán que dice que soñar no cuesta mucho, por lo que, una vez que ha parado mientes en el asunto de la movilidad urbana y, según manifestó en conferencia de prensa, está consciente de las necesidades en las áreas urbanas, las suburbanas y las rurales, bueno sería que pensara en las soluciones prácticas y casi mágicas que se han dado a este problema en los países altamente avanzados, con el uso de trenes para la creación de ejes del transporte regional de carga y de pasaje.

Siguiendo el pensamiento de Maquiavelo: “Si para lograr dicho objetivo; sin embargo, no bastan las meras cualidades de liderazgo por sí mismas, cuenta, cuando las circunstancias lo ameriten, con la eventual posibilidad de emplear la fuerza”. Así lo dijo, cuando, acompañado del vicealmirante López Castro, secretario de Seguridad Pública: “Para que entiendan, aquellos que todavía no han querido entender, a esos violentos: no va haber tregua por parte de mi gobierno, a esos los queremos fuera de Reynosa”. Aseguró, además que se está trabajando para pacificar el Estado y pidió que los ciudadanos tengan la confianza de informar lo que sucede para actuar con eficacia y prontitud.

Ya se empieza a notar la gobernabilidad a partir del liderazgo del gobernador García Cabeza de Vaca.