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El gran salto hacia el futuro

Uno de los acontecimientos más relevantes del año nuevo ha sido la entrada en vigor del Instituto de Salud para el Bienestar de los mexicanos y alguno que otro avecindado, a partir del primer día del año, como estaba previsto en la ley. Con ello se cumple cabalmente el espíritu del constituyente mexicano y los lineamientos que sobre la salud del ser humano ha marcado la Organización Mundial de la Salud.

Según lo expuesto por el diputado Mario Martín Delgado Carillo, durante la discusión del tema y la propuesta de creación del instituto: "La salud, según la Organización Mundial de la Salud, es el estado de completo bienestar físico, psíquico y social y no solo la ausencia de enfermedad. Esta visión integral, implica la consideración de los determinantes sociales de la salud y el trabajo intersectorial para lograr ese estado ideal de salud de las personas, las familias y las comunidades, sustento del desarrollo y del bienestar de una nación. La salud es un factor sumamente importante dentro de la sociedad, ya que además de ser un bien biológico, el hecho de que las personas mantengan un desarrollo físico y mental, constituye un bien social, ya que es por medio de la salud, que las sociedades mantienen una adecuada convivencia”. Pero, además, la salud es un factor de la economía.

El gran salto hacia el futuro

Por ello, resulta altamente positivo que a partir del primero del presente, todos los que en este país viven y trabajan, recibirán servicios médicos sin restricciones porque habrá atención universal para todos los padecimientos (incluidos aquellos que generan gastos catastróficos), para lo cual se ha creado el Fondo de Salud para el Bienestar; también recibirán medicamentos gratuitos y demás insumos requeridos para sus tratamientos. Se llevará un registro de los beneficiarios, para el control de atención y el otorgamiento de medicamentos. México ingresa al grupo de países altamente osados en la materia.

Osados porque se han atrevido a romper los cercos que han puesto al pleno ejercicio del derecho a la salud los poderosos intereses de las industrias relacionadas con la salud, con la investigación médica y con la producción y comercialización de fármacos para atender los distintos problemas de salud. Osados porque van en contra de quienes buscaban privatizar los servicios médicos para convertir ese derecho en un privilegio de las clases pudientes. Se han atrevido a romper los fuertes círculos viciosos.

La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece, en su párrafo cuarto del artículo 4o. que: “Toda persona tiene derecho a la protección de la salud. La Ley definirá las bases y modalidades para el acceso a los servicios de salud y establecerá la concurrencia de la Federación y las entidades federativas en materia de salubridad general, conforme a lo que dispone la fracción XVI del artículo 73 de esta Constitución”. Antes se hicieron esfuerzos fallidos, ahora la situación ha cambiado.

Ahora, a diferencia de antes, con el INSABI las personas sin seguridad social no necesitarán afiliarse ni pagar cuotas para recibir atención médica y medicamentos gratuitos; solo deberán contar con CURP o presentar acta de nacimiento. Ya se había hablado de la cobertura universal en salud; pero, el resultado resultó muy cuestionable, sobre todo por el afán de politizar y partidizar este servicio que la ley señala como obligación del Estado, por ello, ahora, en todo lugar del país, toda persona deberá ser atendida.

En el portal del INSABI se señala que: “Para garantizar y mejorar la atención en los servicios públicos de salud, el INSABI reclutará a nuevos médicos y enfermeras con sensibilidad social, con alto sentido de la ética profesional y que estén dispuestos a trabajar en las regiones de mayor marginalidad del país, por lo cual recibirán estímulo adicional. La convocatoria está abierta /para todos los profesionales de la salud que deseen incorporarse al programa). También habrá justicia laboral pues se basificará a quienes por años han trabajado en el sector salud de manera eventual”. Todo claro y transparente como el agua.

“En México, más de la mitad de la población carece de acceso a la seguridad social, lo que coloca a las personas afectadas en una situación de vulnerabilidad. Con la finalidad de resolver esa problemática y avanzar hacia el acceso universal a la salud se constituyó el Sistema de Protección Social en Salud, conocido como Seguro Popular, que entró en vigor el 1 de enero de 2004. Dicho modelo de financiamiento se complementó en 2007 con la creación del programa federal denominado Seguro Médico para una Nueva Generación, actualmente Seguro Médico Siglo XXI”. El Seguro Popular se va.

Con la La entrada en vigor del INSABI habrá un nuevo esquema de coordinación con las entidades que, entre otras cosas, evitará la duplicidad o dispersión de plazas médicas, permitirá lograr ahorros y combatir la corrupción en la compra de medicamentos, lo cual se hará de manera consolidada con la SHCP, además que dará oportunidad a una mejor planeación y ejecución de recursos para la infraestructura médica.

Como parte de sus funciones, el INSABI impulsará la implementación de Redes Integradas de Servicios de Salud (RISS) en las que participen todas las instituciones públicas de salud, federales o locales, que confluyan en una zona determinada. En el tiempo que falte para la total implementación del INSABI en todo el territorio nacional, la atención médica de pacientes continuará sin interrupciones con el apoyo de las instituciones ya existentes.

Este es uno de los grandes pasos que ha dado el país para estar a la vanguardia de las acciones por hacer llegar a todos todos los derechos que la Declaración Universal de los Derechos Humanos contempla, aunque a algunos no les guste.