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AMLO y Centroamérica

En estos días el presidente de México Andrés Manuel López Obrador realizo la primera gira  de trabajo por Centroamérica para refrendar lazos comerciales, culturales y políticos con los países hermanos, donde aprovechó para pedir más colaboración del gobierno estadounidense en sus planes de respuesta al fenómeno migratorio. 

La migración  de mexicanos y centroamericanos hacia los Estados Unidos no es algo nuevo, es un fenómeno que lamentablemente tiene años de existir; miles de hispanos buscan la oportunidad de tener un mejor nivel de vida para ellos y su familia, y luchan por alcanzar el sueño americano,  para bien o para mal México es ese puente entre ellos y los Estados Unidos.

AMLO y Centroamérica

Estados Unidos exige al gobierno mexicano detener la migración, como si eso fuera tan sencillo, sin embargo le han dado cobijo rápidamente  a miles de ucranianos que han ingresado a su país vía México; por esta razón en lo personal me da gusto que los países latinos se unan y fijen una postura hacia el gigante del norte.

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y del que forma parte también EE UU,  definieron en el Plan Marshall, mismo que cuenta con 22 programas de apoyo para Guatemala y algunos otros países de Centro América, con proyectos específicos y financiamiento de cada uno de ellos.

El plan es la gran partida de México en su apuesta por la cooperación y desarrollo en los países de origen como respuesta a las causas de la migración. Sin embargo,  el plan permanece estancado a la espera de resolver las diferencias sobre los métodos y los montos de inversión. 

De acuerdo a la opinión de los analistas políticos,  Washington mantiene una doble agenda; por un lado exige a México más control policial en sus fronteras, y por otro negocia los términos y montos de la financiación.  

En concreto, el Capitolio lleva casi cuatro años sin resolver la salida de 4.000 millones de dólares para Centroamérica como parte de los planes conjuntos con México. Por lo que en esta gira el presidente mexicano se armó de valor y enfatizó que "es indispensable que EE UU aporte los recursos necesarios" para echar a andar los programas sociales que, en el caso de Guatemala, ya están dispuestos y solo falta el último empujón financiero.

López Obrador dijo: "Me parece inexplicable que Washington se haya retrasado tanto con la aprobación de los 4.000 millones de dólares que ofrecen para invertir en Centroamérica, sólo con la colaboración internacional podemos poner punto y final al doloroso fenómeno de la migración".

El encuentro en Guatemala, Salvador y Honduras sirvió también para insistir en los mensajes  a EE UU,  declarando el presidente de Mexico  que "Es también protagonista del fenómeno migratorio y ha de ser corresponsable en encontrar una solución", también  llegó a sugerir un "cambio en sus políticas migratorios para atender a las causas del problema". 

Por su parte el canciller Marcelo Ebrard  ha encabezado la delegación mexicana que ha estado negociando con Washington los nuevos términos de su política migratoria; desafortunadamente estas negociaciones han tenido sus inconvenientes, el último episodio fue la fuerte crisis diplomática de hace dos semanas, provocada por la amenaza de Donald Trump de imponer aranceles a las exportaciones mexicanas en caso de que no implementara más mano dura en su frontera sur.

Hace algunos años, en una visita al Perú, me preguntaban porque nuestro país nos estrechaba más los lazos con los países de América Latina, en lugar de depender tanto de los vecinos del norte, ellos presumían el efectivo uso de sus tratados para fortalecerse como región y atraer inversión extranjera directa de otros países como China, Canadá y Alemania...  quizás no estén tan equivocados y es momento que México  refuerce sus alianzas para asegurar su lugar como economía emergente.