El pueblo mexicano que limpia los restos de sus difuntos para prepararlos para el Día de Muertos

Con la idea de no olvidar a sus muertos y seguir teniéndolos cerca, los habitantes de Pomuch exhuman los restos, los limpian, los depositan en una caja de madera envueltos en un manto blanco y los colocan en un osario. En la imagen, un niño participa en la limpieza de huesos en Pomuch, el 31 de octubre de 2021.Martín Zetina (Cuartoscuro)

Con la idea de no olvidar a sus muertos y seguir teniéndolos cerca, los habitantes de Pomuch exhuman los restos, los limpian, los depositan en una caja de madera envueltos en un manto blanco y los colocan en un osario. En la imagen, un niño participa en la limpieza de huesos en Pomuch, el 31 de octubre de 2021.Martín Zetina (Cuartoscuro)

Una mujer enciende una vela por sus familiares fallecidos después de limpiar los restos y colocarlos sobre una tela bordada dentro de un osario, en Pomuch, el 23 de octubre de 2022.

Al morir un habitante de Pomuch, su cuerpo se coloca en una bóveda que permanecerá sellada por tres años, tras los cuales se exhuma para depositar los restos en un osario.

Este ritual es una tradición maya que, mezclada con la religión católica, afianza y legitima el muy mexicano deseo de no dejar ir a quienes mueren. En la imagen, Tuz Chi limpia un cráneo con una brocha durante el ritual previo al Día de Muertos.

Los restos de una persona fallecida colocados sobre una tela bordada dentro de un osario, después de ser limpiados como parte del ritual anual para honrar a los muertos.

La limpieza de los restos empieza alrededor del 25 de octubre y concluye el 30, pues el 31 las familias se dedican a montar ofrendas en sus casas y en el cementerio. En la imagen, dos mujeres limpian huesos en el cementerio de Pomuch.

No todas las familias deciden limpiar personalmente los huesos de sus antepasados, hay quienes pagan a los sepultureros del camposanto para que lo hagan ellos. En la imagen, Tuz Chi limpia los restos de un fallecido. 

Pese a que en México la exhumación de cadáveres es una práctica regulada por el Poder Judicial (se requiere un permiso de Ministerio Público y la persona que desea exhumar debe argumentar la razón por la que se extraerá el cuerpo), en Pomuch el proceso es sencillo, ya que solo se requiere el acta de defunción y una constancia de exhumación que expide el Gobierno municipal. En la imagen, un hombre limpia los restos de un fallecido, en el cementerio de Pomuch