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La masacre que pudo evitarse

Un amigo advirtió sobre el hombre armado de Maine, pero no le hicieron caso; varios familiares le advirtieron a la policía que Card se había vuelto paranoico

Card viste un uniforme de camuflaje con un rifle de asalto colgado del pecho.La masacre que pudo evitarse

LEWISTON, Maine

Sean Hodgson veía con preocupación cómo su mejor amigo de casi dos décadas estaba desmoronándose. La ira y la paranoia de su antiguo compañero de habitación y colega reservista del Ejército de Estados Unidos crecían, tenía acceso a armas y se rehusaba a pedir ayuda. Así que Hodgson hizo lo más difícil de su vida: envió un texto sobre Robert Card al supervisor militar de ambos.

"Creo que va a enloquecer y a realizar un tiroteo masivo", escribió el 15 de septiembre.

Seis semanas después, Card asesinó a tiros a 18 personas en una bolera y un bar de Lewiston antes de acabar con su propia vida. Su cadáver fue encontrado en un remolque tras dos días de búsqueda y de un cierre de emergencia en toda la región

"No podía saber qué pensaba él. No sé exactamente qué sucedía", declaró Hodgson a The Associated Press la semana pasada en una entrevista exclusiva, la primera concedida desde el tiroteo del 25 de octubre. "Pero sé que yo tenía razón".

La serie de señales de advertencia sobre Card ha sido bien documentada. En mayo, varios familiares le advirtieron a la policía que Card se había vuelto paranoico, y expresaron su preocupación por el hecho de que tenía acceso a armas de fuego. En julio, Card fue hospitalizado en una unidad psiquiátrica por dos semanas tras darle un empellón a otro reservista y encerrarse en una habitación de un motel. En agosto, el Ejército le prohibió manejar armas de fuego durante sus labores y lo declaró no apto para ser enviado a alguna misión.

Y en septiembre, Hodgson lanzó la alerta más evidente, diciéndole a las autoridades que cambiaran el código de acceso de la entrada a las instalaciones de entrenamiento de la Reserva del Ejército, y que se armaran si Card se presentaba.

"Por favor", escribió. "Creo que está mal de la cabeza".

Pero las autoridades declinaron confrontar a Card, el ejemplo más claro de las oportunidades perdidas para intervenir y evitar el tiroteo más mortífero en la historia de ese estado. Eso es algo difícil de aceptar para Hodgson, quien ahora está rechazando un informe independiente presentado a la policía en el que se le describe como "exagerado" y "alarmista".

"Yo hice mi trabajo, y fui mucho más allá de él, y literalmente se los expliqué con todo detalle", declaró Hodgson, de 43 años, a quien se menciona únicamente por su apellido en los documentos relacionados con el caso. "No sé si pude haber sido aún más claro".

La versión de Hodgson, junto con los documentos policiales, videos y otras entrevistas, proporciona la imagen más completa hasta la fecha de las posibles equivocaciones previas al ataque.

En respuesta a las preguntas de la AP sobre la investigación y las advertencias de Hodgson, la Reserva del Ejército dijo esta semana en una declaración que nadie debería sacar conclusiones anticipadas sino hasta que su propia investigación y una averiguación independiente realizada por el inspector general del Ejército lleguen a su fin.

"En este momento, cualquier especulación sin tener todos los detalles podría afectar el resultado de la investigación. Podría haber más detalles disponibles una vez que la investigación haya sido concluida", dijo en la declaración la teniente coronel Addie Leonhardt, vocera de la Reserva del Ejército. Las autoridades no hicieron más comentarios.

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Robert Card, responsable de los tiroteos masivos en Lewiston, Maine.

Joel Merry, alguacil del condado Sagadahoc donde vivía Card, no respondió las preguntas de la AP sobre si las advertencias de Hodgson fueron tomadas lo suficientemente en serio, pero insinuó que se requieren cambios en las políticas públicas. Previamente dijo que su oficina había sido "completamente transparente" y que cooperaba con una comisión independiente nombrada por el gobernador.

Hodgson dijo ignorar dónde ocurrieron las fallas, pero piensa que se pudo haber hecho más para ayudar a su amigo y evitar la tragedia.

"Entiendo que hizo algo horrible. No estoy de acuerdo con ello. Pero yo lo quería", dijo. "Yo no quería nada de esto para nadie".

CONFUSIÓN DE IDENTIDAD

Durante gran parte de su amistad, Card fue " sensible", dijo Hodgson. Se conocieron en 2006 en la Reserva del Ejército y se volvieron especialmente cercanos cuando ambos se divorciaron más o menos en la misma época.

Cuando Hodgson fue desalojado de su apartamento en Nueva Hampshire en 2022, Card le dijo que se mudara a Maine y vivieron juntos aproximadamente un mes, señaló. Al ser hospitalizado Card en julio en Nueva York, Hodgson fue quien lo llevó en auto de regreso a Maine.

Para entonces, dijo Hodgson, Card comenzó a confiarle que creía que quienes le rodeaban lo acusaban de ser un pedófilo. Hodgson creía que algunas de las quejas de Card eran ciertas —un caso de confusión de identidad derivado de que existe otro Robert Card en el registro de agresores sexuales del estado—, y describió un incidente en la bolera cuando un padre alejó abruptamente a su pequeña hija de Card después de que éste la saludara.

"Siempre le creí. Siempre estuve con él", declaró Hodgson. "Soy la persona más cercana a Robert Card. Él alejó a todo el mundo, excepto a su madre".

"Fui el último a quien alejó".



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