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Cabilderos en acción

En la aprobación de la llamada miscelánea fiscal en la Cámara de Diputados destaca el papel que realizaron los cabilderos para que no se incrementara el Impuesto Especial de Producción y Servicios (IEPS) a los refrescos, las bebidas alcohólicas, las cervezas, cigarros y la comida chatarra, sin embargo esta situación podría cambiar en el Senado de la República luego de que hace falta dinero para cumplir con todos y cada uno de los compromisos de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador en el 2020.

Resulta común que los cabilderos de empresas refresqueras, tabacaleras, vitivinícolas y frituras intercedan ante los diputados federales para que no suban los impuestos que pagan, sin embargo en esta ocasión hay dos casos que podrían ser catalogados como “inmorales”, como dice el tabasqueño cuando están involucrados destacados políticos.

Cabilderos en acción

El primer caso se vincula a Shirley Almaguer Camacho, quien tiene una amplia y reconocida trayectoria como cabildera de la industria tabacalera, pero también es hija de la dirigente nacional de Morena, Yeidckol Polevnsky Gurwitz, mientras que el segundo caso se refiere a Rosemary Safie Samour, otra destaca cabildera de la industria tabacalera y esposa del actual alcalde morenista en Azcapotzalco en la Ciudad de México, Vidal Llerenas Morales.

Usted se preguntará: ¿Cómo que la cabildera Almaguer Camacho es hija de la señora Polevnsky Gurwitz? Resulta que la todavía dirigente nacional de Morena primero se llamaba Citlali Ibáñez Camacho, pero luego de problemas familiares la mamá de ella le cambio de nombre a Yeidckol Polevnsky Gurwitz.

Nada le impide a la señora Almaguer Camacho realizar sus actividades de cabildeo en la Cámara de Diputados, ya que su mamá no es funcionaria pública y por lo tanto no viola la Ley Federal de Cabildeo que impide a familiares hasta el cuarto grado realizar esta actividad, sin embargo no se puede dejar de soslayar que la posición política de la dirigente nacional de Morena pudo influir en la decisión final de los legisladores morenistas.

Si bien es cierto que las propuestas de incrementar el IEPS a los refrescos, las bebidas alcohólicas, las cervezas, cigarros y la comida chatarra, se frenaron luego de que el vicecoordinador de la fracción del PT en la Cámara de Diputados, Gerardo Fernández Noroña, les recordó que el compromiso del presidente López Obrador ha sido de no incrementar los impuestos, no hay duda de que las gestiones de los cabilderos resultaron efectivas.

En el segundo caso, la situación cambia porque el esposo de la cabildera Safie Samour si es funcionario público como titular de la alcaldía de Azcapotzalco en la Ciudad de México, por lo que se le puede aplicar una sanción por violar la Ley Federal de Cabildeo.

Ahora que primero debe de existir una denuncia formal por parte de los legisladores de la oposición, cuya demanda seguramente no le quitará el sueño a la señora Polevnsky Gurwitz ni al alcalde Llerenas Morales porque se sienten inmunes por ser distinguidos miembros de Morena.

Vamos a ver sí el cabildeo funciona en la Cámara de Senadores, en donde a partir de hoy se analizará y discutirá la miscelánea fiscal del 2020, puesto que urge obtener mayores recursos fiscales para cumplir con todos y cada uno de los compromisos de la administración de López Obrador.

A propósito, se espera que hoy el Jefe del Poder Ejecutivo en su tradicional conferencia matutina en Palacio Nacional hablé acerca de la discutida liberación de Ovidio Guzmán López, mejor conocido como “El Chapito”, ya que se ha generado una fuerte polémica entre la sociedad mexicana porque mientras algunos sectores han apoyado su decisión de dejar ir al heredero del Cártel de Sinaloa, otros han lanzado duros cuestionamientos en contra de él.

Seguramente se referirá a las duras palabras que uso la panista Adriana Dávila Fernández, quien desde la máxima tribuna de la Cámara de Diputados exigió la renuncia del Gabinete de Seguridad, como él lo hizo cuando se fugó el  peligroso narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, durante la administración de Felipe Calderón Hinojosa.

Y más cuando la diputada tlaxcalteca dijo en forma textual: “La cobardía de un presidente que dijo que cambiaría las cosas está más que demostrado. Señor presidente, si no puede, renuncie, renuncie ya”.

Al respecto, el célebre caricaturista Paco Calderón, describe en su colaboración de ayer la característica principal de los últimos presidentes, por ejemplo a Adolfo López Mateos lo identifica como popular, a Gustavo Díaz Ordaz como displicente, a Luis Echeverría Álvarez como demagogo, a José López Portillo como fatuo, a Miguel de la Madrid Hurtado como moralino, a Carlos Salinas de Gortari como taimado, a Ernesto Zedillo Ponce de León como frugal, a Vicente Fox Quesada como boquiflojo, a Felipe Calderón Hinojosa como impulsivo y a Enrique Peña Nieto como cínico.

Por último, el caricaturista Paco Calderón coincide con la diputada panista Dávila Fernández, por lo que identifica a López Obrador como sacatón.

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