Bloqueo en San Fernando

Una de las prioridades que merecen atención, es el tema de la salud.

Los gobiernos, prácticamente de todos los órdenes, están obligados a responder por ley en la materia y no se diga, como parte de su agenda.

Incluso, hoy más que nunca, cuando se denuncian carencias, falta medicamento o especialistas, el primer responsable, como es el gobierno federal y también el gobierno estatal, están obligados a dar respuestas.

Pero cuando se encuentran con Presidentes Municipales como Marbella Ramírez de San Fernando, las respuestas a estas demandas, no suelen ser tan fáciles.

La Alcaldesa de San Fernando, no solo había frenado los permisos y hasta procesos legales para la donación de terrenos para la construcción de un Hospital, hoy se adjudican las obras que han sido gestionadas por el propio gobernador Américo Villarreal.

El pasado 22 de febrero de este 2023, el mandatario, logró que se aprobará, a través del Programa de Apoyo a la Comunidad y Medio Ambiente, el financiamiento para la sustitución por obra nueva del Hospital General de San Fernando con 45 camas censables.

Con esta obra, se proyecta beneficiar a más de 52 mil habitantes sin seguridad social de los municipios de San Fernando, Burgos, Méndez y Cruillas, de acuerdo a lo que ha declarado Gabriel de la Garza, subsecretario de Planeación y Calidad.

Pero el problema con el que se ha encontrado el gobierno del Estado, es la terca posición de la Alcaldesa Ramírez, para seguir bloqueando este tipo de obras, porque el Estado ha respetado la autonomía del Ayuntamiento.

Solo que esa posición, está motivada por César Verástegui Ostos "El Truko" y le ha ordenado a la Alcaldesa que no autorice ningún permiso; que bloquee todas las acciones y obras que tiene proyectado hacer el Gobierno del Estado.

Si hoy no se hacen obras por parte del Estado en el Municipio de San Fernando, es porque Truko no quiere y desde luego que él no se manda solo, también debe acatar las órdenes que le impone Ismael García y el mismo Francisco.

Es necesario que los ciudadanos como Mayra Sánchez, una de las gestoras de este hospital en San Fernando y su grupo ciudadano, tengan el verdadero pulso de lo que está pasando.

Los que no quieren que se hagan estas obras, es la panista Marbella Ramírez y César Verástegui, con la finalidad de que, políticamente, el gobierno del Estado se vea debilitado y aparezca como irresponsable para tomar ventaja con sus discursos en las campañas del 2024.

Es decir, quien actúa de una manera irresponsable, son estos personajes.

Evidentemente, estar en contra de obras como la construcción de un hospital, refleja el bajo nivel de cultura personal y política. Las acciones de una oposición, como estas, no solo están afectando los beneficios para los ciudadanos y estos integrantes del PAN, lo están haciendo para que se vean afectados miles de personas.

La foto del día

Por cierto que, el Truko, buscando la posibilidad de que algunas diputadas sin partido regresarán a las filas del PAN, se le vino abajo.

Y pues, como que no está en sintonía con la gente del CDE del partido porque, mientras el ex candidato a gobernador cabildeaba con las diputadas sin partido, el mismo instituto les notificada de su expulsión, ¿pues entonces?.

Es decir, o los acuerdos se cayeron en el camino o de plano, no hubo una línea de comunicación más efectiva en esta operación política.

Las mismas diputadas, como Linda Mireya González Zúñiga, reveló que fue tanta la insistencia para que regresaran a las filas del PAN que, les ofrecieron (sin decir quién lo hizo), millones de pesos, propiedades y privilegios para llegar por la puerta grande, pero ni esa operación surtió efectos.

Vaya que ha llamado la atención esa foto entre el Presidente de México López Obrador y el Gobernador Américo, en Palacio Nacional.

La imaginación no tiene límites para interpretar lo que nos quiso decir AMLO al pararse al lado del sillón más importante de palacio, con Américo a su lado. 

Agarrar con la mano derecha el respaldo del sillón y con la izquierda abrazar a AVA, pareciera que quiere transmitir a su visitante parte del poder que emana de ese sillón.

No solo es eso. Ambos esbozan una ligera sonrisa, mientras el titular del poder ejecutivo federal apoya su mano sobre el hombro del mandatario tamaulipeco.  

Toca la coincidencia que el presidente hizo publicar en sus redes sociales esa fotografía junto al lado de otra que se tomó con el gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri, también en la sede del poder, más no en el sitio principal de su oficina. También con sonrisa, respeto y cordialidad, pero un saludo. 

El trato hacia el tamaulipeco es de respeto, cordialidad, afecto y confianza. Solo se abraza a una persona cuando hay confianza y el abrazo es una muestra de cariño. 

Desde la relación amistosa que existió entre Luis Echeverría y Enrique Cárdenas, no se había visto algo parecido en la relación presidencial con algún exgobernador tamaulipeco.

La relación presidente-gobernador es provechosa y ya le hacía falta al Estado algo así, porque al menos durante los cuatro más recientes sexenios federales, los resultados no eran los deseados por los tamaulipecos.