De payaso a vendedor de aguas, pan y antojitos para poder subsistir

Aquellos que se dedican a animar eventos sociales son los más perjudicados económicamente con las restricciones sanitarias del Covid-19. 

Carlos González, mejor conocido como “El payaso resortitos” es uno de ellos, quien ha tenido que dejar la comodidad de su hogar, para recorrer en un triciclo, las calles de esta frontera, vendiendo refrescos, pan y otros antojitos de forma ambulante. 

Explica casi la mitad de su vida se ha dedicado al oficio de payaso, pese a tener una discapacidad, sus ganas de salir adelante no han disminuido.