Música, zombis y más
Julio 08, 2020 -
Las historias que puedes ver en tu hogar junto a tu familia
NADIE SABE QUE ESTOY AQUÍ
Tiene un gran secreto, una voz maravillosa, ya que hace mucho tiempo fue un fenómeno de la música, aunque con un giro bastante interesante.
La cinta Nadie Sabe Que Estoy Aquí, ópera prima de Gaspar Antillo, es un nostálgico viaje por las situaciones que marcan la vida de una persona y como los secretos al salir a la luz pueden ser liberadores.
Jorge Garcia, quien daba vida a Hurley en Lost, es toda una revelación como Memo, y es la principal razón por la que el recorrido del personaje te engancha.
La cinta es también un reflejo del mundo de la fama, de como puede ser tan efímera y de la manera en que usa en nuestros tiempos.
Más de la sección
De ritmo pausado, permitiendo el desarrollo de los personajes, la cinta producida por Pablo Larraín (No, Jackie) se queda contigo mucho tiempo después de que concluye.
Es cine latinoamericano que se tiene poca oportunidad de ver y que vale la pena descubrir.
LOS MUERTOS NO MUEREN
L
as historias de zombis en la actualidad tienen un cierto sabor a “vísceras y cerebros con lo mismo” porque la fórmula ha sido utilizada en todo tipo de géneros. El director y guionista Jim Jarmusch ha decidido ofrecer su versión del tema con resultados tan divertidos como interesantes. Obviamente, a través de la clásica trama sobre muertos resucitados que devoran a los vivos, el realizador hace una inteligente y divertida crítica a la sociedad de consumo y a la falta de atención a los problemas del medio ambiente. El elenco es un verdadero lujo y se puede sentir lo divertido que resultó para ellos incursionar en el género. No se recomienda para espectadores muy sensibles porque tiene imágenes y situaciones bastante perturbadoras.
EL PRIMER AÑO DEL RESTO DE NUESTRAS VIDAS
S
iete amigos enfrentan el proceso de convertirse en adultos, de asumir sus roles sociales, sentimientos, sueños y establecer prioridades, todo a la luz de la estética y el “mood” de los años 80.
En su momento, la cinta no fue bien recibida por la crítica, pero sí por el público que respondió al tono de nostalgia de su narrativa y su concepto visual muy dentro del estilo de su director, el recientemente desaparecido Joel Schumacher, a lo carismático y poderoso de su elenco y hasta a su score musical, creado por David Foster, que se volvió emblemático.
Y esos mismos aspectos son los que ahora le dan relevancia a 35 años de su estreno. Este drama de fórmula escrito por el propio Schumacher en colaboración con Carl Kurlander es un ejemplo de la visión de Hollywood de las nuevas generaciones de adultos y sus intereses.
Podría definirse como “añoranza ochentera” en toda las extensión de la palabra.