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Voto por Internet, el comienzo

En la modalidad de votación electrónica destaca la creación de una llave criptográfica

Uno de los grandes retos que el INE deberá integrar principalmente con miras a la elección presidencial de 2024, es el desarrollo de un sistema de voto electrónico que facilite la participación de los mexicanos residentes en el extranjero.

Para ello, conformó unos lineamientos que contienen las características generales que debe cumplir dicho sistema basado en la modalidad de internet. Este sistema deberá garantizar la certeza, legalidad y transparencia de los sufragios que sean emitidos por la ciudadanía.

Voto por Internet, el comienzo

Este sistema de voto por internet podría incluir, además de la elección de presidente de la República y la de senadores, por parte de nuestros connacionales residentes en otros países, las elecciones de Gobernador y de Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, si así lo dispone la respectiva normativa, así como consultas populares o cualquier otra elección prevista tanto en la legislación federal como locales.

Tan sólo para la elección de 2021, además de la elección federal, habrá elecciones en 11 entidades federativas que reconocen el voto de sus ciudadanos en el extranjero: Baja California Sur, Chihuahua, Ciudad de México, Colima, Guerrero, Jalisco, Michoacán, Nayarit, Querétaro, San Luis Potosí y Querétaro.

Ahora bien, la modalidad de votación electrónica guarda varias características técnicas entre las que destacan la creación de una llave criptográfica que brindaría seguridad a la información registrada en el sistema; la apertura del sistema que contendría la información de las elecciones que se llevarían a cabo; la autentificación del votante; monitoreo del sistema que permitiría a los representantes de partidos políticos, candidatos independientes, observadores electorales y personal de diversos órganos electorales conocer la operación del sistema; cierre del sistema que integraría el procedimiento para la obtención de la base de datos con los votos cifrados mismos que no generarían un vínculo con el votante; y, el descifrado y cómputo de votos que permitiría generar las actas con los respectivos resultados.

Sobre este gran proyecto vale la pena mirar hacia el Instituto Electoral de la Ciudad de México que, en 2012, utilizó un mecanismo similar de voto por internet para que los ciudadanos pudieran votar por la elección de Jefe de Gobierno.

De acuerdo con el Instituto de los Mexicanos en el Exterior se estima que existen alrededor de 12 millones de mexicanos que viven fuera de nuestro país, de donde aproximadamente el 97% radica en los Estados Unidos de Norteamérica, lo que convierte a este proyecto en una enorme labor para el INE.

Sin embargo, consideramos que el INE debe avanzar, como la institución de vanguardia que lo ha caracterizado, en incidir en la utilización del voto electrónico en nuestro país para quienes residimos en la República Mexicana.

Para ello, podría tomar como base lo que han realizado algunos Organismos Públicos Locales Electorales como Coahuila, Jalisco y la Ciudad de México, por citar sólo algunos, en cuanto a la utilización de urnas o tabletas electrónicas para recibir la votación de la población que asiste a las casillas.

Dichos organismos han realizado desde pruebas piloto hasta la recepción de la votación de manera vinculante de algunas elecciones con óptimos resultados.

Esto coadyuvaría a la política de austeridad instrumentada por los órganos electorales de manera gradual hasta que, en algún momento toda la votación de los mexicanos tanto de los que residen al interior como del exterior puedan votar de forma electrónica con la aplicación de toda la tecnología que hoy se encuentra a nuestro alcance; con la transparencia en cada paso y con determinados procedimientos claros y auditables en todas sus fases, es decir, desde la planeación y desarrollo hasta la operación y resultados obtenidos.

Justamente la elección de 2021 puede ser un buen comienzo.

¡Hasta la próxima!