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Florece comercio en el Altiplano…

En un negocio que se ubica en inmediaciones del penal del Altiplano se venden y acondicionan televisiones portátiles y cigarros para que familiares de los reos pasen los productos al penal.

México, D.F.

Florece comercio en el Altiplano…

En un recorrido, se constató que los comerciantes conocen las exigencias del penal, saben que las televisiones portátiles están permitidas por el reglamento y por eso acoplan los artefactos para que a los familiares no se los puedan rechazar los custodios.

Las televisiones no tienen pilas. Los audífonos, que cuestan 200 pesos, no tienen la función de subir el volumen y las antenas son de 50 centímetros de largo, como lo requiere el reglamento.

“¿Cuánto tiempo tiene tu preso detenido? Si tiene menos de cuatro meses no te van a dejar pasar ninguna televisión y tienes que pedir antes un permiso para que ingreses la tele”, dijo uno de los vendedores. En el establecimiento venden cigarros de 10 y 5 pesos la pieza, los cuales los colocan en cajas de jugos vacías o vasos de gelatina con tapa para que no se rompan y los puedan ingresar al penal, lo que no está permitido en ningún Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) del país.

Mientras se permaneció en el negocio, un cliente llegó a reparar una televisión que no se veía bien y una mujer que ingresaría al penal compró cinco cigarros que llevaría a un interno.

En la tienda hay servicio de paquetería, donde cuidan por 10 pesos las maletas de los familiares.

EMBELLECEN A LAS VISITAS

A un costado del penal del Altiplano, la estética “Imagen” se encarga del maquillaje y peinado de algunas mujeres que visitan cada nueve días a un recluso.

Este establecimiento inicia labores desde las 6:00 horas y cada día, en las primeras tres horas de labor, atiende en promedio a cuatro clientas, a quienes maquillan por 150 pesos y peinan por 80.

“Lo único que hacemos es alaciados y rizos porque allá adentro (en el penal) no las dejan pasar con pasadores porque son metales”, explicó la estilista.

También colocan uñas postizas a las mujeres que ingresan a la cárcel, lo que, según el reglamento no se permite a las visitas. 

“Tienen que estar listas antes de las 9:00, cuando la mayoría ingresa al penal. Yo a veces les presto el baño para que se vistan aquí”, señaló.

Para acudir a la estética se tiene que hacer cita con dos o tres días antes, explicó la dueña del comercio.



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