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Hoy por Chiapas,Oaxaca y Tabasco

La tragedia provocada en el sur del país por uno de los sismos más potentes de las últimas décadas llevó al presidente Enrique Peña Nieto a decretar tres días de luto nacional para honrar a las víctimas en Oaxaca, Chiapas y Tabasco, estados en los que se registraron los daños más grandes y el mayor número de muertes.  

La Cámara de Senadores anunció la apertura de una cuenta bancaria para recibir donaciones en apoyo a los damnificados de esa región.

Hoy por Chiapas,Oaxaca y Tabasco

Inmediatamente después de conocerse la magnitud de la desgracia, las muestras de preocupación y solidaridad con los afectados no se hicieron esperar. Los llamados a la cooperación para reunir víveres, medicamentos, agua e insumos indispensables se generalizaron por todo el país.

El sur mexicano está en la mente de todos. La destrucción y la muerte que asolaron la región, concitan sentimientos de tristeza y compasión por quienes perdieron bienes y familia.

Mucha gente tenía muy poco y lo perdió todo. Desde el día del terremoto, miles de habitantes de los tres estados mayormente afectados viven en la desesperación porque dependen de la buena voluntad de la gente y de lo que les hace llegar el gobierno para satisfacer sus necesidades básicas.

Su infortunio los puso en el centro del interés nacional. Esta zona prácticamente olvidada y generalmente ajena al resto del país, hoy es motivo de singular y muy justificada atención.

Es difícil no condolerse de toda esa gente.

En el sureste, la mayor parte de la población, principalmente de los pueblos indígenas,  toda su vida ha vivido en la miseria. Sometida por brutales cacicazgos. Si antes eran pobres, ahora miles quedaron prácticamente en la indigencia.

Toda apoyo que les llegue será insuficiente. Ayudemos.