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Origen del nombre de Río Bravo…

¿Conoce usted cual es el origen del nombre de nuestra Ciudad y Municipio? Se relaciona con el río Bravo pero: ¿Por qué es así?.

Según la Real Academia de la Lengua Española, la toponimia es el conjunto de los nombres propios de lugar de un país o de una región y es también la rama de la onomástica que estudia el origen de los nombres propios de lugar, así como el significado del origen de su raíz.

Origen del nombre de Río Bravo…

Lo primero a considerar es que el nombre de la Ciudad y Municipio de Río Bravo, Tamaulipas, es un término cuya descripción se encuentra ligada a la realidad geográfica de nuestra región, debido a que obedece a la existencia de una corriente natural de agua, la que según algunos cronistas e historiadores, para 1598 se conocía en su parte baja como río Bravo.

Ahora veamos el fenómeno social: El desarrollo de la colonización del área que ocupa en la actualidad la ciudad de Río Bravo, puede considerarse como tardía, incluso hasta reciente, porque sus orígenes están relacionados con la fundación de la Villa de Nuestra Señora de Guadalupe de Reinosa, fundada el 14 de marzo de 1749, lo cual trajo colonos que eventualmente, se disgregaron alrededor de aquella Villa, ocupando espacios aledaños en rancherías que poco a poco fueron extendiéndose, algunas de ellas, paralelas al río Bravo.

Es el caso de una ranchería denominada El Ebano o Ebano, cuya presencia podemos ubicar a mediados del siglo XIX, en algunos planos y mapas de la época. El Ebano se encontraba aledaño a un crucero o cruce de caminos; de un Camino Real que comunicaba Reynosa con Matamoros y otro que, procedente del río Bravo, se dirigía hacia el sur, sitio también denominado El Crucero.

Entre los años de 1882 a 1884, se construye un ramal de ferrocarril de vía angosta, conocido también como el Camino de Fierro, con locomotoras de vapor (que utilizaban calderas con quemador de aceite), que inició en Matamoros terminando en San Miguel de las Cuevas, hoy Díaz Ordaz. Bajo Decreto de 1881: “Dado en el Palacio del Poder Ejecutivo de la Unión”, siendo Presidente de la República el matamorense Manuel González (1833-1893), con un ramal de 120 kilómetros y  con apenas 13 estaciones.

Este evento fue fundamental para el futuro de esta región, ya que en el denominado Crucero, se instaló una Estación de Bandera, que la empresa ferroviaria Compañía Constructora Nacional Mexicana, representada por el general norteamericano James Sullivan, determinó nombrar como “Estación Ebano” y que no era otra cosa que una barreta metálica enterrada en el suelo, con una bandera  roja también de metal, que indicaba el sitio preciso, donde el ferrocarril tenía autorización para detenerse.

Para el año de 1888, un grupo de accionistas principalmente españoles, encabezados por el millonario e influyente indiano español, Iñigo Noriega Laso, adquieren el gigantesco territorio de El Sauto, que era un tercio del estado de Tamaulipas.

En 1895, debido al proyecto capitalista impulsado por Iñigo Noriega, la base social de El Sauto, ubicada entonces en una rancho llamado El Soldadito, aledaño a la localidad de San Fernando, fue trasladada a lo que consideraron un espacio estratégico, los terrenos baldíos colindantes con El Ebano, y se fundará con cincuenta familias un nuevo poblado a la que la naciente empresa, denominada “Compañía Agrícola y en Comandita La Sauteña” bautizó como Colombres.

La Sauteña fue quizás la empresa más importante y ambiciosa de Iñigo Noriega Laso, que contemplaba un extraordinario y ambicioso proyecto de inversión empresarial, tanto  agrícola, como ganadero e industrial, con el pueblo de Colombres como punto nodal que en el futuro se proyectaba como eje de un ambicioso plan de colonización y expansión.

En el año de 1905, se inaugura el ramal del Ferrocarril Nacional Mexicano, entre Matamoros y Monterrey, con treinta y tres estaciones y que hacía el recorrido en once horas entre ambas localidades. En el sitio donde se encontraba la antigua estación de bandera, se construyó una moderna (para la época obviamente), estación de madera, que incluía una taquilla, almacén, telégrafo, correo, sala y andén para pasajeros, además la oficina para el Jefe de la Estación. 


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 Iñigo Noriega Laso, fundador de Colombres.


José María García Báez

José María García Báez

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