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Paran actividades empleados del C5; argumentan malos tratos de superiores

Piden intervención a Gobernador Américo Villarreal, ya que tienen retenido pago de segunda quincena de enero y sufren intimidación y amenazas de parte de director

Alrededor de 100 trabajadores del Centro de Coordinación, Comando, Control, Comunicaciones, Cómputo e Inteligencia -C5-, en Reynosa, laboran bajo protesta, tras la retención de su pago quincenal desde la segunda quincena de enero del presente año y la ausencia de pago de su compensación.

Foto El Mañana StaffParan actividades empleados del C5; argumentan malos tratos de superiores

  • Reynosa,Tam.

Alrededor de 100 trabajadores del Centro de Coordinación, Comando, Control, Comunicaciones, Cómputo e Inteligencia -C5-, en Reynosa, laboran bajo protesta, tras la retención de su pago quincenal desde la segunda quincena de enero del presente año y la ausencia de pago de su compensación.

Laura "N", con una antigüedad de 16 años, precisó que el director del C5 en Reynosa, de nombre Martín Alexandre, ha incurrido en presuntos abusos, trato déspota e intimidaciones a los empleados.

De monitorear las cámaras de videovigilancia de 9 municipios, desde Nuevo Laredo, Ciudad Mier, Camargo y Díaz Ordaz y Reynosa, en donde 4 empleados y en ocasiones sólo 2, tienen que estar monitoreando hasta 80 cámaras ante la negativa del Centro de Comando Central de contratar más personal, pues de las solicitudes, en muchos casos son rechazadas por no reunir las condiciones.

Dijo que se les pagan 3 mil 300 pesos por quincena, no hay prestaciones de ley, no créditos ni ayuda de vivienda, pues muchos empleados provienen de otros municipios.

La Subdirectora, Yuliam se suma a los hostigamientos laborales junto con el director del C5, quien los amenaza y trata en forma despectiva.

Los inconformes han solicitado una mesa de diálogo para resolver la inconsistencia laboral, pero refieren a EL MAÑANA, que no hay disposición, por lo que hacen pública su situación en espera de que, este clamor llegue a oídos del Gobernador del Estado e intervenga, pues su trabajo es esencial, lo mismo vigilando y monitoreando las ciudades en tareas de seguridad y prevención del delito que operando la red de emergencia 9-1-1.

El clima actual laboral del C5 es inestable y como polvorín amenaza con estallar ante la estela de omisiones y malos tratos que se aplican al personal.

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